Capítulo 50 (...S~)

699 64 62
                                    

Continuación:


Una parte de él quería morir, la otra estaba tan cargada de adrenalina y miedo que no sabía exactamente qué hacer.

Un pitido sonaba en toda su cabeza como si estuviera sordo, desorientado y perdido, sin poder escuchar correctamente lo que sucedía en su entorno, miro a la multitud, teniendo solamente presente el sonido de su propia respiración acelerada.

Parecía como si las personas corrieran en cámara lenta, estar en medio de un desastre no era pensamientos muy agradables a decir verdad, viajando temporalmente al pasado en donde aquel terror lo vivió en carne propia.

Parpadeo con desespero, recuperando al fin sus sentidos, volviendo a posar su atención en Stolas, agarrándose como podía de la viveza misma al estar en un terminal equilibrio entre la vida y la muerte.

—¡Stolas! — lo llamo con terror y dolor en su voz y mirada —Mírame...¡Mírame! — poso sus manos ensangrentadas en el rostro del otro, haciéndolo que lo viera sin importar lo que sucediera al su alrededor, manchando su pálido rostro de aquellas marcas rojizas dejadas por el guardia. El millonario con todas las fuerzas que se estaban acabando pudo abrir los ojos, escurriéndole algo de dolor en sus ojos mediante unas diminutas lágrimas.

—A-A~uch~ — soltó con su boca llena de espasmo de temblores.

—Estarás bien...estarás bien — aseguro con la voz más temblorosa que el propio cuerpo de su jefe.

Un grito ensordecedor y agudo se escuchó a lado de ellos...era Octavia. Gritando y llorando corriendo a dirección hacia ellos.

—¡NO, NO, NO, NO! — lo impidió Blitzø, cargándola entre sus brazos y alejándola del cuerpo de su agonizante padre —¡No lo mires, no lo mires! — ordenaba el guardaespaldas dejando que la pequeña reposara su cara en su pecho para evitar que viera la desgarradora escena.

—¡PAPIII, PAIII! — gritaba a lagrima viva la pequeña de siete años, llamando a su progenitor como si de su propio sufrimiento físico se tratara.

Blitzø se la entregó a una Linda que estaba más que petrificada del shock, arrastrándolas a ambas adentro del hotel junto con la mayoría de los demás invitados que intentaban refugiarse.

—¡Escúchenme las dos! — demando un Blitzø alterado —¡Stolas estará bien pero no podré trabajar con ustedes en el camino! — el miedo era tan claro como el agua en sus ojos llenos de pánico, intentando calmarse a sí mismo como era posible —Quédense aquí y prometo que esto ya acabara — les aseguro a ambas, intentando esconder sus manos cubiertas por la sangre de Stolas. Corriendo otra vez por su jefe.

Otros dos guardias estaban intentando alentar al Goetia, en eso se les unió Blitzø, logrando apreciar como algo de vida en la mirada de Stolas volvía al percibirlo.

—¡Jefe por lo más sagrado que tenga manténgase despierto y no consuma sus fuerzas. Los paramédicos están por llegar! — se aseguró de ello, haciendo que Stolas asintiera al no querer hablar ahora, haciendo que la mano de uno de los guardias con quienes estaban siguiera haciendo presión en el sangrado interminable en el impacto del joven.

—O-Oc...ta-tavi~a? — pregunto por su hija entre un murmullo, algo erróneo al empezar a brotar de su boca la sangre que se le estaba acumulando.

—¡No, no, no! ¡CALLADO! — sentencio sacando otro pañuelo de su bolsillo de su saco para evitar que siguiera desangrándose por su boca ahora.

Otro disparo eminente se escuchó cerca de ellos, eso alarmo más a los chicos.

—¡No estamos seguros aquí! — dijo otro guardia.

Guarda-Corazones (Stolitzø) ~Stolas x Blitzø~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora