Sopa de letras Malec

B -Besos

Okey, esto tendrá Mpreg, así que si no es de tu agrado o te sientes incomodo con eso, te sugiero que te saltes al siguiente capítulo.

Prepárense para una sobredosis de diabetes ;)

∞

Magnus abrió sus ojos con pesadez. La luz del sol entraba directamente por su ventana hacía su rostro, haciendo que despertara de su profundo sueño.

Volvió a cerrar sus ojos e intentar cambiar de postura pero no pudo hacerlo. El brujo tenía a su novio cazador de sombras casi encima de el. Sus ojos azules cerrados con la boca un poco abierta y algunos leves ronquidos escapando de sus labios.
La vista era simplemente perfecta, y era la vista que Magnus querría tener durante toda su eternidad.

Mirando un poco más abajo del rostro de su novio, Magnus miró con una sonrisita de orgullo la barriga embarazada de 7 meses del ojiazul. Siempre que la veía tenía ese sentimiento. Orgullo. Estaba tan orgulloso de que el había ayudado a crear a vida que crecía en el vientre de Alec.

Realmente nunca imagino tener una familia. Aparte de que no podía biológicamente, no le apetecía tener una, no era para él. Eso fue hasta que llegó el cazador de sombras con su mirada determinada que hizo olvidar todos esos pensamientos y anhelar una familia propia.

Cuando descubrieron su embarazo, fue un shock para ellos. En primera, ambos eran hombres, se supone que un hombre no embaraza a otro hombre. En segunda, Magnus era un brujo, los brujos no pueden tener hijos propios. En tercera, ¡AMBOS ERAN HOMBRES! ¡LOS HOMBRES PUEDEN TENER HIJOS!

Si, queda bastante claro que era imposible tener hijos biológicos.

Flashback

Los ruidos de arcadas provenientes del baño, despertaron a Magnus de su sueño. No lo pensó dos veces y corrió hacía los ruidos, encontrando a Alec de rodillas ante el baño, vomitando. Era la sexta vez que ocurría esta semana y obviamente ya era algo de preocupación.

Se acercó a su novio y le acarició la espalda en un gesto reconfortante, esperando a que terminara de vomitar para empezar a hablar —Alexander, llevas casi todas las mañanas de esta semana vomitando. 
Creo que es momento de ir con Catarina por una revisión.

Magnus a pesar de ser un brujo que dominaba bastante bien la curación, nunca sería tan bueno como Catarina en ese aspecto. Él prefería enfocarse en otro tipo de magia.

—No es nada, Magnus. Seguro solo es un virus estomacal o algo así. Nada de que preocuparse— dijo Alec acurrucandose en un costado de Magnus.

—Bueno, entonces veremos qué te puede dar para tratar este virus. Alec, es extraño que te enfermes. Dios, ni siquiera sabía que los cazadores de sombras podían enfermarse hasta que empezaste a amanecer así.

—Como quieras, pero estás exagerando. —Alec rodó los ojos con fingida molestia.

∞

Un portal se abrió en el loft del brujo, del cual salió Catarina con su traje de enfermera rosa claro. Tenía apariencia cansada, pero venía con una leve sonrisa.

—Bien, ¿qué síntomas tienes, Alec?

—Vómitos en las mañanas, mareos con olores fuertes, cansancio y fatiga.

—Si no fueras hombre y los brujos estériles, te diría que estás embarazado —murmuró Catarina haciendo sonreír a la pareja —Recuéstate en el sillón para hacer un chequeo de cuerpo completo, por favor.