Dear Lover

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Meses después - Los Ángeles, California.

—Chicos, realmente quiero que todos ustedes sepan que estamos muy felices por absolutamente todo. —dice Pamela.— Aprendimos a querernos, odiarnos y a trabajar como solo las familias lo hacen.

—Yo personalmente quiero decir que los amo a todos aunque no parezca. —continúa Alessandra. Valentina se ríe.

—Pues yo estoy feliz, es todo lo que voy a decir. —musita.— Muy pocos son de verdad mis amigos, fue una experiencia inigualable, jamás pensé que este proyecto me llevaría tan lejos. Y en serio les agradezco a todos. Aunque unos no hayan servido ni como relleno.

—Gracias, Valentina. Que emotivo mensaje. —celebra Gabriela.— Pues yo quiero agradecerles a los que se van, y felicitar a Pamela por su gran decisión.

—Yo solo quiero decirles que gracias a todos. A pesar de todo este proyecto va a estar en mi corazón siempre. No solo interpreté a uno de los personajes más icónicos de mi carrera, aprendí mucho de cada uno de ustedes. Me enamoré y ahora tengo una hermosa relación que por supuesto les voy a presumir. —sonrío.— De ante mano les deseo suerte a mis compañeros que como yo, abandonan el proyecto y a los que se quedan para una cuarta entrega.

—Llenar tus zapatos no será sencillo. —me hace saber Lionel. Sonrío lanzándole un beso.

Es obvio que no va a ser sencillo. Y no lo digo por mi, lo digo porque Alessandra va a tomar básicamente mi lugar.

Es decir, la serie ahora se va a tratar de ella. Y bueno, Eleonor e Ivy fueron los personajes femeninos más icónicos.

Se va a necesitar de mucho para superar ese hecho.

Todos comienzan a dar sus mensajes y deseos uno a uno. Y cuando es el turno de Elisa, alguien toca la puerta haciéndonos mirar en su dirección.

Un gran ramo de flores llama mi atención. Sabrina y Angie de acercan y esta última toma la tarjeta.

—Felicidades a la mejor actriz del mundo, al amor de mi vida. A la mujer de mis sueños y a la más bonita del mundo entero. Karol Sevilla. Te amo. —lee.— Es más que obvio, toma tu ramo y evítanos la humillación.

—Que lindo. —susurro tomando mi tarjeta.— ¿Lo puedes dejar en la tercera puerta del pasillo? Gracias.

El chico que la sostiene asiente, yo sólo tomo mi teléfono y busco el número del causante de esto. Sabía que hoy era mi último día de grabación así que era obvio que haría esto.

Lo amo.

Y es que, fue difícil cuando él dijo la palabra con A. Entré en pánico y no sabía qué responder.

Hasta que simplemente la palabra también fluyó de mis labios sin yo darme cuenta. Fue mágico, especial...

Ay, simplemente no sé.

En este trayecto no nos hemos visto más que un par de veces que él viene a visitarme. Está a nada de anunciar ya su lanzamiento oficial como solista.

A sólo horas en realidad. Y eso me emociona así que he planeado ya cómo sorprenderlo.

Quiero que estemos juntos en este nuevo paso que va a dar. Y por eso solo escribo para no levantar sospechas.

Te amo tanto, amor. Y te deseo toda la suerte en tu lanzamiento de mañana.

Finalmente bloqueo mi teléfono, levanto la mirada y sonrío viéndolos a todos.

—Es oficial, me despido. Gracias por todo, que les vaya bien con la cuarta temporada y sean felices.

—Suerte a ti también con la universidad. —desea Valentina. Sonrío acercándome para darle un abrazo.