¿Jeno? ¿Jeno había estado rondando el palacio descuidadamente? Quizá había sido él quien le visitó el día que le hablaron en el jardín, pero esa no era su voz, ¿Había cambiado en tan poco tiempo? Miles de dudas inundaban la cabeza del joven príncipe, incluso aquella noche no pudo dormir luego de que su padre le dijo que debía llevarle a su "hermano" ¿De nuevo se repetiría el ciclo de traición, infidelidad y muerte? No estaba listo para asesinar a alguien más luego de aquel acontecimiento, por culpa de eso su hermano le había abandonado.
– ¿Capitán?– La voz de uno de sus nuevos soldados le distrajo de sus pensamientos, así que le miró prestándole atención.
– ¿Si?
– Pues debía darnos las órdenes y lleva más de diez minutos fuera de sí, ¿Se encuentra bien?
¿Qué? ¿Había estado pensando por diez minutos en esas cosas? ¿Frente a sus soldados?
– Lo siento, trataba de pensar en alguna estrategia para nuestra tarea la cual tiene mucha importancia, especialmente para el rey; pero, se me ha ordenado que el rey Lee no puede enterarse de nada. ¿Queda claro?– Preguntó a sus soldados.
Todo el equipo asintió, así que comenzó a explicar paso a paso la tarea.
– Debemos buscar a esta persona.– Colocó sobre la mesa el retrato de su amado, para que todos pudiesen ver.– Se llama Jeno, observen muy bien su apariencia, esta es la persona a la que estamos buscando. Según me han informado, ha estado rondando el palacio, cruzándose por los bosques, así que no debería ser difícil localizarlo.– Su pulgar fue frotado en su mandíbula y su vista se mantenía fija en aquel retrato.– Vamos a dividir las tropas, pero todos deben de estar escondidos, ya que no podemos levantar sospechas o perderemos nuestra oportunidad de atraparle y Jeong Jaehyun no estará contento.
El príncipe camino al rededor de la mesa mientras daba una serie de órdenes que tenían que cumplir cada uno de sus soldados, dividió las tropas y les dió las tareas a cada uno antes de permitir que se retiraran a preparar todo. Al quedar sólo en la sala de reuniones, tomó asiento en una de las sillas y dejó caer su cabeza hacia atrás, cerró sus ojos y trató de calmarse un poco, estaba a pocas horas de atrapar a su hermano, mejor dicho, el amor de su vida, una de la órdenes que dió fue que no le lastimaran, no quería que Jeno sufriera.
...
-¿Aún no es la hora? Siento que hemos esperado miles de años.
- No han sido demasiados, solo debes tener paciencia y cumplir la palabra que tú hermano nos dió.
- ¿Crees que su cuerpo...?
- No, tu hermano es uno de los dioses más poderosos, al igual que tú, su cuerpo permanecerá perfecto para el día.
- Me siento ansioso de que llegue dicho día, creo que nadie va a estar listo para eso.
- Es que así será, mi pequeño, nadie estará listo para lo que sucederá, Jaehyun podría caer en la locura, el que me preocupa es Taeyong, no sé cómo reaccionará y sabes que Doyoung fue muy claro de qué él debía estar a salvo de todo.
...El palacio se sentía tan frío, la oscuridad rondaba cada uno de los pasillos, hace años no se veía una noche tan oscura como esa, Lee Taeyong caminaba por altas horas de la noche por cada uno de los pasillos, quería ver la luna en alguno de los ventanales y logro hacerlo en el más alejado de las habitaciones reales, aquel ubicado en el último piso de la torre. Posó sus calidad manos sobre las rocas de la ventana y miró como la luna iluminaba el bosque del palacio, sintió una fuerte presencia a su lado, una que antes había sentido.
- Sabes que la necesito.
- No voy a dártelo.
– Es muy importante, por favor, prometo devolverla.
- ¿Cómo me compruebas que no la usarás para salvar tu vida?
- Padre, confía más en mi, no te traeré solo esa maldita piedra, sino que vendré con algo mucho mejor.
- Jeno, tu padre está cazándote, no he podido opinar nada sobre el tema ya que me excluyó de la decisión sobre hacerlo.
- Eso es lo que menos me interesa por ahora.- El joven príncipe tomó las manos de su padre y dejó un cálido beso en cada una de ellas.- Te prometo que voy a cuidarme, no logrará atraparme, a pesar de todo soy más astuto que él.
- Jeno, realmente no es Jaehyun el que me preocupa es otro...- El rostro del rey Lee reflejaba cierta tristeza, ya que él conocía, los detalles de la cacería.
- Estoy emprendiendo una misión muy importante y nada me va a detener, ni aunque mi padre me amenace con constancia, él no va a lograr absolutamente nada con ello.
- Jeno, estás arriesgando tu vida por algo que aún no me cuentas y ni siquiera sé que debería hacer yo, quizá ¿Ejercer mi labor de padre? No lo sé, quiero protegerte pero sé que traerte de nuevo al palacio solo causaría problemas y es lo que menos deseo.
- Padre, siempre has actuado tan sumiso en presencia de Jaehyun, dejas que él controle tu mundo a pesar de no ser la persona con quién realmente deberías estar unido, sabes que tu alma gemela es otra persona que...
- Que está muerta.
- ¿Qué?
– Jeno ¿Olvidaste lo de hace un tiempo? Jaemin mató a Doyoung, él ya no está en el mundo y es algo que debes entender, simplemente...
– Solo dame la piedra y te prometo que todo cambiará.
- ¿Qué harás con ella?
- Traeré tu felicidad de nuevo, lo prometo.
Ambos se sobresaltaron al escuchar un ruido en la parte baja y luego como alguien comenzaba a subir las escaleras. ¿Tae? La voz de Jaehyun despertó el miedo en el rey, miró a su hijo una última vez y lo tomó de su mano para llevarlo a la salida secreta que había descubierto gracias a Jeno.
- Vete.
- Volveré hasta que me des lo que te pido.
- Jeno no regreses, es peligroso.
- Jaehyun no me asusta.
- Jaehyun solo dió la orden, el no es quien va a cazarte.
- ¿Entonces quien?- Preguntó el príncipe entrando en el estrecho pasillo.
- Jaemin es el encargado de traerte vivo o muerto.
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𝐃𝐀𝐑𝐊 𝐊𝐈𝐍𝐆𝐃𝐎𝐌
FanfictionEn un reino, donde la mentira, oscuridad, la venganza y la pasión, son parte importante de un equilibrio. Jaehyun no quiere perder a Taeyong, pero Taeyong tiene otras intenciones. Taeyong, un rey brillante, con facciones creadas por los mismos diose...