Relapse ★ Bucky Barnes

Reflexiona sobre lo bueno

Marlena dejó escapar un suspiro mientras cerraba su diario. Cayó de espaldas sobre la cama, su cabeza golpeó la almohada con un suave silbido. Sostuvo el diario contra su pecho, deseando nada más que  fuera Bucky. Lo extrañaba más de lo que jamás pensó que podía, y hablar con él a través de un diario no le estaba haciendo bien. Necesitaba que él estuviera allí con ella, pero la idea de no saber cuándo, eso la mataba por dentro. El hecho de que su cumpleaños fuera en dos días lo empeoró mucho. Quería que él estuviera allí para pasarlo con ella, de lo contrario no sería un cumpleaños muy feliz.

Marlena volvió a dejar el diario en la mesita de noche y se sentó, pasando una mano por su cabello hasta los hombros. Se sentó durante unos segundos contemplando qué era lo que quería hacer, y cuando finalmente se decidió a querer tomar una siesta, la voz de Wanda le impidió hacerlo.

-Marlena-,llamó desde abajo. -Hay un paquete aquí para ti-.

Marlena gimió y se levantó de la cama, sin perder tiempo en salir de su habitación y bajar las escaleras. Justo cuando Marlena se bajó del último escalón, Wanda cerró la puerta principal y se dio la vuelta con una pequeña caja en la mano. Le dio a Marlena una pequeña sonrisa y se la entregó, siguiéndola a la cocina para que pudiera abrirla.

-¿Sabes quién lo envió?-.Preguntó Wanda mientras ocupaba su lugar detrás del mostrador.

Marlena negó con la cabeza y abrió una de las solapas de cartón. -No dice en la caja-.

-¿Qué hay ahí dentro?-.

Marlena sonrió ante la curiosidad de su prima y arrojó el contenido de la caja sobre el mostrador. Sus ojos se abrieron con sorpresa al ver caer sobre la mesa un montón de dinero envuelto en un lazo rojo, junto con un sobre con su nombre impreso en el frente. Cogió el fajo de billetes y lo examinó; supo de inmediato quién se lo había enviado. Nadie aparte de Tony Stark sería tan estúpido como para enviar dinero en efectivo a alguien en una caja de FedEx.

-Lo juro, nunca deja de sorprenderme-, murmuró Marlena mientras le lanzaba la pila a Wanda.

Ella se rió entre dientes y agitó el moño antes de sentarlo sobre la mesa. -Tony Stark no sería Tony Stark si no gastara una ridícula cantidad de dinero en sus seres queridos-.

-Es cierto-,dijo Marlena mientras rasgaba el sobre.

Inmediatamente se encontró con la vista de la letra de Tony, y sonrió mientras leía las palabras garabateadas en la hoja.

Marlena,

Feliz cumpleaños, chica. En esta caja debes encontrar la parte uno de tu presente de tres partes adentro. Ahora, sé que la pila de dinero puede parecer mucho, pero soy horrible comprando regalos para la gente. El año pasado, tu mamá me ayudó a elegir qué regalarte, pero ahora que no puedo ir con ella, estoy oficialmente perdido. De todos modos, creo que el dinero es el mejor regalo que se le puedes dar a alguien. ¿Por qué comprarle algo a alguien y arriesgarse a que no le guste cuando puedes darles dinero y ellos pueden sacar su trasero holgazán e ir a buscar su propio regalo? Eso solo me parece lógico. Incluso lo envolví en un bonito lazo para ti.

De todos modos, sé que probablemente te estés sintiendo un poco desanimada por tu cumpleaños este año. Con todos muertos, no puedo imaginar lo horrible que debes sentirte, pero estoy escribiendo esto para decirte que pronto todo estará bien. Volverás a ser feliz y tendrás la vida que siempre quisiste con el hombre que siempre quisiste. Ahora, no prometo nada, pero tengo esperanzas por su bien. Mereces escuchar algo feliz durante este momento de confusión emocional, del cual me culpo en parte, pero eso no viene al caso aquí. Quiero que seas feliz, Marlena; Quiero que tengas todo lo que siempre quisiste en la vida. Deja de andar deprimida por la casa de Clint como una chica de dieciséis años que acaba de ver morir a su personaje de televisión favorito. Eres mejor que eso, Marlena Claire, tú Eres un puto prodigio. Sé la ruda que eres y al menos trata de ser feliz. Trata de pensar en las cosas buenas de la vida en lugar de las malas. Te mereces algo mejor que lo malo.

Ahora, me iré, pero haré todo lo posible para ir a verte pronto. Extraño mucho a mi pequeña flor, y solo puedo esperar que ella me extrañe tanto. Lamento que las cosas hayan tenido que llegar a esto, pero encontraremos una salida (ya estoy trabajando en ello).

Te amo, sol.

Atentamente,

Tony

Marlena se secó una lágrima que había logrado caer. Dobló la carta de nuevo y la volvió a colocar en su sobre, su mirada se posó en Wanda después de hacerlo.

-Es un buen hombre cuando quiere serlo-,dijo Wanda.

Marlena asintió y sonrió. -Lo es. Lo extraño mucho, los extraño mucho a todos-.

-Ahora, ahora ... no llores-,bromeó Wanda. -Creo que Tony te dijo que no pensaras en lo malo, sino en lo bueno-.

Marlena soltó una suave risa y volvió a secarse la cara. -Es difícil hacerlo cuando no hay nada bueno sobre lo que reflexionar-.

Wanda tomó su mano. -Ten esperanza, Marlena-.

-Lo estoy intentando-,respondió Marlena mientras le apretaba la mano. -Solo desearía que estuvieran aquí conmigo. Solo desearía que las cosas pudieran volver a ser como solían ser-.

-No lo hacemos todos-,suspiró Wanda. -Pero bueno, tu cumpleaños va a ser increíble sin importar quién esté aquí y quién no. Clint y yo ya nos hemos asegurado. Te mereces envejecer felizmente, Marlena-.

Marlena se rió entre dientes y negó con la cabeza. -Siempre puedo contar contigo para alegrarme el día-.

-Por supuesto que puedes-.