my only || hyunin/seungin

마흔둘

—Por favor no v-vuelvas a d-dejarme Innie,.. –seguía susurrando en su oído, acariciando su rubio y suave cabello con lágrimas en sus ojos.

Al sentir un leve empujón en su pecho, se separó un poco del cuerpo que seguía debajo del suyo y sus rostros brillantes por el sudor quedaron frente a frente.

Hyunjin no supo cómo reaccionar al caer en cuenta de que el que estaba allí, con su respiración algo agitada todavía y su cuerpo desnudo y bañado en sudor, era Felix, no su Jeongin.

Se alejó despacio de su cuerpo, mirando a sus ojos fijamente a través de las lágrimas que comenzaban a acumularse en los suyos.

Otra vez le había pasado lo mismo.

Otra vez Jeongin hacía presencia en su cabeza mientras trataba de olvidarlo tomando el cuerpo de alguien más.

Felix se levantó de la cama para buscar su ropa. Una vez que tuvo todo entre sus manos, comenzó a vestirse sin decir nada. Hyunjin hizo lo mismo, se puso sus pantalones y se sentó a la orilla de la cama

En ese momento solo se escuchaba la fuerte música a lo lejos, los sollozos que Hyunjin trataba de ocultar y la puerta de la habitación siendo golpeada y forzada.

—F-Felix yo... –el rubio negó, como restándole importancia a lo que acababa de ocurrir, caminando hacia la puerta. Al abrir esta se encontró con Changbin, que lo miró de pies a cabeza, pero no de una mala forma.

Felix se sintió muy asqueroso.

—¿Lixie? –el nombrado bajó la mirada y apretó sus labios. Changbin tomó a su novio por los hombros y lo hizo hacia un lado, husmeando dentro de la habitación. Cuando vio a Hyunjin semidesnudo sobre la cama, no lo pensó dos veces y se acercó a él hecho una furia.

—¡Tú pedazo de mierda! –en cuanto estuvo frente suyo, le dio un fuerte golpe en la cara a Hyunjin, haciendo que cayera al suelo estruendosamente.

Dolía, pero se lo merecía. Además, quería sentir dolor, mucho dolor.

Hyunjin no se defendió, dejó que su amigo descargara toda su ira sobre él.

—¡Eres una mierda! ¡UNA MIERDA!

Changbin estaba sobre el torso desnudo de Hyunjin, golpeándolo sin parar. Su nariz estaba sangrando exageradamente, al igual que sus labios. Y sus ojos no dejaban de soltar lágrimas a pesar de estar cerrados.

—Binnie, y-ya detente –suplicaba Felix muy asustado al ver a Changbin tan furioso, jamás lo había visto así.

—¡Cómo pudiste! –gritaba el castaño tomando por los hombros a Hyunjin y luego dejándolo caer, cegado por la ira.

Felix no lo soportó más y se abalanzó sobre su novio en un abrazo, haciendo que ambos cayeran al suelo.

—Ya está Binnie, p-por favor detente...s-solo vámonos –tomó la mano de su novio y lo ayudó a ponerse de pie. Ver el rostro de Hyunjin teñido de rojo lo aterró aún más. Changbin quería seguir golpeándolo hasta matarlo, pero no era su intención asustar más a su novio.

Hyunjin pudo escuchar cuando ambos dejaron la habitación y abrió sus ojos, aún recostado donde mismo.

Estaba vivo. Maldita sea.

Se levantó y alcanzó su camiseta, colocándosela para salir de esa habitación. Su rostro no mostraba expresión alguna, solo era un rostro molido a golpes.

Bajó las escaleras y caminó entre la multitud sin ningún miedo de que lo vieran de esa manera. Aunque todos estaban muy ocupados como para siquiera notar su presencia.