Kim Taehyung lo tenia todo o al menos eso lo creía, un hombre exitoso, con muchas mujeres muriendo por él, creía que lo sabia todo, pero realmente no. Ahí entraba su mayor pregunta. ¿Cuál era el secreto del asistente Jeon? Jeon Jungkook, su asistent...
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Jungkook de 5 años.
El niño pequeño lloraba porque había perdido de vista a su madre, era pequeño y sabía que cuando mamá decía "No me sueltes" es que no debía soltarla por nada, pero se distrajo con un cachorro que hizo que soltara su mano y ahora estaba llorando por estar solo.
—Muchachito, ¿Qué tienes? —Un hombre se sentó a su lado preguntando de manera amable.
—P-per-perdí a... Mami y me... di-rá malo —Habló entre hipos con lágrimas.
—Pero si ya eres un niño grande, mira cómo puedes hablar tan bien —Dijo. —¿Cuántos años tiene nuestro campeón? —Preguntó.
—Ten-go así —Mostro su mano con todos los dedos diciendo que tenía cinco años.
—Bueno, podemos esperar a que tu mami aparezca, no queremos que nada malo te pase —Dijo.
Jungkook dejo de llorar en todo el rato que aquel hombre lo acompañó sentado a que su madre lo encontrara, la mujer lo llamó desesperada y abrazo enseguida lo vio, agradecida que no le había pasado nada malo.
—Usted debe ser la mamá de este campeón —El hombre habló. —Me presento soy Chan Joon Su, le hice compañía porque lo vi llorando y temía que pudieran hacerle algo —Dijo.
—Muchas gracias por cuidar a mi hijo. Jungkook, no vuelvas a soltarme la mano —Su madre le dijo mientras el pequeño asentía.
—Helado —El pequeño habló, su madre lo miro confundida.
—Ah, eso es culpa mía, le prometí que le daría un helado solo si dejaba de llorar y portaba bien mientras usted llegaba —Comentó.
—No me presenté, mi nombre es Jeon Sun Hee, él es mi pequeño Jeon Jungkook, sobre el helado que le prometió no debe molestarse —Dijo.
—No, pero quiero, el pequeño Jungkookie hizo la promesa conmigo y si no la cumplo le daré un mal ejemplo, los invito —Habló.
—Bueno... Ahora es un poco complicado —Dijo.
—Podríamos acordar una cita, salvo que su esposo lo crea indebido —Excusó.
—Mi esposo murió cuando Jungkook era solo un bebé —Dijo con un tono triste. —Le daré mi número y así podremos acordar una cita —Dijo con una sonrisa.
—Mami... ¿Vamos... a ca-sa? —Su madre asintió. —Pero mi helado —Dijo triste.
—¡Oye, campeón! Te invitare todos los helados que quieras, pero hoy no podrá ser porque mami tiene cosas importantes, así que nuestra promesa sigue en pie —Dijo mostrando el dedo meñique.
Jungkook hizo aquella promesa con aquel hombre, así comenzó todo, el hombre los invito un helado, luego una cena casual y así fueron enamorándose el uno del otro, no importo que Sun Hee fuera madre soltera, era una mujer preciosa, joven, con un corazón noble y un hijo tan dulce como el helado.
