I DONT KNOW WHY (Dean Winchester x Dean Forester)

CAPITULO 47

POV' DEAN FORESTER

Después de nadar por un rato en el lago, vamos al auto y nos sentamos en el asiento trasero para besarnos, parecía que no podíamos despegar nuestros labios ni siquiera después del minuto que tomamos para respirar.

- Debemos volver al campus - digo acariciando su cabello.

- De hecho esperaba invitarte a salir - sonríe - es decir, oficialmente.

- Creo qué han pasado muchas cosas entre nosotros como para que sea nuestra primera cita - sonrío también.

- Lo sé, pero lo que digo es que hoy es un día muy especial para los dos.

- ¿Por qué?

- Bueno, hoy cumplimos cuatro meses de noviazgo.

- ¿Enserio? - abro los ojos desmesuradamente.

- Si, unas semanas antes de mi cumpleaños, tu y yo empezamos a salir y creo que fue cuando empezó todo - sonríe.

- Whao - me sorprendo.

- ¿Te asombra que alguien como yo, recuerde estas fechas?

- No, es que normalmente soy yo quién se acuerda de estos momentos - muerdo mi labio inferior.

- Entonces, ¿te parece si este día lo hacemos el más memorable?

- ¿También me construirás un auto?

- ¿Qué? - frunce el ceño.

- Nada - sacudo mi cabeza ¿Qué quieres hacer?

- Mmmm estamos en Kansas, podríamos ir a un restaurante o a una feria - alzó sus hombros - lo que tú quieras cariño.

- Está bien - sonrío y vamos hacia los asientos delanteros.

Nos metemos en la autopista y el rubio enciende la radio poniendo el casette que le había regalado.

- ¿Cuántas veces has reproducido esas canciones? - sonrío.

- Las necesarias - me mira y posa su mano en mi pierna.

Nos detenemos en un pequeño aparcamiento al lado de una zona de restaurantes, al parecer Dean ya había estado en este lugar.

- La comida aquí es magnífica - dice, y sale del coche.

Entramos y nos sentamos en el local. Una mujer se acerca a la mesa
y nos entrega los menús, acto seguido, los dos pedimos dos hamburguesas y un plato de papas fritas con salsa.

Mientras esperamos los pedidos, hablamos de lo que podemos hacer en lo que queda de día. Nos sirven la comida y le doy las gracias a la camarera. Todo se ve muy delicioso y reparo un minuto para luego dar el bocado.

-Está rico, ¿eh? - comenta el porrista muy satisfecho. Asiento y hago lo propio.

Terminamos, discutimos por la cuenta, pero al final termina ganando él.

-Te lo cobraré más tarde - dice guiñándome el ojo.

💞💞💞

- Segunda fase del aniversario - sonrío mientras vamos en el auto.

- Bien, ¿En qué estás pensando? - me mira mientras conduce por la carretera.

- Hacernos un tatuaje, pero no de esos permanentes, sino de aquellos que se borran después de una semana.

- ¿Estás seguro? - me mira y vuelve a fijar su mirada al frente.

- Sí, alguna vez me dijiste que había que vivir la vida, así que es momento de hacerlo.