Capitulo 31

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—ESTAS HACIENDO TRAMPA.— Jonah comenzó a reírse y yo le quite el control de la consola. Eran las 2 am y nosotros nos encontrabamos jugando videojuegos aún sabiendo que por la mañana deberíamos viajar a Minnesota y estaba demasiado nerviosa por eso. —Pasame el helado por favor.— puse en pausa el videojuego y tome una cucharada de helado de fresa. Sentí la intensa mirada de Jonah sobre mi y suspiré. —Vamos, suéltalo.

—Se que estás preocupada por ir allí pero no pienses en tu madre.— acarició mi mejilla. —Piensa en esto, pasaremos mi cumpleaños juntos y será genial porque conocerás a mi familia.

—De hecho eso no me ayuda demasiado.— el me quito el pote de helado y me obligó a que lo mirara. Aún en la oscuridad los ojos de Jonah resplandecían y me hipnotizaban aún más.

—Ellos te amaran tanto como lo hago yo.— beso mi nariz, un gesto que me dió mucha ternura. —Creo que deberíamos ir a dormir ya o perderemos el vuelo.— asenti y nos cubrí con las mantas y Jonah apagó la consola. —Me acostumbraré a dormir junto a ti y luego cuando no estés, te echaré de menos.— tomo mi cintura y me abrazo. —Buenas noches, elfo.

—Buenas noches, idiota.

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Cómo era de esperarse estábamos llegando tarde al aeropuerto. Jonah tiraba de mi como si fuera una niña pequeña y es que no encontraba fuerzas para caminar. —No debíamos quedarnos hasta tarde jugando, elfo.— comencé a reírme y a lo lejos vimos a los chicos y a mis respresentantes.

—Hasta que por fin aparecen.— Zach rodo los ojos. —Muevan sus traseros, es hora de abordar el avión.

—Parece que alguien no durmió bien.— Jack se burló de Zach pero él rodó los ojos y tomo su mochila para alejarse de nosotros. Observé a Kath pero ella solo mantuvo la mirada en su celular sin prestar atención a lo que pasaba a su alrededor. —¿Nos vamos?.— asentimos y Luca tomo mis maletas para luego abordar el avión. No era un viaje tan largo pero si para dormir las tres horas que duraría. Jonah iba dormido junto a mi asique lo imite y caí rendida por el sueño.

Sentí que alguien picaba mi mejilla y al abrir los ojos me encontré con la mirada azulada de mi novio que sonreía burlón.

—Pareces un bebé cuando duermes ya que es el único momento en el que estás tranquila.— golpee su hombro y él comenzó a reírse. —Estamos a punto de aterrizar y nos espera el bus en el aeropuerto.— estire mi cuerpo y sonreí perezosamente, necesitaba dormir más tiempo.

—Preparense para aterrizar.— oímos al piloto hablar por la radio y comenzamos a recoger nuestro equipaje. Al salir del avión, el bus nos esperaba para llevarnos al estadio donde sería el concierto. Scar iba adelante junto a Jack hablando animadamente, Jules no estaría con nosotros porque tenía trabajo que hacer en Los Angeles.

—Liv, hable con Richard.— Kath se sentó junto a mí en el autobús. —Me dijo que no había problema, puedes ver a Jason pero que tú madre no puede enterarse por lo que tendrá que ser en un lugar privado.— asenti prestando atención a cada una de las palabras de mi mejor amiga pero algo llamo mi atención o mejor dicho un grupo de personas al ver por la ventanilla.

—DETENGAN EL AUTOBÚS.— el vehículo se detuvo de golpe logrando que Scar se golpeara la cabeza contra la ventana. —SCAR VEN.

—OLIVIA TE ASESINARE Y..— deje de oír la voz de mi hermana y baje del autobús. Observé el grupo de amigos y sentí mis ojos picar, eran ellos.

—OIGAN IDIOTAS.— los cuatro se dieron vuelta y al verme abrieron los ojos como platos. —¿ACASO NO ME DARAN LA BIENVENIDA?.

—OH POR DIOS ES OLIVIA.— Jessica corrió hacia mi y me abrazo. —No puedo creer que seas tu, Liv.

—SANTA MIERDA, LAS GEMELAS ESTÁN AQUI.— oí la voz de Charlie quien también me abrazo. Jane y Kendall se acercaron también y al ver al último sentí mi corazón latir demasiado rápido. Corrí hacia él y lo abracé con demasiada fuerza y comencé a llorar sobre su hombro. Kendall era mi primo y también mi mejor amigo, él sentía el mismo odio hacia mi madre como yo, me había acompañado en cada momento en que mi madre intento derrumbarme. Scar se unió al abrazo y también comenzó a llorar.

—Las odio por no avisar que vendrían.— acarició nuestras mejillas para secar las lágrimas. —Por dios, mirense están hermosas.— Kendall eran dos años mayor que nosotras y también hermano mayor de Jane, los dos eran nuestros primos. Sentí como alguien se aclaraba la garganta detrás de mí y al darme la vuelta los chicos estaban con una ceja alzada la escena. —¿Por qué estos cinco chicos con pinta de bad boys nos observan así?.— Kendall observó de arriba hacia abajo a Jonah que era que lo estaba fulminando con la mirada.

—Oh tranquilo, Ken. Ellos son nuestros amigos y el que te fulmina con la mirada es el novio de Olivia.— Scar comenzó a reírse de la situación. —Chicos ellos son Kendall y Jane, nuestros primos y ellos son Charlie y Jessica, nuestros mejores amigos de preparatoria y la pareja del grupo.

—No puedo creer que Olivia la chica yo jamás tendré novio, TENGA NOVIO.— Charlie se acercó a los chicos y comenzó a saludarlos. Aún me encontraba en shock ya que hacía mucho tiempo no veía a mis amigos.

—TENEMOS QUE IR AL BAR DE PAPÁ, el se pondrá muy feliz de verlas aquí.— Jess chillo emocionada. El bar en el que trabaje en mi adolescencia era del padre de mi mejor amiga y muchas veces los viernes por las noches cantabamos para los clientes y nos amaban. Si, tuve una pequeña banda en mi adolescencia. —¿Tienen algo que hacer?.— observé a Rick y él asintio dándome a entender que podía ir con mis amigos.

—Me siento como en preparatoria.— Jane sonrió dulcemente. —Tenemos que hablar de muchas cosas, se olvidaron de sus primos.— Scar abrazo a Jane. Ella tenía 19 al igual que nosotras pero la cuidabamos como si fuera nuestra hermana pequeña.

—Liv, podemos hablar un minuto.— Jonah me llamo y asenti para alejarme un poco de los chicos. —Pensé que iríamos a ver a mis padres.— frunció el ceño.

—Lo se pero es que hace mucho tiempo no los veía, Jonah.— acaricié su rostro. —Haremos algo, iremos a casa de tus padres y yo luego me iré con mis amigos pero en la noche quiero que vayas al bar de Bill ¿trato?.— tendí mi mano hacia él pero tiro de mi y beso mis labios.

—Trato.— sonrió satisfecho. Me di la vuelta y regrese con mis amigos que esperaban por mi.

—Scar ve tu con ellos, debo ir a visitar a los padres de Jonah ya que nos esperan para almorzar pero prometo que en la tarde iré con ustedes.

—Oh, no hay problema.— Jess sonrió. —Estaremos en el bar de mi padre asique nos veremos allí.— abracé una vez más a mí amiga. Kendall aún observaba con mala cara a Jonah, como si no lo aprobara y eso me causo mucha gracia.

—Ken, no puedes decirle a mi madre que estamos aquí.— sabía que ella se enteraría pero aún no quería que lo hiciera. —Prefiero que sea la última en enterarse.

—Esta bien, Livvy. Enviame un mensaje si quieres que vaya por ti.— Kendall beso mi frente y acaricio mi mejilla dulcemente. —Me alegra mucho verte bien y creo que el idiota de ojos claros es gran parte de eso.— me guiñó un ojo y abrazo a Scar. —Tu te lo pierde, Livvy.

—DEJA DE LLAMARME ASI.— los cinco comenzaron a reírse de mi y me dieron la espalda. Me di la vuelta en dirección al autobús y tome la mano de Jonah. —Vamos a conocer a tus padres.


THE STARDOMDonde viven las historias. Descúbrelo ahora