Kim Taehyung lo tenia todo o al menos eso lo creía, un hombre exitoso, con muchas mujeres muriendo por él, creía que lo sabia todo, pero realmente no. Ahí entraba su mayor pregunta. ¿Cuál era el secreto del asistente Jeon? Jeon Jungkook, su asistent...
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Después que los chicos tuvieran su castigo bien merecido todos se pusieron las pijamas que Jimin les habia obsequiado de navidad, Jungkook se sentía levemente cómodo, no tenía que estar tocándolos, pero podía compartir un poco con ellos, inclusive podía hablar un poco más sin sentirse muy incómodo por la cercanía, gracias a todos conocía algunas cosas ridículas de Taehyung, Hoseok habia tenido la idea de tomar algunas fotos con la cámara de Taehyung que habia encontrado, en una de esas oportunidades acomodo la cámara para tomar una foto de todos frente al árbol de navidad.
Taehyung entro a la habitación después que los chicos se fueran a las habitaciones que acostumbraban a usar cada que se quedaban a dormir, tenía un poco de miedo de como mirar a Jungkook después que este confesara que sabía desde hace mucho de la apuesta y aún así este quisiera presentarle a su madre, el menor estaba apoyado a la ventana, le gustaba porque la habitación de Taehyung tenía un gran ventanal con vista increíble del área donde estaba ubicado el hotel.
—Kook... —Jungkook volteo a verlo. —Lo siento por acercarme a ti con un propósito poco honesto —Se disculpó.
—Disculpas aceptadas —Dijo caminando hacia él. —¿Destruyó muchas cosas? —Taehyung rió cuando Jungkook paso sus manos alrededor de su cuello.
—Solo necesitaba sacar mi ira, aún tengo mucha cumulada, no puedo creer lo fuerte que fuiste, por años soportaste todo eso tu solo... —Taehyung rodeo su cintura.
—Ya... No estoy solo —Dijo sonriente.
—Jimin me dio un terrible regalo de navidad, pero creo que podríamos usarlo bien —Una sonrisa coqueta se escapó de sus labios.
—Yo creo que estará esperando mucho hasta que piense que su castigo se levantó —Le dijo.
—¿Castigo? —Preguntó.
—Jimin y Hoseok Hyung dijeron... Que podía recibir un castigo por haber aceptado la apuesta —Recordó.
—No puedo creer que les harás caso a mis dos amigos —Dijo. —Pero no es no, vamos a dormir —Habló.
Y Jungkook lo recordó, no era no y eso le encantaba, porque cuando no quería algo era simplemente un no y Taehyung lo aceptaba dándole un abrazo, un abrazo que Jungkook amaba, porque solo podía sentir seguridad.
Taehyung habia cogido de costumbre abrazar a Jungkook cada que se quedaba a dormir en su departamento, Jungkook tampoco se quejaba de la cercanía, Taehyung habia querido pedirle que vivieran juntos por el poco tiempo que tenían saliendo y porque sabía bien que a Jungkook le gustaba tener su pequeño espacio, aunque Taehyung no estuviera del todo seguro que fuera lo correcto que viviera en una pequeña casa en la azotea, tenía lo justo para una sola persona, pero Jungkook merecía aún más. Se habían quedado dormidos después de eso, Jungkook creyó haber escuchado algo, pero estaba lo bastante somnoliento cuando creyó haber visto la sombra de alguien desde la puerta, pero los quejidos de Taehyung lo hacían querer seguir durmiendo, este parecía que tenía un sensor que se activaba cuando Jungkook se movía mucho de sus brazos.
