𝘾𝙖𝙣 𝙄 𝙘𝙖𝙡𝙡 𝙮𝙤𝙪 𝙩𝙤𝙣𝙞𝙜𝙝𝙩 [Timothée Chamalet]

Always Forever

Timothée

No encuentro las palabras para describir lo feliz que soy, casi toda mi vida creí que Dios había parpadeado cuando yo nací, y todo lo que había pasado antes de Jean iba a ser por siempre mi vida. Tomar, drogarme hasta no saber de mi y despertar con no se quien a mi lado. 

Hoy Jean estaba a mi lado, y sin duda con ella en mi vida, esas expectativas que tenía antes no van aplicar jamás en mi vida. No sé si ella quisiera estar por siempre conmigo, pero el tiempo que ella decida darme, estaré agradecido de despertar todos esos días a su lado, mirándola respirar mientras duerme, mientras que está en su momento más vulnerable, cuidaré de ella, como ella a cuidado de mi. 

Jean comenzó a abrir los ojos con un pequeño rayo de luz que pegaba en su rostro. 

- Hola.- Dijo casi sin fuerzas intentando verme a los ojos. 

- Hola.- Respondí con una sonrisa. 

Jean intentó levantarse para buscar algo, sabía que era lo que buscaba. 

- Son las 3 de la tarde por si te preguntabas. - La recosté de nuevo. 

- ¿Las qué?.- Dijo sorprendida. - Perdimos todo el día durmiendo.- Rio.

- Algo así, creo que dormimos como a las 4 o 5 de la mañana. - La miré con una sonrisa coqueta. 

Ella solo siguió riendo e intentó taparse con la sábana, los dos comenzamos a reír mientras nos abrazábamos, hasta que alguien tocó la puerta. 

- ¿Chicos? ¿Están ahí? - Se escuchó Paul detrás de la puerta. 

Los dos nos miramos como si nos estuviéramos escondiendo de nuestros padres. 

- Bueno si están ahí... Vamos a ir a comer por si quieren venir. - Pudimos escuchar como se fue. 

- Rayos tengo mucha hambre.- Dijo Jean saliendo de la cama. 

- Tú puedes ir, yo me quedaré aquí contemplando como te vistes. - Dije recargándome en la cama pero el sonido de mi estómago vacío me delató. Haciendo que Jean volteara a verme mientras terminaba de ponerse un vestido. 

- Bueno entonces muere de hambre.- Respondió mientras amarraba su ultimo tenis.

- Ok, ok si tengo hambre. - Me paré de inmediato, pero miré que mi pantalón seguía mojado de ayer, y al no tener ropa seca, me quedé paralizado pues sabía que debía ir a mi cuarto literalmente desnudo. 

Jean se percató de eso y me regaló una sonrisa coqueta. - Yo iré por tu ropa. - Dijo mientras salía de la habitación, pero justo en ese momento Paul parecía acercarse de nuevo, Jean cerró la puerta junto con su salida lo más rápido que pudo. 

- Jean, creí que nunca saldrías, ¿Vas con nosotros? .- Escuché detrás de la puerta. 

- Si si.- Sacó su risa nerviosa.- Es que necesito algo de la habitación de Timothée.- Le respondió algo nerviosa.

- Creí que estaba contigo... - Mencionó algo preocupado Paul.

Yo me movía dentro de la habitación pegado a la pared sosteniendo la sábana sobre mi para poder escuchar que respondería Jean. 

- Sí, él está ahí, pero se quedó sin...- Paul la interrumpió. 

- ¡¿Qué?! ¿No me digas que tú y él...? Pero, dime que... - Comenzó a hablar más bajo, pero no lo suficiente para no escucharlo. - Dime que ya son novios...

Me despegué rápidamente de la pared, pues no había notado que eso tal vez podría ser importante para ella, y ahora que lo pienso bien... ya no quería que se refirieran a mi como "Tim, Timothée" cuando hablan de mi con ella, sino como su novio. ¿Por qué? Pues siempre fue Timothée por que antes era tu novio Michael, quiero ser ahora tu novio Timothée ¡Eso quiero! Y quiero que nos vean entrar juntos a la universidad y quiero cenar con su familia y recogerla al salir de clases ¡Si lo quiero!