𝐃𝐀𝐑𝐊 𝐊𝐈𝐍𝐆𝐃𝐎𝐌

𝐏𝐫𝐨𝐭𝐞𝐜𝐜𝐢𝐨́𝐧

¿Por qué lo hizo?

Jaemin se mantenía paralizado, había asesinado a alguien a sangre fría, era un monstruo, un completo monstruo que había actuado sin pensar y de la manera más despreciable, pero al final había acabado con un asesino. Levantó su rostro buscando la mirada de Jeno pero este lo miraba aterrado, ni siquiera se había movido del lugar donde estuvo peleando con Doyoung, trató de acercarse, pero Jeno levantó sus manos indicándole que no lo hiciera, no lo quería cerca. Los desgarradores gritos de Taeyong causaban escalofríos en el cuerpo de todos los presentes, se podía sentir su dolor en el ambiente, su amado había muerto en sus brazos así como él lo había pedido, pero no había sido él quien acabara con su vida, no cumplió la promesa por completo.
Johnny se acercó al cadaver de su hermano y retiró de su pecho la daga que había acabado de retirar su vida, tomó el rubí llenado con el alma de su hermano y lo retiró de la daga, acercó el mismo a su pecho, abrazándolo por unos minutos, ¿Así era como se sentía perder a tu otra mitad? Ambos fueron concebidos al mismo tiempo, crecieron juntos, vivieron juntos, siempre lo protegió de los golpes y regaños, le dio todo lo que él deseó, veló por su calidad de vida y ahora, en menos de cinco minutos lo había perdido, ahora estaba incompleto. Johnny se dejó caer en sus rodillas y colocó su cabeza en el abdomen de su hermano, gritó con todas sus fuerzas, deseando que así el dolor abandonara su cuerpo, aunque él asesino a su madre, aún sí le fue desleal, lo amaba, era su hermano y su única familia en el mundo, ahora ya no estaba.
Jeno se acercó rápidamente a Taeyong para poder apartarlo del cadáver, permitiéndole a Johnny tener su duelo, Jeno abrazó con fuerza a su padre y le permitió llorar en su pecho, incluso no pudo evitar acompañarlo también en su llanto.
Jaehyun caminó hacia Jaemin y colocó su mano sobre su hombro, el joven ni siquiera se movió de su lugar, las emociones estaban en guerra en todo su cuerpo, no sabía cómo reaccionar, Jaehyun acercó su boca a su oído y murmuró "al final era un inocente, no le diste tiempo de hablar." Jaemin miró al hombre a su lado y solo pudo tomar su cabeza con sus manos, intentando ocultarse de todos por lo que había hecho, sin pensar más, salió de aquel lugar por las enormes puertas que conducían hacia las habitaciones de la segunda planta, necesitaba refugiarse, no era un salvador, era un asesino posiblemente peor que Doyoung; el joven abrió con fuerza las puertas de la biblioteca real y se encontró a las dos deidades sentadas frente a la mesa, las cuales se levantaron de inmediato al verlo en ese estado.

- Lo maté.- murmuró acercándose a una silla y sentándose en ella, la diosa de la agricultura se acercó a él y colocó sus manos en sus hombros, dándole suaves masajes para que se calmara.

- ¿De qué estás hablando?- Preguntó Afrodita quien le miraba desde su lugar.

- Asesine al responsable de la muerte de tu hija, yo acabé con él...- Tomó las manos de Demeter intentando mostrarse valiente, pero de inmediato comenzó a llorar, sintiéndose el ser más asqueroso que existe.

...

Johnny se mantuvo sobre el pecho de su hermano, no quería apartarse de ese lugar, ya habían pasado un par de horas desde lo sucedido y nadie se había movido de su lugar. Taeyong tomó el atrevimiento de acercarse, recibiendo por parte de Johnny su mano, la cual estiró hacia él, Taeyong la tomó con cuidado y recibió el rubí de la daga.

- Sé que el hubiese deseado que tú mantuvieses su alma contigo, te va a cuidar a donde sea que vayas, por favor cuídalo.- Johnny se levantó de su lugar y tomó a su hermano en brazos.- Me llevaré su cuerpo, tu quédate con su alma, yo con lo que una vez fue.-

Taeyong apegó el rubí en su pecho, Jeno se acercó nuevamente a él colocando sus manos en sus hombros y Jaehyun se les unió.

- Vuelvan a ser la familia que solían ser, es lo que él hubiese querido.- El dios se detuvo en la puerta de salida y miró por última vez a la familia real, pero su mirada se detuvo en Jaehyun a quien le dedicó una sonrisa.- Cumpliste con su petición, gracias.- una lágrima rodó por su mejilla y continuó con su caminó, dejando que la familia real observase sus pasos hasta que desapareció entre los árboles del bosque, más allá del puente del palacio.