Rashomon Shipper

23.1

era extremadamente incómodo, en verdad que si. Habían ignorado el show de hace un momento y sus corazones latientes con fervor; solo fue un momento, un destello de una mala jugada del destino o eso pensaron coicidentemete ambos.

Akutagawa le llevó al baño donde lo dejó, Atsushi se quitó la ropa rota y espero, claro que tomó un refrescante baño, era obvio ahora que se quedaría en esa casa.

Al salir de bañarse noto que había una muda de ropa, tomó el short amplio y corto, claro no había ropa interior pero si un short que parecía uno, también una camisa bastante holgada, dudaba que fuese del mismo mafioso.

Salió del baño mirando al mayor de frente, estaba serio, — ya era hora — mencionó dejando caer sus abrigo por sus hombros. Atsushi trago saliva

— A-Akutagawa...

— ni siquiera lo digas, no digas nada...

— s-si...

Muy al contrario de lo que pensaban, Akutagawa de había quitado su abrigo por que no quería que Rashomon volviera a atacar a Atsushi. Espero al menor para sentirse seguro sin su amado abrigo u por consistente, el mafioso llevaba solo un short y sudadera. Sentados uno al lado del otro, incómodos — tienes piernas delgadas

— cállate Jinko

— me sorprende por que te la pasas en el gimnasio con Chuuya-san

— piernas delgadas no significa "no fuertes" mejor músculo firme a peso muerto

Atsushi miraba las piernas del mayor, Akutagawa lo noto y suspiró — tócalas

— gracias

Atsushi acercó su mano a la pierna del mafioso, la tomó por en medio, bajo y subió, volvió a bajar y le apretó — es muy firme. — mencionó para mirarlo y toparse con su gesto sonrojado — las mías no son así. To-tócame también — pidió tomando la mano del mayor y poniéndola en su pierna

— oh... woow Jinko, tienes una piel muy suave ¿como?

— no se

Akutagawa acarició de más la pierna del menor, estaba intrigado por su suavidad — ¿porque será?

— fotosíntesis quizá

— ¿Que?

— suelo dormir en el pasto y cosas así, tomó baños de sol

Akutagawa comenzó a reír — eres un gato

— no lo soy — se quejó

— lo eres

Atsushi tomó el cojín de la sala golpeándole — no

— Jinko — tomó el otro cojín y lo golpeó también — no empieces una pelea

Atsushi se levantó con el cojín — ven por mi diablo

Akutagawa sonrió, se movió en el mismo suelo usando sus firmes piernas para tirar al albino e irse encima suyo.

Su pelea de almohadas era acompañada de muchas carcajeadas por parte de ambos.

...
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