서른셋

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Seungmin lo miró preocupado por lo que había dicho.

—Innie...sabes que él n-no es bueno para ti...

—Pero ¿y si cambia? –Seungmin podía ver un brillo de esperanza en los ojos de Jeongin, y eso le daba mucha lástima, su pequeño no se daba cuenta de que Hyunjin no cambiaría, pero no quería decírselo. —Olvídalo, tal vez sí es muy tonto...¿por qué tengo que amarlo tanto? –soltó un fuerte sollozo y Seungmin se acercó para envolverlo en un abrazo. Mientras tanto, mordía su lengua con fuerza para no soltar lo que estaba pensando en decirle a Jeongin, no quería parecer insistente y alejar a Jeongin por eso. Pero simplemente no lo soportó más y terminó por dejarlo salir.

—En lugar de darle una oportunidad a él...¿por qué no me das una a mí? –le preguntó, arrepintiéndose de inmediato. Jeongin quiso soltar el abrazo para ver a Seungmin, pero este lo apretó más, no quería que lo viera, se sentía algo avergonzado por haber dicho eso.

—Seungmin... –musitó Jeongin con sus ojos cristalizados.

—No tienes que responder Innie, olvida que dije eso ¿está bien?

Finalmente se separó del abrazo y acarició el pómulo herido de Jeongin.

—Esto...¿te duele? –Jeongin negó y Seungmin sonrió levemente –bien, ahora m-me iré, descansa un poco. Seungmin se levantó de la silla y caminó fuera de la habitación con Cooky tras él. Ahora se sentía desanimado, pero no dejaría que Jeongin lo viese así y no se permitiría estar triste cuando Jeongin lo necesitaba más.

•*¨*•.¸¸☆*・゚

Hyunjin estaba con su celular, en una cama ajena y con la mitad de su cuerpo desnudo, revisando el chat de Jeongin como de costumbre.

Estás bien?

Te fuiste temprano?

Lo siento por lo de hoy, solo quería que habláramos...

El chico a su lado se removió en la cama y le quitó el dispositivo, sabía lo que estaba haciendo.

—Deja de preocuparte por ese niñato Hyunjinnie, no necesitas a alguien como él –acercó al peli negro aún más a su cuerpo y comenzó a dejar besos en su cuello, el cual estaba lleno de notables marcas moradas.

—Deja eso BamBam –se quejó Hyunjin por las cosquillas que causaban esas caricias en su cuello.

—Anda Hyunjinnie, solo quédate conmigo, nunca la pasarás mal y no tendrás que preocuparte por nada, porque te daré de todo lo que quieras y nos vamos a divertir mucho, ¿qué dices? –el chico siguió con las caricias y los besos en el cuello. Ante el silencio de Hyunjin a su pregunta, se detuvo y lo miró fijamente. —¿Y? –insistió.

Hyunjin finalmente asintió y BamBam atrapó sus labios en un beso subido de tono. Iba a posicionarse sobre el cuerpo de Hyunjin, sin cortar el beso, pero este lo detuvo.

—Es-espera, ya es tarde, debería irme. –BamBam bufó.

—De qué hablas, estás a cuatro departamentos de aquí –y siguió con lo suyo.

—Anda, mañana vendré de nuevo, se está haciendo tarde y tengo cosas que hacer. –finalmente salió de encima del peli negro y este se levantó, colocándose las prendas que le faltaban.

—Estuviste increíble, como siempre –el mayor le guiñó un ojo aún en la cama y Hyunjin hizo lo mismo, dirigiéndose a la puerta para salir de allí.

Cuando llegó a su departamento, cerró la puerta y de inmediato sacó su teléfono. Sus mensajes de nuevo estaban leídos y habían sido ignorados. Eso le enojó mucho y finalmente eliminó el contacto de Jeongin. No iba a seguir insistiéndole, prefería comenzar a divertirse.

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my only || hyunin/seunginDonde viven las historias. Descúbrelo ahora