Ruina Parte 3

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Si, le estoy sacando segundas y terceras partes a mis capítulos para que la historia me dure más. No me critiquen porque lloro.

¿Me creerían si les digo que prefiero a un Magnus pasivo?🧐

El que diga lo contrario tiene absolutamente toda la razón.

Bueno, bueno, nada que ver el comentario pero quise decirlo dkskak

Otra cosa, supongamos que el asunto de Valentine y Sebastian se resolvió antes de tiempo y tan tan. No me quiero meter con los problemas que pasaron en la saga porque el capítulo se extendería demasiado.

Disfruten ;)

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7 meses después

—Mierda, Magnus, ¿qué vamos a hacer? —preguntó Alec caminando alrededor del baño del loft de Magnus (bueno, técnicamente también es de él gracias a la mordida que tenía en su cuello) y jálandose el cabello.

Magnus estaba muy tranquilito mirando el temporizador que tenían en el celular mientras tarareaba. Estaba sentado en la tapa del baño e incluso movía los pies infantilmente.

—¿A qué te refieres?

—Mis padres apenas aceptaron nuestra relación, y mi papá sigue algo distante desde que se enteró que me marcaste. ¡¿Qué les diré sobre esto?

—La aprobación de tus padres nunca me ha importado anteriormente. No veo porque tiene que importarme ahora.

—¡Porque esto es más serio! Ángel, Magnus. Una cosa es que seamos pareja y que me hayas marcado, ¡pero dejarme embarazado es una cosa muy distinta!

—A ver, en primera, creo que después de que hayas elegido a un brujo que conoce su pasado en el Círculo lo que hagas con él ya no será tan impactante. En segundo, nuestro garbancito aún no está confirmado, todavía nos falta esperar dos minutos para que la prueba termine. Y en tercera, lo he visto en los ojos de Maryse, quiere ser abuela, yo lo sé.

—Si, quiere ser abuela cuando su hijo tenga más de 21 años, no a los 18.

Magnus se acercó a él y lo abrazó, recargando su mentón en su cabello oscuro. El abrazo fue correspondido y pudo sentir a Alec relajarse contra el. Él estaba más que emocionado por la idea de ser padre, pero presentía que su pareja podía aventarle un ladrillo si lo demostraba, así que se lo guardó para si mismo.

—Oye, cariño, todo saldrá bien. Si la prueba sale posit—.

Beep beep

Ambos tragaron saliva. La alarma.

Magnus la apagó y tomó la prueba entre sus dedos. No la vió, tenían que hacerlo los dos juntos.

—A la cuenta de 3 —dijo Magnus buscando los ojos azules de su omega —. 1... 2... 3.

La volteó. Vieron una raya.

Negativo.

Ninguno de los dos supo como sentirse.

En lugar de del alivio que Alec suposo que sentiría, una oleada de tristeza lo abordó.

—No lo entiendo —murmuró el ojiazul tomando la prueba —. Pasamos nuestro celos juntos y no usamos protección, debió ser positivo.

—Tal vez no era el momento —intentó animar Magnus pero sus propios ánimos estaban por el suelo. Sonrió tristemente —, si, tenemos siete meses saliendo y apenas un mes desde que te marqué. Aún nos falta por mucho por ver. Literalmente tenemos toda la eternidad para tener hijos.

Sopa de letras MalecDonde viven las historias. Descúbrelo ahora