37. Make Baby Kisses French
Louis estaba exhausto al día siguiente. Se quejó adorablemente cuando lo desperté y comió su desayuno con los ojos cerrados. Se dormía cuando podía, con la cabeza colgando por un lado. No estaba seguro de qué era lo que había drenado más su moral, la pelea o la falta de sueño, pero estaba preocupado por él, especialmente cuando rechazó la mitad de mi Snickers. Él adoraba el chocolate, así que siempre era un buen termómetro para su estado de ánimo.
En nuestra reunión con Simon, pasó los primeros diez minutos asintiendo febrilmente, muy seguramente para ocultar su cansancio, y los siguientes cincuenta colapsó en el sofá con la cabeza en mi hombro, con la nariz en mi cuello como un perrito. No me molesté en despertarlo porque Simon rodó los ojos.
Puse un brazo alrededor de sus hombros y lo atraje a mi pecho y gentilmente coloqué una mano en sus ojos para cubrirlo de la luz. La reunión continuó, pero mi atención estaba dividida porque, por mucho que me importara el consejo de Simon, no podía evitar estar distraído por lo mucho que quería llenar de besos la frente de Louis. Supongo que la batalla en mi mente era siempre sobre el respeto que le tenía a Simon como nuestro mentor contra el amor que le tenía a Louis como mi novio.
Zayn intentó despertar a Louis solo para ser interceptado por mi mirada. Simon tuvo que toser para apartarnos esa vez y yo realmente temía que la animosidad entre nosotros estuviera ahí para quedarse. No quería pelear con ellos, con ninguno—¡no quería pelear con nadie! Solo no entendía por qué me ponía tan agresivo cuando se trataba de Lou. Los sentimientos eran primitivos—se superponían por completo sobre todo pensamiento racional. Así que, a pesar de que Zayn quería lo mejor para Louis, yo no podía evitar ser protector. No puedes evitar los celos y no puedes evitar la furia y definitivamente no puedes evitar el miedo.
La reunión terminó no siendo significativa, así que Louis no se perdió de mucho. Simon solo quería ver cómo estábamos, ya que las últimas semanas estaban cerca. Por la manera en que su miraba estuvo principalmente en mí, supe que quería saber cómo estaba yo especialmente. Su mirada analítica me hizo querer aferrarme más fuerte a Louis, pero la manera en que su labio se contraía con asombro, me hacía querer alejarlo. Estaba en conflicto y perdido. No podía leer las emociones en su rostro, así que no sé lo que quería de mí.
Debió notar que había arreglado las cosas. La presencia de Louis era pista suficiente. Él sabía que había tomado su consejo, sin importar cuál hubiera sido ese consejo en primer lugar. Probablemente esa fue la razón por la que no me llamó luego de pedir que nos retiráramos. Solamente susurró, "buen chico, Harry," cuando todos nos levantamos para irnos.
Louis se estremeció junto a mí, mirándonos con ojos desconfiados, pero Simon lo ignoró fácilmente, enfocándose en mí, el centro del escenario. Yo no estaba feliz con la tensión. Apenas podía contener mi respingo cuando Louis tomó mi mano. No me soltó incluso cuando Simon miró nuestras manos unidas y alzó una ceja.
"Mantengan eso lejos de las cámaras," dijo Simon a modo de despedida, "no les gustará eso..."
"Lo haremos, señor," respondí de inmediato como un perrito obediente, a pesar de que estaba confundido.
¿No había sido él quien había dicho lo contrario la última vez? ¿No dijo él que les gustaba? ¿Y quiénes eran ellos? ¿Los fans que nos aceptarían, los fans que no lo harían o sus padres de quienes más dependíamos? Era muy pronto--no éramos nada aún, y aun así ya nos preocupábamos de deberle algo a estas personas. Les debíamos el describir una mala versión de la realidad, una falsa, porque en realidad había personas gay y amor gay.
"Mantenga su nariz fuera de nuestro asunto," murmuró Louis cuando estuvimos lo suficientemente lejos.
A ese punto, no podía retirar mi mano de la suya incluso si quisiera. Solo suspiré, entrelazando nuestros dedos y esperando lo mejor.
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Fetus | Larry Stylinson | Jayme Dray - Traducción oficial
Fanfiction"Él tenía una voz chillona, un horrible corte de cabello, el cuerpo de una chica de trece años y la mente de un chico de trece años. ¿Qué tenía para siquiera enamorarse de él?" Historia original de Jayme Dray, el autor de Confessions of a Gay Disney...