"Pase lo que pase, nunca dejare de amarte".
. . . en el cual están rotos y maltratados, pero su amor mutuo es lo que les impide desmoronarse por completo.
[LIBRO DOS]
Esta historia no me pertenece , es solo una traducción del inglés al español para...
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Steve sacó su teléfono, sus dedos se movieron con gracia sobre el teclado mientras escribía el número familiar. Se bajó la gorra hasta la cara, aunque sus aviadores impidieron que se la bajara demasiado. Intentaba permanecer oculto a la vista del público, y en este momento parecía estar funcionando.
Vio a Natasha hablar con el rey T'Challa de Wakanda desde lejos sin que ella lo supiera, aunque no lo hizo de una manera espeluznante. Apretó el teléfono contra su oído, escuchando cómo sonaba el teléfono y observando cómo ella respondía una vez que T'Challa se había ido.
-¿Si?-. ella respondió.
-¿Estás bien?-.
-Podría preguntarte lo mismo, pero ... eh ... sí, gracias. Tuve suerte-, respondió, inspeccionando el área con cautela antes de ponerse de pie. -Sé lo mucho que Bucky significa para ti, Steve, sé lo mucho que significa para Marlena, realmente lo sé. Pero, por favor ... no te metas en esto. Solo empeorarás las cosas para todos nosotros-.
Steve dejó escapar un suspiro y desvió su atención hacia otra parte. -¿Estás diciendo que nos arrestarás?-.
Natasha negó con la cabeza. -No-, se rió entre dientes ligeramente. -Pero alguien lo hará si interfieres; así es como funciona. Sé que no quieres eso para Marlena, Steve-.
-Por supuesto-, respondió Steve. -Nunca quise que Mar se metiera en medio de esto, pero ahora que lo pienso, creo que ella y yo deberíamos ser los que lo trajeran-.
-¿Pero por qué?-
-Porque somos los menos propensos a morir en el intento-, respondió Steve simplemente antes de colgar el teléfono.
Regresó apresuradamente por las concurridas calles de Viena y regresó al café en el que había dejado a sus dos compañeros. Vio el cabello castaño ondulado de Marlena, cubierto por una gorra de béisbol, y se acercó apresuradamente, dejándose caer en su asiento junto a ella.
-¿Ella te dijo que te mantuvieras fuera de eso?-.Sam habló.
Marlena miró a Steve mientras esperaba una respuesta y se metió un trozo de tarta en la boca.
-Si-.
-Ella podría tener un punto-, intervino Sam, mirando hacia su postre.
-Lo haría por nosotros-, suspiró Steve.
Marlena simplemente reaccionó robando los restos del postre de Sam, sin perder tiempo en meter la comida en la boca. Quería hablar, lo hizo, pero hablar de Bucky no haría más que enojarla.
-Solo quiero asegurarme de que consideremos todas nuestras opciones-, replicó Sam mientras robaba un trozo de su propio postre del plato frente a Marlena. -La gente que te dispara suele acabar disparándome a mí, y si hacemos esto, también le dispararán a esta idiota de aquí-, finalizó, señalando a Marlena.