From now on

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Timothée





Jamás me había sentido con tantas ganas de ir a la escuela, era como si un gran día fuera a pasar, cuando crees que tu día va a ser el mejor de la semana, piensas en la renovación de tu vida, por alguna extra razón tienes ganas de auto superarte después de un suceso poco esperado. Como si el sol te despertara con una gran energía que nadie te puede quitar, jamás había sentido esta agonizante sed y nerviosismo de ver a alguien de nuevo, tal vez no éramos nada, tal vez ni siquiera le gustaba. Más en mi, en mi estaba causando más sed a mi capricho. 

Me bañé y aliste, me sentía bastante bien. Salí fugaz de mi casa, el sol pegaba en mi rostro, sonreía al recordar los momentos de ayer en mi mente, aún cuando estos no fueron tal y como hubiese querido, por al menos llevaron todo a un beso en mi mejilla. El clima estaba perfecto, todo estaba perfecto.

Tomé el bus, ansioso de poder llegar saludarla, decirle "Hey te espero en la estación" o algo así. 

Llegué a la universidad, hasta me atreví a bajar de un pequeño brinco, el viento pegaba en mi rostro, me sentía como hace mucho no me sentía, mejor que nunca.

Caminando por el largo pasillo de entrada me encontré esos ojos, estos se fijaron en los míos.

Me paré en seco para sonreírle. Ella empezó a acercarse a mi, poco a poco, tomando ritmo hasta comenzar correr, mi sangre subía y mi ritmo cardíaco se aceleraba. No podía mover ni un solo músculo de mi cuerpo.

Llegó a mi dando un brinco rodeando mi cuello con sus brazos y sus piernas mi torso, me miró a los ojos por segundos, bajó su mirada lentamente a mis labios.
Me besó.

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No pude contenerme en lo absoluto, tomé rápidamente sus piernas y su rostro acercándola más a mi, el beso era tan apasionado, con tanta necesidad que no podía pensar en otra cosa que seguir besando esos adictivos labios que sabían tan bien. Con la respiración agitada y labios entre abiertos me miró. 


- Tim es nuestra estación.

Sin entender que pasaba, le miré desconcertado.

- Despierta.







Y desperté.



Fue un sueño.

Solté un gran suspiro al darme cuenta el gran sueño que había tenido, ni siquiera podía creer que fue con ella, no tenía ni una semana hablándole y ya estaba teniendo esta clase de sueños con Jean, tenía una extraña sensación en mi estómago. ¿Ahora con que cara iba a verle? 

Llegaría y le diría. - Hola Jean ¿Qué crees? que soñé contigo, corrías a mi y me besabas apasionadamente. 

Carajo, esto no está bien. Michael Michael... ¡¿Por qué demonios debe de gustarte ella en especial?!

𝘾𝙖𝙣 𝙄 𝙘𝙖𝙡𝙡 𝙮𝙤𝙪 𝙩𝙤𝙣𝙞𝙜𝙝𝙩 [Timothée Chamalet]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora