"Expiraba ya el día, convidaba
el aire a descansar de sus fatigas,
y hombres y bestias buscan las amigas caricias.
En silencio reposaba todo.
Solamente yo me aprestaba a la dura batalla, enemigas todas las fuerzas,
todas las intrigase insidias de la noche que empezaba."
Taeyong podía sentir la respiración de aquel ser muy cerca de su oído, aunque tenía una lucha interna por querer separarse del dios, su cuerpo no respondía, era como si estuviese bajo algún encanto, ¿Cómo era eso posible?
- Tenemos mucho de qué hablar, rey Lee, pero me gustaría hacerlo en presencia de los demás.
- No te otorgaré tal dicha, no hablarás con ninguno de ellos.- Su voz entrecortada solo le demostraba a Yuta que el rey tenía miedo.
- No te estoy preguntando, te lo estoy informando.- El dios se colocó frente al rey y este fue envuelto con una sombra negra, sentía un calor insoportable recorrer su cuerpo, como si estuviese siendo quemado en una hoguera.
El rey protegió su rostro entre sus manos deseando que esa sensación quemante se acabará, pero, comenzó a sentir nauseas y mucha debilidad, luego de un par de segundos que para el rey fue como si pasaran horas, sus piernas se estamparon contra el duro suelo, cayendo sentado sobre este, sus manos aún se mantenían en su rostro, pues las nauseas y el calor aún permanecían en él.
- Quítate las manos del rostro y admira lo que será tu juicio final.-
El rey talló sus ojos unos segundos, buscando recuperar su vista, al levantar su cabeza vio todo lo que estaba ante él... El salón real se había convertido en el mismo infierno, aquellos seres procedentes del inframundo se encontraban sobre las columnas de mármol, una sustancia negra, clásica de uno de los dioses oscuros corría por los pisos del salón; pero esa no fue su mayor sorpresa, lo que ganó su completa atención fue lo que había en el altar donde alguna vez estuvieron los tronos reales, se encontraba Doyoung acompañado de Hades, Jaehyun a su lado y el gran Zeus sosteniendo a Afrodita, su madre, la misma se encontraba atada de manos y en su rostro se podían ver rastros de golpes que le habían dado, trató de levantarse pero fue un completo fracaso ya que sus piernas flaquearon y las risas de los demonios le hicieron doler la cabeza...
- Lee Taeyong, rey y dios fracasado, has cometido actos impuros e imperdonables los cuales trataste de ocultar culpando a tus propios hijos, asesinaste a personas inocentes, condenaste a tu pueblo a la miseria, arrastrando contigo a Jeong Jaehyun quien también será juzgado en su momento. Solo has demostrado ser un parásito para el Olimpo, hijo de una vil mentirosa...- El dios más poderoso del inframundo fue interrumpido por su hermano, Hades dio un paso adelante y miró al rey.
- ¿Hijo? Por favor, estamos aquí para que esta escoria conozca la verdad, aquella que quien dice ser su propia madre ocultó por tanto tiempo.- Doyoung trató de moverse para detener a su padre pero fue detenido por Zeus quien le hizo un gesto con su mano.- Tu madre, la gran diosa Afrodita te mintió, tú pequeño escombro no eres más que un maldito humano sin poder imponente ante el Olimpo, fuiste robado de tu verdadera madre una noche de tragedia, así como robaste al pequeño Jaemin, tu verdadera madre fue asesinada por Afrodita, su deseo de ser madre acabó con su pensamiento inteligente, planeó todo para que las cosas salieran a la perfección.
- ¡Cállate! No creeré en toda la mierda que me estas diciendo, crees que le haré caso a un maldito dios que fue desterrado y enviado con toda su mierda a una cueva asquerosa, simplemente eres un dios pisoteado y sin valor alguno.- La voz de Taeyong hizo que todo lugar quedara en silencio, el rey sonreía egocentricamente al ver la cara de disgusto del dios, pero dicha sonrisa fue borrada ante el golpe descomunal que el dios oscuro le dio con su pie en su quijada. Doyoung le había golpeado sin resentimiento alguno.
- Tu madre coordinó todo con tiempos exactos, que coincidieran con mi nacimiento, todo con el fin de ocultar su verdadero objetivo el cual era destruir el Olimpo, la profecía de Plutón no hablaba de mi, pero ella sabía que la descripción de los poderes que se había escrito en el pergamino iba a coincidir con los que me otorgarían al nacer. La profecía todo el tiempo habló de ti y Afrodita, fuiste entregado al fuego divino para convertirte en un dios, ese proceso creo a una bestia, un ser insolente, terco, malcriado, pero muy inteligente y con una belleza asombrosa, la cual fue otorgada porque Afrodita te dio su sangre antes de lanzarte al fuego.- Doyoung caminaba al rededor del rey lastimado, el cual acariciaba su quijada.- Todo le salió perfecto, nadie iba a desconfiar de ella, es por eso que le fue tan fácil el condenarnos a nosotros y sí, fuimos engendrados con el deseo de destruir a Zeus, pero nosotros no formábamos parte de la maldita profecía... y lo más sorprendente de todo esto es que tú, maravilloso rey, ya lo sabías.-
Taeyong levantó su cabeza para poder mirar al dios ante él.
- Así es... yo lo sabía.- Con dificultad se levantó y logró quedarse de pie, enfrentando al dios ante él.- Pero no era el único, además de mi Jaehyun lo sabía, siempre lo supo, fue nuestro cómplice en toda esta mierda, no me arrepiento de haber jugado con cada uno de ustedes, ¡Especialmente con él!- Nuevamente apareció esa sonrisa cínica que solo el rey lograba hacer, se acercó un poco más al dios.- Fue tan sencillo jugar con su mente y enviarlo a matar a tu madre... ni siquiera se negó y no, no estaba bajo mi encanto, lo hizo por ¿amor? Me encantó verla rogar por su vida, ver como trataba de detener a Jaehyun para que no la matara, fue tan encantador que podría hacerlo de nue...
Doyoung le sonrió al rey y colocó su dedo sobre su boca, interrumpiendo su aburrido discurso, lo tomó por su mentón con fuerza y le hizo mirar a Jaehyun que se encontraba en el altar, en un abrir y cerrar de ojos la sangre comenzó a brotar de su cuello, el rey Jeong colocó sus manos sobre la herida en su cuello tratando de evitar la hemorragia, pero el ahogo con su propia sangre le hizo caer al suelo y fue cuando Taeyong pudo ver a Johnny sosteniendo aquella daga con la que su madre había sido asesinada, el dios oscuro pasó sus dedos por la hoja de la daga y probó la sangre del rey agonizante en el suelo, los ojos de Taeyong se llenaron de agua, sentía que su corazón iba a salirse de su pecho y sabía que el dios a su lado escuchaba sus latidos, estaba aterrado, no esperaba tal acción, no para Jaehyun.
- De la misma forma que mi madre rogó por vivir lo harás tu, maldito bastardo.- Habló Johnny desde su punto, jugando con aquella majestuosa daga que comenzaba a robar almas.
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𝐃𝐀𝐑𝐊 𝐊𝐈𝐍𝐆𝐃𝐎𝐌
FanficEn un reino, donde la mentira, oscuridad, la venganza y la pasión, son parte importante de un equilibrio. Jaehyun no quiere perder a Taeyong, pero Taeyong tiene otras intenciones. Taeyong, un rey brillante, con facciones creadas por los mismos diose...