Capitulo 28

3.6K 418 285
                                    

—Jungkook, ¿Te has sentido distinto últimamente? Me contaste que mañana es la presentación de un nuevo proyecto en la empresa donde trabajas, debes sentir nervios

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Jungkook, ¿Te has sentido distinto últimamente? Me contaste que mañana es la presentación de un nuevo proyecto en la empresa donde trabajas, debes sentir nervios. —Namjoon cuestionó.

—Me he sentido... Mejor —Dijo. —Los medicamentos me dejan dormir, pero...

—¿No tomaste tus medicinas? —Cuestionó.

—Solo en la noche... El sábado —Estaba nervioso. —Yo... Fui a casa de mi... de él... mi no-novio y me quedé dormido —Dijo. —¡Pero no hicimos nada! Él no sabe cómo hacerlo —Contó.

—¿Tú sabes cómo?

—Solo sé lo que pase en mis abusos, nada más eso. —Dijo.

—Jungkook, hoy probaremos algo diferente. —Namjoon se acomodó en su silla. —Intenta saludarme dándome la mano —Namjoon estiro su mano, pero Jungkook no la apretó.

—No puedo hacerlo —Dijo.

—Jungkook, ¿Qué hay distinto entre estrechar mi mano a tocar a tu novio? —Cuestionó.

—No lo sé. —Respondió.

—Bien, hoy probaremos algo nuevo. Terapia de exposición —Jungkook no entendió. —Veras, Jungkook, la terapia de exposición ayuda a que te enfrentes en forma segura con lo que te asusta para que puedas aprender a encararlo de forma efectiva. Será útil para la reviviscencia y pesadillas —Namjoon explicó.

—Ok —Jungkook acepto dudoso.

Namjoon le pidió a Jungkook esta vez que se recostara en el mueble y pusiera sus manos en su abdomen para comenzar con lo más largo, la reviviscencia.

Jungkook de 16 años.

Los últimos meses habían sido una desgracia, cuando Jungkook cumplió los 13 años entendió bien que es lo que su padrastro hacia con él, ya no quería que eso siguiera pasando, quería huir de su casa, pero no podía dejar a su madre quien aún se veía muy enamorada de un lobo vestido de oveja, cuando Jungkook cumplió los 16 años su madre fue despedida por recorte de personal y a su edad conseguir trabajo de auxiliar era difícil, por no decir imposible, ese día había llegado a casa temprano, para su horrible sorpresa cuando subió a la habitación vio como su hijo mordía una almohada y tenía los ojos llenos de lágrimas y sus brazos y piernas atados mientras era abusado sexualmente, creyó que fue un accidente cuando su esposo le había dicho que Jungkook se había quemado el brazo, no fue un accidente, él mismo se lo hizo a Jungkook como castigo por resistirse.

—Ma-mamá —Dijo a duras penas.

—¡¿Qué le estás haciendo a mi hijo, maldito?! —La señora Jeon quiso golpearlo con su bolso, pero claramente su esposo tenía más fuerza y la amarró. —¿Por qué le haces esto a mi niño? —La mujer lloró.

—Porque amo a mi hijo. —Dijo besándole los labios a la mujer.

—¡Jungkook no es tu hijo! Mi hijo no podría tener un padre que abusa de él —Dijo.

El secreto del asistente jeon TAEKOOKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora