마흔아홉

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Jeongin se congeló completamente al oír esas palabras que pronunció Jisung. Su rostro palideció, no era capaz de reaccionar. Sentía cómo se formaba un nudo en su garganta y en seguida comenzaron a salir lágrimas por montones.

—Sus padres me llamaron para decírmelo, ocurrió hace una hora cerca de su instituto, no me dijeron qué pasó, pero si me... –Minho estaba explicando lo ocurrido, pero Jeongin no pudo escuchar más, era como si sus oídos se rehusaran a escuchar todo lo que tenía para decir con respecto a ese accidente.

Ni se percató de cuándo fue que comenzaron a caminar fuera del instituto. Jisung lo tiraba del brazo y él caminaba detrás suyo, pero no sentía como si lo estuviera haciendo.

Veía borroso gracias a las lágrimas que no paraban de salir, sentía que todo a su alrededor iba en cámara lenta, sus oídos se habían bloqueado, dejando de percibir con claridad cualquier tipo de sonido que quisiera llegar a estos, la voz de los otros dos se escuchaba extremadamente lejana, sentía que, de algún modo, se estaba hundiendo, allí y en ese instante.

Lo único que ocupaba su mente era Seungmin, aún no era capaz de entender cómo es que había sucedido...¿qué fue lo que pasó?

Sentía que en cualquier momento caería rendido de rodillas al suelo.
Pedía con todas sus fuerzas que no hubiera sido nada grave ¿por qué tenía que ocurrirle eso a Seungmin? ¿por qué no le tocó a él?

De pronto sus piernas flaquearon, provocando que cayera estruendosamente al suelo, a pesar de que Jisung le llevara tomado del brazo.

—Jeongin levántate –habló Jisung tratando de ayudarlo a ponerse de pie, pero Jeongin no cooperaba, se sentía débil e incapaz de hacer algún movimiento o de siquiera decir algo. Minho fue hacia ellos y ayudó a Jisung a levantarlo. En un acto de desesperación al sentir el cuerpo de Jeongin tan débil, decidió cargarlo el resto del camino hasta su auto.

Jisung subió en la parte trasera para quedarse junto a Jeongin en el camino, la noticia en serio le había puesto muy mal.

—Él...¿él e-está bien? –musitó arrastrando las palabras.

—Aún no lo sabemos, sus padres llegaron hace poco al hospital...

—¡Ocurrió hace una hora! –exclamó Jeongin muy enojado, tomando por sorpresa a los otros dos y dándoles un pequeño susto —¿p-por qué n-no llamaron antes? –preguntó volviendo a su tono de voz apagado y débil.

—No podían comunicarse, su teléfono se rompió en el accidente y tuvieron que revisar su ficha para poder encontrar algún contacto –explicó Minho tratando de hacer que se calmara.

Jeongin sentía que podría morir en cualquier momento, la preocupación estaba consumiéndolo, temía lo peor aunque trataba de no hacerlo.

Cuando llegaron al hospital bajó inmediatamente del auto, comenzando a correr hacia el interior del lugar y Jisung corrió tras él en un intento de detenerlo.

—¡Jeongin espera!

Cuando estuvo dentro, todas las personas que estaban allí se le quedaron viendo, pero no le importó mucho. Cuando se percató de que no tenía ni la menor idea de dónde estaba Seungmin, se volteó a ver a Jisung, que había llegado a su lado, buscando por alguna respuesta.

—¿D-dónde está él? ¡Dónde está! –no podía seguir esperando a que Jisung se dignara a responderle, por lo que se adentró en los blancos pasillos por su cuenta con la intención de encontrar a Seungmin.

—¡Jeongin por favor cálmate! aún no puedes verlo... –Jeongin se detuvo y miró a Jisung incrédulo por lo que acababa de oír —él sigue en el quirófano.

—¿Él q-qué...? –Jeongin comenzó a entrar en pánico por milésima vez en lo que iba de la mañana, cosa que Jisung pudo notar con facilidad en si rostro —tranquilo Jeongin, va a estar bien...

Jeongin llevó sus manos a su cabello y enredó sus dedos en este, dejándolos allí. Se dejó caer en el asiento más cercano y agachó su mirada, necesitaba saber algo sobre el estado de Seungmin.

No se había percatado de que Minho no estaba con ellos hasta que lo vio llegar junto a quienes suponía eran los padres de Seungmin. Al verlos se levantó de inmediato, limpiándose las lágrimas e inclinándose frente a ellos para saludarlos.

—H-hola señor y señora Kim...s-soy Jeongin y-yo... –guardó silencio unos segundos, no sabía si decirles en ese momento sobre su relación con Seungmin.

—Él es novio de Seungmin –se adelantó Jisung, haciendo que Jeongin se sonrojara sin poder evitarlo, pero agradeciendo que su amigo lo haya dicho por él. Asintió con una sonrisa pequeña a sus suegros.

—Ojalá n-nos hubiéramos podido conocer en una...situación diferente –comentó haciendo una mueca triste.

La mujer fue la primera en acercarse a Jeongin, tomando sus manos con cariño y luego sonriéndole.

—Que niño más lindo ha conseguido Seungmin, ¿no crees cariño? –preguntó volteándose a ver a su esposo, quien le sonrió también a Jeongin, que se encontraba muy sonrojado por ser llamado "niño" y además "lindo" —¿Cómo se porta Seungmin contigo? ¿Es bueno?

Jeongin asintió de inmediato y repetidas veces esbozando una gran sonrisa.

—Él es genial –aseguró sin siquiera pensarlo. La mujer iba a decir algo, pero en ese momento llegó un doctor a su lado, ganándose la atención de todos. —¿C-cómo está él? –se apresuró a preguntar Jeongin acercándose al profesional, que soltó un suspiro agotado.

—Hace unos minutos dejó el quirófano y –antes de continuar hizo una pausa innecesariamente dramática —...debo informarles que él está en coma.

Jeongin tomó al doctor por los hombros sin importarle nada.

—¿Dónde está? Por favor d-dígame –le suplicó Jeongin.

—Innie, deja que sus padres... —Jisung intervino y Jeongin se detuvo, dándose cuenta de que quizás estaba siendo algo egoísta. Se hizo hacia atrás y se disculpó con los dos, yendo a sentarse nuevamente.

—¿Qué fue lo que le pasó? –preguntó Jeongin rompiendo el silencio, aún no estaba al tanto de lo que había ocurrido exactamente. Pero su pregunta quedó en el aire. Los tres llevaron su atención a un policía que acababa de entrar al hospital, dirigiéndose en la dirección que fueron los padres de Seungmin. Jeongin no le tomó mucha importancia, ¿qué tendría que ver un policía en ese asunto?

De pronto Minho se puso en marcha tras el policía, haciéndoles señas para que le siguieran a Jisung y a él mientras se alejaba. Jeongin frunció el ceño, pero lo siguió igualmente.

Cuando vio que el hombre se detuvo frente a la puerta que tenía un papel de tamaño mediano con el nombre y apellido de Seungmin, se confundió y preocupó aún más.

Se quedaron en el pasillo, junto a la puerta de la habitación, el policía había dejado la puerta entreabierta y podían escuchar lo que hablaba con los padres de Seungmin.

—Hablamos con la persona que atropelló al joven Kim –comenzó a hablar el uniformado, dejando sorprendidos a todos los presentes que escuchaban eso. —Nos dijo que alguien lo empujó a la calle y luego escapó, no pudo darnos características de la persona porque su rostro estaba cubierto y su ropa era negra completamente, no había nada que destacara.

Jeongin sintió su corazón detenerse, ¿quién sería capaz de hacerle eso a Seungmin?

Por otro lado, Minho y Jisung ya se hacían una idea y, aunque parecía demasiado obvio, no eran capaces de terminar de creerlo.

—Revisamos las cámaras de seguridad cercanas para confirmar lo que dijo y...efectivamente alguien atentó contra la vida del joven Kim.

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my only || hyunin/seunginDonde viven las historias. Descúbrelo ahora