Capitulo 5

216 31 8
                                    





Hoy sería el primer concierto y todo era un caos. Tuve ensayo muy temprano y ahora me encontraba en la prueba de sonido. El evento comenzaría en unas dos horas y yo aún no había decidido mi vestuario.

—Carl ¿Ya terminamos? Debo ir a prepararme.— me acerque a mi productor que se encontraba con los sonidistas.

—Puedes ir tranquila, Liv.— le agradecí y me dirigí hacia los camerinos pero en el camino decidí tomar un bocadillo del bufet ya que no había almorzado. Tome un sándwich de pavo junto a una botella de agua para seguir mi camino pero me choque contra algo o mejor dicho contra alguien.

—¿En serio? ¿Todos nuestros encuentros serán así?.— Jonah soltó una carcajada y yo rodé los ojos para seguir mi camino. —Hey, elfo. Esperame.— lo ignore por completo y me adentré en la habitación que tenía mi nombre y él entro detrás de mi. —Parece que la diva está de mal humor hoy.

—¿Que quieres, Jonah? No tengo tiempo para soportar tus estupideces.— me recosté en el sofá y le di un gran mordisco a mi sandwich. Inconscientemente gemi al sentir el sabor y mi acompañante soltó una carcajada. —¿Puedes irte ya? Ver tu rostro me fastidia.

—No decías eso cuando casi me besas en el jardín de tu hogar.— sonrió burlón. —Bien, nos veremos muy seguido y por alguna extraña razón a mis amigos les caes bien. Me gustaría que intentemos llevarnos bien ¿Que dices?.— eleve una de mis cejas y me puse pie acercándome lentamente hacia él.

—¿Cuál es la trampa?.— me cruce de brazos. —Se me hace que eres un tipo que no hace nada si no obtiene algo a cambio. ¿Que te ofrecieron tus amigos?.— Jonah llevo una mano a su pecho y abrió la boca indignado.

—En verdad me lastima tu acusación, elfo.— al ver que yo mantenía mi postura suspiró profundamente. —Bien, me dejarían dormir en la litera de arriba del bus cuando estemos de gira por el festival, si intentaba llevarme bien contigo.— solté una carcajada al ver su rostro frustrado. —Entonces ¿Amigos?.

—Ni en tus sueños.— le di la espalda y nuevamente me recosté en el sofá. —Cierra la puerta cuando salgas por favor.— tomé mi iPhone y comencé a jugar con él. Oí como Jonah susurraba algo por lo bajo y salió del camerino. Yo jamás intente besarlo, solo fue un truco. Aunque en un momento si quise, jamás se lo diría porque solo aumentaría su ego.

—¿Dónde está mi musa?.— la puerta se abrió de golpe y Fabio, mi estilista entro en la habitación junto a sus asistentes. —Mi niña bonita, ven a darle un abrazo a Fabio.— me acerque a él y lo abracé muy fuerte. Fabio es mi estilista desde que mi carrera comenzó, sabía cómo era mi estilo y lo que en verdad me gustaba. Por eso no lo cambiaría por ningún otro estilista. —Kath me dijo que tú traje estaba por aquí.— abrió el armario y una funda negra apareció en mi campo de visión. Fabio la abrió y dentro de ella había un traje color vino junto con unas botas bucaneras del mismo color. Quedé completamente enamorada y en estos momentos estaba amando a Kath por tener tan buenos gustos. —Manos a la obra mis pequeñas discípulas, dejemos a esta niña como una verdadera reina.

##

Una hora y media después ya estaba lista. Mi look era precioso y me sentía muy segura de mi misma, sinceramente lo podría usar para una noche de sexo.

—Santos cielos, lo que más me gusta de tus shows son tus trajes, Liv.— Scar entro en la habitación con una gran sonrisa. —Si no fueras mi gemela, saldría contigo sin duda.

—Pero tenemos el mismo rostro, Scar.— ella se acercó al gran espejo y nos observamos. Siempre nos decían que nuestro parecido daba miedo pero eso era lo que nos hacía únicas y peculiares.

THE STARDOMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora