Born to die |Jenlisa|

Respuesta

Jennie

—¿Y qué drama le tiraste? —preguntó Jisoo tirándose a mi lado.

—Le dije que me he visto de malas con Hades —comentó Jamie— y si podía ayudar a resguardarme —un poco ingenioso de su parte.

—¿Sólo eso? —cuestione y asintió— O sea, ¿no la pudiste encontrar? —negó con la cabeza y suspiré, tenía una leve esperanza de que Lisa sepa algo de mi.

Cambie totalmente mi rostro, Jisoo trato de consolarme sobando mi hombro pero no era lo que quería en estos momentos. Jamie empezó a reír y lo miré con cara de qué carajos te sucede.

—Toma —me pasó una sobre— por cierto, sí terminan me avisas —enarque— voy por ella, es muy linda —hice una media sonrisa.

—No eres indestructible, ¿lo sabes? —cuestioné, quería asesinarlo.

Casi muero de las tristeza por su broma, no había alguien más importante que Lisa en estos momentos.

—Bromeas sabiendo que tienes una hermana muuuuuuy celosa —respondió Jisoo y me giré a verla desafiante— bueno solo un poco celosa.

—No lo dudo —respondió mi hermano— además de ser una malcriada —rodé los ojos— lo peor es que estoy contribuyendo a malcriarla.

—Es que soy tu hermana favorita —sonreí— Macaria y Erinias no suman —bromee.

Era broma, soy la más pequeña de los nueve y la más consentida. Uno de los beneficios de ser la menor de la familia es jugar mentalmente con mis hermanos para beneficiarme, siempre caían a mis pedidos.

Jamie era quien más me hacía favores, ya que ambos compartíamos el hecho de haber salido del Inframundo desde muy temprano.

Volviendo a mi drama amoroso y dejando del lado un poco mi historia.

—Entonces... ¿si la viste? —cuestioné y asintió.

—Estaba muy emocionada al saber de ti —reprimí una sonrisa— así que creo que en esas cartas habrán buenas noticias —se encogió de hombros.

—Eres el mejor de todos —sonreí— ¿Lo sabes? —cuestione y asintió.

—Siempre seré el mejor hermanita —respondió sacudiendo su melena.

—Los dejaré unos minutos, leeré esto y vuelvo —me levanté del sillón para dirigirme a mi habitación.

Caminé con el sobre entre mis manos, lo abrí y encontré un poco de salvia, saque el papel de adentro y lo abrí.

Para: Mi amor, Jennie.

No has dejado de rondar en mi cabeza todo este tiempo, te tengo presente a cada momento, hay mucho de que hablar y planear.

No pierdo la esperanza de volver a vernos, la llama sigue encendida, no he dejado de quererte ni a ratos por sobre todo extraño estar enredada a tu cuerpo y a tus sábanas.

No tengo mucho tiempo de escribir y mucho menos de describir todo lo que extraño de ti, mi amor. Ruego que la espera no sea tan larga, cada día sin ti es una tortura.

Pd: Tienes que contarme mejor acerca de tus hermanos la próxima, por cierto Jamie me cayó bien muy bien.
Pd2: Recuerda besarme un poco más la próxima que vaya alejarme tanto tiempo de ti, tus dulces labios hacen faltan en cada parte de mi cuerpo.

Te quiere, Lili.

Quería correr a sus brazos pero eso sería rendirme ante mi tío cosa que haría desatar una guerra infernal en la tierra entre Zeus y Hades.

Hades jamás me haría daño y hablo de daños físicos porque lastimar mi mente sería pan comido para él.

Lisa se ha metido por completo en mi ser, quería adelantar los días para saber que pasaría y sí finalmente podría estar cerca de ella.

Guarde de nuevo la carta en el sobre y lo deje sobre mi mesa de luz, cada que lo vea tendría presente el amor que sentimos una por la otra e iba a llenarme de esperanza de encontrarla de nuevo.

Salí para ir junto a Jamie y Jisoo, encontrándome con la grata sorpresa de ver a mi hermano Chan.

—¿Es que en este mundo no existe una orden de alejamiento o algo así? —cuestioné sentándome y rio.

—Podría ser pero no es tu caso —se encogió de hombros— además si puedes invitar al exiliado, por qué no a mi? —cuestionó.

—Porque no empatizas y te recuerdo que no lo han exiliado, fue una decisión personal —defendí a Jamie.

—¿Estos están así todo el día? —cuestionó Jamie a Jisoo y esta asintió.

—Son dos niños —bufo mi amiga.

—He venido casi a diario para que me disculpe pero solo me ha despachado —hablo Chan.

—Que lindas han sido tus disculpas —contraataque irónicamente.

—Solo te estoy salvando —advirtió— lo sigo haciendo —se encogió de hombros.

—Gracias por eso —agradecí con sarcasmo.

—Alguna vez tendrás que apoyarte en mi y te darás cuenta que no soy tu enemigo —asentí restándole importancia.

—Espero y llegué ese día Chan —me acomodé en el sofá.

—¿Y que te dijo tu enamorada? —preguntó Jamie y mi rostro cambio por completo, no quería que revele información de Lisa frente a Chan.

—¿La del bar? —cuestioné sonriendo— ahí vamos, saldremos esta noche —mentí.

Esperaba que Chan no se entere de nada. La cara de Jamie primeramente fue de confusión pero terminó entendiendo, lamentaba meterlo en mis problemas.

—¿Estás saliendo con alguien más? —cuestionó Chan.

—Sí —respondió inmediatamente Jisoo— muy linda por cierto, que esperábamos de Jennie —sonreí a medias.

—Esa es la actitud hermanita —celebro y rodé los ojos.

—A todo esto... ¿a que vienes? —cuestioné seria, no quería verlo aquí.

—Solo hay dos lugares seguros para mi en esta galaxia —enarque— el inframundo y tu aquelarre —respondió y resople.

—Entonces mejor que te acomodes —guiñe— hasta pueden hacer un momento de hermanos —señale a ambos— mientras iré a dar una vuelta con Jisoo.