꒷꩜໋᪶˒꒰❛ 33❜𖦹̫ꪳ𝆃

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La idea era dar la noticia cuando todos estuvieran terminando de comer, sin embargo, vino Aether a interrumpir. Aunque no arruinó sus planes, de hecho, así les dio más tiempo para mentalizarse de lo que iban a hacer.

— Voy un momento a cagar. Ahora regreso.— Anunció sin pudor antes de salir corriendo al baño.

— ¡Ni se te ocurra atascar el váter, que esta es la casa de Kaedehara!— Le gritó el de mechas verdes, recordando la mala experiencia que vivió aquel día.

— Incluso estando aquí probablemente acabarías desatascando eso tú otra vez.— Se burló la rubia.

— ¿Qué? ¿Qué pasó?— Preguntó Gorou confundido.

— Una vez Aether atascó el váter de mi casa con una mierda y tuve que sacarla con las manos. Incluso utilizando guantes resultó asqueroso.— Se quejó. La verdad es que no le gustaba hablar de eso.

— Por favor, aún hay personas comiendo.— Recordó Xingqiu, quien había dejado de comer para poder hablar correctamente.— No es momento de hablar de mierdas.

— Cierto, lo lamento. Comed tranquilos.— Y pese a las quejas, las risas no faltaron.

— Eso me recuerda a algo que escribí en mi cuaderno siendo un niño. Supongo que también lo leíste.— Comentó Venti mientras le daba un suave apretón en la mano, pidiéndole en silencio que la tomara.

— Ah, es cierto... Joder, ¿qué le dais de comer a Aether?— Preguntó, logrando provocar las risas nuevamente.

— Ya volví, ¿me extrañaron?— El de trenza rubia anunció su vuelta y se sentó en el mismo sitio que antes.

— Te criticábamos a tus espaldas.— Informó Xinyan.

— Por cierto, ¿dejaste bien el baño?— Preguntó Venti.

— Con olor, pero sí.

— Vale, que ninguno entre en un buen rato.— Pidió Lumine.— Lo lamento, Kaedehara. Mi hermano es un animal.

— No, si ya me tiene acostumbrado.— Suspiró.

— Bueno, ¿el rey de la fiesta no tenía algo que decir?— Xingqiu finalmente se atrevió a darles el pequeño empujón que necesitaban, cambiando drásticamente el tema de conversación. Xiao observó con nerviosismo a su novio, quien asintió en silencio y sonrió.— Parecen un par de tomates. Hay que ver.— Murmuró.

— Sí, cierto. Dejemos de hablar de... Ese problemilla de Aether.— Dijo el de mechas verdes mientras cruzaba sus piernas.— Hay algo que debo anunciar.

— ¿La pusiste?— Quiso saber Gorou. Y sí, había dado en el clavo.

— Sí, Gorou, la puse.— Suspiró. Era la peor forma de decirlo, pero al menos era... ¿Original?— Venti y yo estamos saliendo.— Finalmente lo soltó.

La noticia cayó sobre todos de repente. Fue más sorprendente que cualquier cosa sucedida aquel día, logrando que hasta la anterior conversación pudiera ser considerada relativamente normal.

— Espera, espera. ¿Desde cuándo?— Preguntó Lumine.

— Desde hace una semana. Fue el diez de abril.— Los que no sabían intercambiaron miradas, incrédulos.

— ¿Y quién lo sabía?— Preguntó esta vez Gorou.

— Todos menos vosotros. A excepción de Xingqiu y Kaedehara.— Respondió Venti, quien de repente sintió a dos personas abrazándose a él.

— ¡Ay, nuestro hermano se hace grande!— Lloriqueó Aether.

— Tan joven y ya nos abandona...— Comentó su melliza, quien también estaba abrazada de su hermano menor.

Flowers ❜𖦹̫ꪳ𝆃 XiaoVenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora