Baby Vex

Un Riddle y Una Zabat.

—Deja de ser tan zorra—Exclamo Tom cuando se acabo la primera clase, y se acercó a mi solo para decirme eso.

Su mirada como siempre no se separaba de la mía, tenias qué tener siempre contacto visual cuando hablas con el.
Los alumnos ya no estaban cerca de nosotros, y lo que quisiéramos decirnos lo podíamos decir sin que nadie nos escuchara.

—Dejarias de ser tan mierda, no somos un igual Tom, y créeme, tu mierda de destruirme no servirá, realmente eres inferior a mi y te lo dejare muy en claro—Respondí.

Agarré agallas para decirle eso a Tom, ya qué ningún ser humano se atrevería, pero al parecer eso le gusto. Sus labios se convirtieron en una sonrisa, y se arqueo para terminar en mi rostro, como siempre.

—Eres un maldito monstruo absurdo.-Susurro-.Pero me gusta—Sus ojos estaba tan clavados en los míos que sentía como me temblaban las piernas.

—¿Hay algo qué no te guste de mi?—Respondí, agarrandolo de su corbata y jalandolo a mi.

Tenso su mandíbula, al parecer al igual que a mi odiaba qué la gente lo toque, y bueno, es razonable.

—Quita tus manos de encima—Habló.

Me reí solo un poco, para mantener el contacto visual más tiempo de lo esperado, lo acerque un poco más a mi, sus labios estaban tan cerca de los míos qué estos rozaron.

—¿Diras eso cuando estés dentro?—Sonreí, nuestra mente estaba tan jodida y tan conectada que sonrió cuando dije eso, lo entendió por completo.

—Eso es diferente Zabat.-Susurro-.Pero no es mala idea.

—Si no quieres qué te toque puedes atarme—Respondí, era sincera con el, y de alguna manera creí que estábamos jodiendo, pero a cambio de eso apretó mi cintura.

—Dandome ideas, ¿No?.-Hizo una pausa-.Estas realmente loca—Se elejo de mi bruscamente, soltandose del agarre de la corbata y yéndose de ahí.

.......

En la noche estaba escuchando música en mi habitación, el tocadiscos estaba bastante alto, no quería que los alumnos me dijeran algo y también había puesto el hechizo silenciador, me encanta estar así en Hogwarts, uno de mis mayores sueños era hacer eso y lo estaba cumpliendo.

Tengo un tipo de instinto cuando escucho música, en el que de alguna manera siento cuando alguien me esta hablando aunque la musica esté a su punto máximo, y bueno, si alguien tocaba la puerta ellos no escucharían la música, y yo no los escucharía a ellos en la primera.
Esa sensación llegó cuando estaba a la mitad de la canción de <3-Pimp Flaco, una canción en español qué si alguien de ahí la escuchaba no entendería lo que decía.

Me levanté de la cama y me dirigí a la puerta, cuando la abrí vi a un Tom tratando de tocar nuevamente.

—Qué lenta eres—Exclamo, cuando escucho la música me lanzo una mirada asesina y yo me reí.

—¿Que quieres?.

—Dejame entrar—Exclamó secamente.

Abri solo un poco la puerta y entro como Juan por su casa, me quedé parada en la puerta para qué saliera pero era realmente inútil, no lo haría, no saldría.
Se acercó al tocadiscos y lo observó solo un poco, le molestaba el ruido por su expresión, y, aparte, porque estaba en español y no sabia lo que decía.

Toco el tocastidos tratando de parar la música, pero gracias al guión, eso era imposible.

—Idiota, aléjate de ahí—Me quite de la puerta y camine hacia el, lo empuje hacia un lado alejándolo del tocadiscos, lo apagué y voltee a verlo.
—¿Que haces aquí?—Me cruze de brazos y me recargue en la mesa en donde estaba el tocastidos.