Capítulo 19 (Mi lindo guardaespaldas)

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Continuación:


Antes de comenzar avanzar a mi perdición, detuve mi caminar por cierto problemita que aun no he resuelto.

- Pinche Stolas, maldigo su apetito sexual por mi ¿Qué acaso no puede pagar una puta? - murmuraba enojado, entando limpiaba el asiento que por accidente ensucie, con una toallita húmeda que nos acostumbramos a cargar en el auto por si acaso, y vaya que si me sirvieron para este momento.

Ya dentro de la casa lo primero que vi fue a la cocinera y sirvienta del hogar.

- Buenas tardes, Linda - la salude como de costumbre.

- Haa, B-Blitzø - me respondió el saludo con aparente nerviosismo como era de costumbre...algo raro si me lo preguntan - n-no lo había visto-

- Jum, está bien...¿El jefe está es su oficina? - le pregunte señalando la planta de arriba.

- Ho si, supongo que si, lo vi subir ¿Por que?-

- Tengo algunos asuntos que tengo que resolver con el - dije con una aire de arrepentimiento - gracias - me incline un poco en modo de despedida para ir a ver a mi jefe.

- Haaa si, si claro. podemos hablar en otro momento si gusta, o hacer otra cosa más tarde, claro si tiene tiempo, no quisiera distraerlo o meterlo en problemas, usted me importa mucho...- y seguía y seguía hablando, era muy extraña la escena. Alce una ceja ante el imparable parloteo de la pelimarron.

- Heemm si no quieres distraerme pues...ya me tengo que ir - comente algo incomodo caminando en retroceso, señalando las escaleras con mi dedo pulgar.

- Ups, perdone me en serio - miro el suelo apenada - entonces huumm, que le vaya bien jeje - rió nerviosa.

Le devolví la sonrisa pero algo extrañado, aveces pienso que es un poco inusual pero yo lo soy todo el tiempo ¿Que puedo hacer?

Ya estando en la jodida puerta de mi puñetero jefe, toque un par de veces.

- Que no me pida más sexo, que no me pida más sexo, que no me pida más sexo - murmuraba implorando a cualquier santo más cercano que escuchara mi plegaria (Aunque sea Ateo). Un "Adelante~" salio de su voz. El muy bastardo sabia perfectamente que era yo. 

Entre serio, con mis lentes oscuros puestos, de verdad no quiera fornicar con el nuevamente por el día de hoy...o del mes como acordamos.

- ¿Que es eso tan importante de lo que quiere hablar conmigo que me vea en la necesidad de estar en su despacho? - hable serio, acercándome a su escritorio.

Como siempre y sin tomar nada en serio, se rió a la bajo y forma elegante.

- Veras, Blitzy, solo te traje aquí para que podamos hablar sobre tu linda boquita - aclaro entrelazando sus dedos, gravitando sus codos en la mesa que tenia.

- Ni crea que me volverá a besar - le pelee con los brazos cruzados. El volvió  reír.

Puta risa...

- No es para eso. Tocando más afondo el tema, es sobre tu lengua~-

- Tampoco le daré el beso negro-

Su risa paso a una carcajada retumbante.

- Ho Blitzy, eres tan gracioso - se limpio una lagrima falsa de su ojo - debe ser porque antes fuiste payaso ¿No?

Un payaso...si claro.

- ¿Va ir al grano o que? - pegunte con algo de enojo acumulado.

- Blitzy...no quiero causarte molestias, pero, me harías un gran favor si regulas un poco tu manera un tanto vulgar de hablar.

Guarda-Corazones (Stolitzø) ~Stolas x Blitzø~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora