Narrador omnisciente
En el mundo criminal solo sobrevive el más fuerte y cuando se hace referencia a sobrevivir no solo se trata de tener vida en el cuerpo, ser hábil e inteligente para permanecer de pie siendo un ser temido en el mundo sino también permanecer vivo en el recuerdo de quienes tuvieron el placer de conocer a esas personas recordando sus hazañas como las mejores después de la muerte y los años que han de pasar después de ella.
Francesco Martinelli fue uno de los criminales más temidos en los años setenta donde su crueldad y sadismo fueron siempre las características por las que lo conocieron ganándose el respeto no solo de las demás mafias que laboraban en Italia para ese entonces sino también de los demás grupos criminales en el mundo.
Su modo operandi fue estudiado por todas las autoridades criminalística del mundo ya que sus métodos de comercialización de narcóticos y el manejo de sus demás negocios sucios eran incluso admirados por los criminólogos por la manera limpia, acertada y muy bien pensada de proceder logrando con eso ganarse el respeto de los criminales como el de las autoridades ya que una cosa era atrapar a criminales viles pero una muy distinta querer ir detrás de ese ser que jugaba al gato y al ratón como se le antojaba con las autoridades poniéndolos en aprietos en más de una ocasión.
Su porte elegante acompañado con esa aura misteriosa lo hacía ver temerario pero quien llegaba a hablar con él descubría que detrás de la fachada de un criminal había un gran hombre que aunque algunos no estaban de acuerdo con los asesinatos, robos, prostitución y guerras contra gobiernos admiraban su esencia cubierta por respeto, responsabilidad, solidaridad y benignidad con los necesitados ya que en más de una ocasión hacia robos a gran magnitud dando todo lo conseguido a los pobres aunque eso no lo hacía menos malo.
Muchos de los que intimaron con él también descubrieron su gusto por la escritura que era lo que más disfrutaba después del piano donde se dejaba guiar de la emocionante vida de mafioso para plasmar entre líneas una bibliografía de todo lo visto por sus ojos, sentido en su piel y lo hecho con sus propias manos.
Sus obras inéditas permanecen en un banco en las afueras de Italia ya que esos escritos no son simples historias de época basadas en cómo se movían los negocios sucios mostrando un lado del mundo criminal que pocos conocían sino la narración de manera explícita de crímenes atroces hechos a la luz del día entre ellos muertes y torturas de presidentes, cantantes, actores y mujeres del mundo del espectáculo que se negaban a una cita como también confesiones y secretos de todos los grupos delictivos con quienes trabajó.
Dichos manuscritos si llegan a estar en las manos equivocadas como en manos de las autoridades tendrían en su poder la potestad de galardonarse por todos los que han de caer por ser testigos, víctimas y victimarios de esos eventos donde no solo los criminales fueron los ejecutores porque en esos hechos están manos de policías, agentes, militares y gobernadores en todo el mundo involucradas, quienes al final del día son los verdaderos criminales por jugar con la soberanía de los países, dando discursos motivadores y rindiendo tributo a la unión y a la fuerza para finalizar con las organizaciones delictivas cuando ellos son los primeros en lucrarse con los negocios criminales.
Con esos escritos podrían hundir fácilmente todo un sistema político y judicial donde muchas organizaciones que promueven la paz mundial usando a su conveniencia a la sociedad como títeres mientras se hacen ricos con lazos directos con mafiosos. Son muchos los años que le caerían a esas personas ya que no son unas simples narraciones escritas en un momento de lapso emocional, son confesiones escritas a puño y letras de Francesco Martinelli logrando la elaboración de pergaminos embalados junto a pruebas palpables entre ellas fotografías, casetes de videos y fechas evidenciando todos los crímenes cometidos por todo un esqueleto de mafias desde los setenta hasta sus últimos días de vida.
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EUFORIA
AçãoLibro 2. Sensaciones que hieren. Dicen que donde hubo fuego cenizas quedan, pero para Eleora y Mihail este dicho no se aplica, ya que en ellos sigue estando viva la llama que durante meses los quemó. El regreso de esa mujer que pone a temblar a tod...