Capitulo 48

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—¿Que tal un show solo para ti? Para lanzar el álbum deluxe.— preste atención a las palabras de Rick mientras dormía a la pequeña Naomi en sus brazos. —En el festival no tienes demasiado tiempo para presentar todo un álbum.

—¿Podré invitar a todos los artistas que colaboraron en este álbum?.— pregunté y él asintio. —Me agrada mucho la idea pero hay que hablarlo con Ralph.

—Ya hicimos eso y él estuvo de acuerdo con nosotros.— Kath tomo a su hija en brazos para darle el biberón. —Tu solo debes preocuparte de verte bonita y hacer lo que mejor te sale.

*Reproducir canción de multimedia*

—Entonces hagamoslo.— sonreí y me puse de pie. —Ire a mi habitación a recostarme un poco.— ellos asintieron y cuando dejaron de poner su atención en mi suspiré profundamente y borre la sonrisa de mi rostro. Oi a Scar grabar un blog para su canal al pasar por la puerta de su habitación.

Al entrar a mi habitación me sentí extraña. No quería estar allí, no quería estar en mi casa, no quería estar viva. Tomé el pequeño frasco de pastillas para dormir y tome una ya que era lo único que me funcionaba. Me recosté en mi cama observando el techo en silencio.

Nadie lo notaba y quería que permaneciera así. Nadie notaba que no me alimentaba como debía, nadie notaba que no dormía las ocho horas de sueño. Todo a mi alrededor se enfocaba en mi nuevo álbum y el festival.

Richard no ha dejado de llamar para intentar hablar con nosotras. Jason estaba destrozado y de Kim no tenía noticias y también quería tenerlas. En tan solo unos meses mi vida derrapó. Todo a mi alrededor se derrumbó.

Tal vez debía acabar con todo esto de una vez por todas. Ser egoísta y terminar con el dolor insoportable de mi corazón. Me sentía rota, marchita por dentro y sin amor para dar. Nadie debería vivir así.

¿Por qué no lo intentas? Ya haz perdido todo Olivia, tan solo queda perder tu vida. Nadie lo notará, solo eres un punto en todo esto.

Intente apartar esos pensamientos de mi mente pero aún seguían.

Tomate las pastillas. Eres una infeliz de mierda y una hipócrita. Demuestras estar bien pero en verdad solo te la pasas llorando. Ya no tienes seguridad, ya no tienes amor, ya no tienes a nadie que llore por ti.

Me adentré en mi baño y observé mi reflejo en el espejo. Tomé una toalla desmaquillante y comencé a limpiar mi rostro dejando a la vista mis grandes ojeras.

Eso eres. Mírate nada más, ni siquiera tu sabes quién eres. Mejor hazlo, quitate la vida.

Abrí el segundo cajón del botiquín y tome la navaja que había allí. Observé mis muñecas y mis ojos comenzaron a picar.

Hazlo con las pastillas, ellos creerán que estas durmiendo y no notarán que estás muerta.

Sali del cuarto de baño y tome el frasco de pastillas para dormir. Tomé diez pastillas o quizás más, en verdad no lo recordaba. Solo recuerdo haberme recostado y como mis párpados pesaban mucho asique solo los cerré y al fin descansé.

Narra Scarlett:

—Y eso fue todo por hoy chicos, nos vemos la próxima.— corte el vídeo y suspiré profundamente. —Bien Scar, vamos por algo de comer.— salí de mi habitación y me dirigí a la cocina donde se encontraba Kath junto a su pequeña hija en brazos revisando algunos papeles. —¿Mucho trabajo?.

—Demasiado para mí gusto.— me regaló una sonrisa de boca cerrada. —Oye dile a Liv que baje a cenar, ha dormido mucho.— asenti y luego de prepararme un sándwich de pavo, me dirigí hacía la habitación de mi hermana gemela. Golpee varias veces pero no recibí respuesta asique decidí entrar. Todo estaba muy silencioso y tenía un mal presentimiento en mi.

Encontré a Liv durmiendo plácidamente y me dió mucha pena despertarla ya que sabía que mi hermana no estaba durmiendo como debía pero aún así algo me decía que debía despertarla.

—Liv.— sacudí su cuerpo pero ella ni siquiera se inmutó. —Liv es hora de cenar.— no obtuve respuesta y comencé a desesperarme. Encendí su luz de noche y entonces lo ví. Un frasco de pastillas para dormir completamente vacío en sus manos y algunas pastillas al rededor del cuerpo de mi hermana. —NO OLIVIA NO POR FAVOR.— intente sentarla pero su cuerpo inerte no me lo permitía. —RICK, KATH, AYUDA POR FAVOR.— comencé a llorar golpeando levemente el rostro de mi hermana. —Olivia por favor ¿que haz hecho?.

—¿QUE HA PASADO?.— Rick entro en la habitación y quedó congelado en su lugar al ver la escena ante sus ojos.

—NO TE QUEDES ALLI, HAZ ALGO.— abracé el cuerpo de mi hermana derramando lágrimas en su rostro. —Por favor haz algo.— susurré para mí.

—KATH LLAMA UNA AMBULANCIA PERO POR FAVOR QUE NO ENCIENDAN LAS SIRENAS.— Rick salió de la habitación y yo intentaba entender que estaba pasando. Acaricie el rostro de Olivia derramando demasiadas lágrimas en el.

—Lo siento tanto, Liv.— besé su frente. —Lo siento por no haber notado que no estabas bien. Por favor no te vayas, no me dejes aquí.— solloce contra su frente. —Somos Scarlett y Olivia Cash. No hay Scar sin Liv y no hay Liv sin Scar.— sentí como mi corazón se desgarraba detrás de cada palabra que salía de mi boca. —Eres mi otra mitad, no puedes irte aún.— me desesperaba el hecho de ver su cuerpo tan quieto y frío.

Luego de diez minutos que parecieron horas llegó la ambulancia con las sirenas encendidas llamando la atención de todos nuestros vecinos. Rick estaba completamente enojado y comenzó a gritarles a los paramédicos mientras ellos sacaban a Olivia en una camilla. Kath mantenía a Naomi entre sus brazos mientras lloraba en silencio.

—Solo uno puede ir con ella.— el paramédico se asomo por la parte trasera y sin pensarlo me subí a la ambulancia.

—Ire tras de ti.— Rick salió corriendo hacia su vehículo junto a Kath y Naomi. Los paramédicos hablaban entre si e intentaban reanimar a Olivia pero no lo lograban y eso me desesperaba aún más. Diez minutos después llegamos al hospital central y Olivia entro a quirófano de urgencia para hacerle un lavaje estomacal.

—Las noticias no tardarán en llegar.— Rick tiro de su cabello y yo lo mire incrédula.

—¿En verdad solo te interesa lo que esos idiotas digan? OLIVIA PUEDE ESTAR MUERTA Y ¿TE PREOCUPAS POR ESO?.— él era mucho más alto que yo pero aún así lo enfrente. —Vaya representante de mierda que eres.

—Creo que debemos calmarnos.— Kath se interpuso entre los dos. —No es momento de pensar en lo que dirán los medios y mucho menos pensar que Olivia morirá. Todo saldrá bien.— intente aferrarme a las palabras de mi mejor amiga pero hasta no ver a mi hermana con los ojos abiertos, no creería que todo estaría bien.

THE STARDOMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora