"Me enamoré de su coraje, su sinceridad y su llameante respeto propio. Y esas cosas son las cosas en las que creo, incluso si el mundo entero se entrega a las salvajes sospechas de que ella no era todo lo que ella debe ser. La amo y ese es el principio de todo."
Scott Fitzgerald
¿Quién puede elegir cuando el amor te va a penetrar de manera tan absurda hasta lo más profundo de tu alma? Esa era la pregunta que se hacía Piper el día del cumpleaños de su entonces novia, la creía el complemento de su vida. Sin embargo, ahora es consciente que al igual que hay que soportar el duro invierno para conocer la primera, Donna fue en su vida un conducto, la vena que la llevó hasta el amor de su vida, no tan dura y gélida como el invierno, pero para que Alex penetrara de manera absurda en su alma si tuvo que pasar por un invierno muy duro, del que hoy es día solo es un recuerdo optimista de su historia de amor.
Alex aprieta su mano y la ve a los ojos sonriéndole cuando su hijo toca la puerta de su casa. Piper siente que las piernas le tiemblan, sabe que el amor está en el alma, pero le parece mágico poder tener a su lado a la persona con la que quiere pasar el resto de su vida sin ningún miedo o restricción y espera que así lo siga siendo, sin importar frente a quien estén.
— Buenas noches, mamá — dice Alex y abraza de inmediato a su madre.
— Hija, te extrañé tanto — expresa eufórica — a ti también cariño — ahora abraza a su nieto.
— Diane — la rubia también la salud muy entusiasta.
— Entonces ¿por fin tengo conmigo a la familia Vause Chapman? — consulta Diane para no incomodar a su hija con el resto de la familia.
— Se escucha perfecto en tu tono tan elegante, mamá — contesta Alex abrazándola de nuevo para ir a buscar al resto de la familia.
La rubia suspira al superar el primer obstáculo. Toma la mano de Alexander y él se ríe al notar lo helada que está.
— Van a molestar a mamá y ella se va a enojar, pero no te va dejar de amar por eso, ¿a quién quiere engañar? Todos saben que se aman — susurra sabiamente el niño.
Piper sonríe por las palabras del niño y por el show de Donna y Valerie lanzándose a abrazar a su hermana. La hacen caer en un sillón y se le van encima, no paran de besarla. La rubia se saluda con los chicos y con Jackie de una manera más civilizada.
— ¡Mamá, me quieren matar! — grita con dramatismo Alex.
— ¿Mamá? ¿En serio, Alex? ¿Llamas a mamá a tu edad? — se burla Valerie haciéndole cosquillas.
— Niñas, ya basta. Donna vas a parir sobre tu hermana, por Dios, ten cuidado — sentencia preocupada Diane.
Todos los nietos de Diane y la rubia hacen cara asco con ese comentario.
— Te extrañamos, hermanita — finaliza Donna dándole un beso en la mejilla y Alex por fin puede respirar en paz.
— ¡Cuñada! Trabajaste muy bien esa pelvis en Europa, te ves muy sensual — Piper se prepara para también ser asfixiada por Valerie.
— Tía Alex, te ves tan... coloridamente genial, ¿hay muchos arcoíris en Londres? — la molesta Nicky, su tía solo la abraza sacudiéndole el cabello.
— Te extrañé, insoportable — dice sin sinceridad Alex — a ti también sobrino hermoso — saluda a Eric — a todos los extrañé, es tan bonito que estemos todos reunidos de nuevo.
Todos se mueren por decirle a Alex lo contentos que se sienten por su relación con Piper, pero Diane les advirtió que por favor no la molestaran. Alexander dijo que tenía mucha hambre así que van de inmediato a cenar.
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LA MUJER DE MI HERMANA
FanfictionAlex es la firme directora de un colegio que aparenta llevar una vida perfecta, Donna un alma libre que vive como si fuese el último día de su vida. Hermanas idénticas que lo único que tienen en común es el físico y enamorarse de la misma mujer.