Dekubowl - Nothing

Capítulo 5

Al dar las 7:45 PM, casi toda la clase a excepción de las chicas se hallaba ya reunida en la sala de estar, sentados en los taburetes de las esquinas de la amplia sala, en cuclillas jugando videojuegos o simplemente sentados en el sueño charlando, Izuku había terminado de llevar los bocadillos a la sala de estar exitosamente. Fué entonces que Izuku salió de la cocina, para posteriormente llegar con los chicos, inmediatamente entró fue llamado por el joven de canarios cabellos y mechón azabache, quien ajustando su mano de invito a sentarse junto a él, acompañándole se encontraban el pelirrojo de afilada dentadura y el azabache de ojos almendrados.
–¡Hey! Midoriya ven aquí– sonrió dando palmaditas en el asiento a su lado, el chico de esmeralda mirada sonrió y se dirigió a tomar asiento conde el rubio había indicado.
–Hola chicos, ¿De que hablaban?– Preguntó sonriente, haciendo notoria su curiosidad por la conversación de sus compañeros.
–De como nos gusta que nos llamen, como apodos y eso– Contestó apresurado el joven de lacia cabellera –¿Y a tí como te gusta más que te digan?– Aprovechó entonces para preguntar al pequeño de jades orbes, quien se quedó pensando por unos segundos mientras sus manos inconscientemente tomaban una fritura de la bolsa que tenía Kaminari entre manos.

–Amm...Algunas personas me llamaban Deku, pero era más un insulto supongo jeje, así que Izuku está bien, si me pusieran un apodo con cariño sería genial igual– Explicó brevemente con su jade mirada posada en los almendrados ojos que atentamente le observaban. Kirishima al escuchar esto se apresuró a hablar con un poco de tenue carmín inundando sus pómulos.
–¿Puedo llamarte Izu?– Tras preguntar el bermellón de sus mejillas se intensificó y subió hasta sus orejas, miró entonces expectante al más pequeño de los cuatro esperando la respuesta con los ojos bien abiertos.
–¡Claro! Suena genial– Sonrió en grande volteando a mirar al notoriamente sonrojado chico de mirada escarlata, cuyo sonrojo aumento aún más por la agradable respuesta del joven peli olivo.

Al mirar la escena instantáneamente Sero frunció suavemente en ceño, tal vez por ser interrumpido, más de inmediato miró de vuelta al peliverde.
–¿Yo también puedo?– Cuestionó sonriente una vez más; desafortunadamente, antes de ser está pregunta respondida fue una vez más interrumpida su charla.
–¿Y yo te puedo llamar Zuzu?– Sonriente propuso Kaminari, con su sonriente mirada ámbar posada sobre el sonriente y emocionado joven de mirada de jade.

–¡Por supuesto! Me gustaría mucho que me llamarán así– ante la última expresión, alzó los antebrazos cerrando suavemente los puños como si un niño demostrara su emoción.
Los otros tres jóvenes a su alrededor sonrieron sin notarlo, la ternura de la escena presenciada les enternecía.

–Entonces llámame Denki, ¡o también puedes ponerme un apodo!– sugirió con emoción poniendo una mano en su pecho.
–Y a mí Kiri, o Eiji, ¡o como quieras!– interrumpió el pelirojo sonriente, para posteriormente ser interrumpido igualmente
–¡A mi tienes que darme el mejor de los apodos!– Indicó sonriente el de negros ojos almendrados, los tres se miraron fijamente, y poco después todos se hecharon a reír a carcajadas, que de inmediato contagiaron al chico  ojos de jade que aún riendo pensaba minuciosamente en lindos apodos para cada uno. Tras un par de minutos de reír como locos hasta que sus estómagos comenzaron a doler Izuku habló con pequeños e imaginarios brillos brotando de su abierta mirada esmeraldina.
–¡Denkkun, Eicchan y Hancchan!– Golpeó con su puño cerrado la abierta palma de su mano como si hubiese encontrado la respuesta correcta de una difícil pregunta.

Los rostros de los tres acompañantes del pequeño se iluminaron, sonrieron ampliamente.
–¡Me encanta!– Opinó Denki.
–Sabía que escojerías el mejor apodo– presumió el pelinegro.
–¡Suena muy varonil!– Sonrió emocionado el pelirojo.