Continuación:
Luego de ese acontecimiento del cual no quería hablar, me dirigí a lo que al parecer era la cocina, dentro estaba una chica de test blanca y cabello marrón que era sujetado por un moño, con un traje típico de Maid de sirvienta, es la misma con la que mi entrenador había charlado apenas llego a esta casa; estaba tan concentrada cocinando que no se dio cuanta de mi presencia. Al darse la vuelta con un cucharon en su mano, soltó un grito irritantemente agudo para mi gusto, y me paso por la mente "¿por que?" Bueno, soy alguien con un traje fino, y muy muy galán...¿Por que ha de asustarse?
- Wou, tranquila - levante ligeramente mis brazos, mostrándome alguien de bajo amenaza - no te haré daño a no ser que seas un ladrón o algo así~- bromee casquivano. La chica abrió sus ojos por la impresión.
- L-lo siento - se disculpo con notoria pena en su cara - t-tu eres el nuevo guardaespaldas de la familia ¿No es cierto? - hablo ya un poco más relajada.
- El mismo - dije orgulloso - empecemos otra vez - aclare mi garganta - Hola soy Blitzø, la "o" es muda - me presente extendiendo mi mano a ella.
- Ho-Hola - aceptó mi saludo a juntar su mano con la mía - soy Linda, pero mayormente me llaman Lila.
- ¿Por que? - le cuestione.
- Porque...- agacho levemente su cara, al parecer apenada - porque no tengo nada de Linda - me contesto ya muy avergonzada. La delataban el rojo de sus mejillas.
No se los negare, las ganas de reír por aquella ironía me ganaban, solté una pequeño "pff" apretando mis labios para contener mi carcajada, ella lo noto y rapidamente giro su rostro que ahora si paresia un tomate; tape mi boca con brevedad, no era mi intención hacerla sentir mal, pero vamos, eso es lo que hago mejor.
- Lo siento, lo siento - me disculpe repetidamente - no quise apenarte, pero no le hagas caso a los bobos que te dicen eso - la intente consolar mientras retrocedía, quería seguir mirando el primer piso y tardare todo el día si seguía hablando con esta chica - es más hasta te queda - ok ahora solo hablaba de más para solo largarme sin ser grosero - porque no eres nada fea - estaba apunto de doblar la esquina - bien, seguiré viendo el lugar, nos hablamos después, adiós - me despedí rápido de la chica, espero no caerle mal, ya hay dos perras locas que me quieren ver de patitas a la calle como para que se sume una tercera, y vuelvo a recalcar que solo paso en mi primer día aquí.
Narradora:
La sirvienta que aún seguía en un ligero trance al escuchar las palabras "adorables" de Blitzø, se ruborizo a tal punto que no se sabia si el gran silbido que se escuchaba de fondo era por su calentura o por la olla de vapor que sonaba detrás de ella.
Narra Blitzø:
Al seguir con mi plan de inspeccionar el primer piso, me adentre a una sala elegante y grande, me llego de nuevo el temor de perderme si seguía caminando a la deriva sin saber por donde ir, me gustaría que alguien fuera mi guía de este lugar, al menos para la planta de abajo ¿Pero quien? Era obvio que la perra de Stella me mandaría al demonio si le pido ese favor, o peor, me gritaría "¡Despedido"! si se lo pido, por que..?...no lo se, simplemente lo haría y ya, esa chica de la cocina podría ser buena opción pero esta ocupada y el rarito de mi jefe ni loco se lo pido, su particular asentó y manera de hablar me pone muy incomodo, me pare en un conjunto de escaleras largas que llevaban al segundo piso, pero no me asomare a no ser que me lo pidan, así que solo me pose delante de ellas pensado que podría hacer para matar el tiempo o ver quien podría ayudarme en mi orientación de esta gran mansión y de improvisto una voz fina y aguda me saco de mis palabras de adentro.
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Guarda-Corazones (Stolitzø) ~Stolas x Blitzø~
أدب الهواة"Ser un guardaespaldas de tiempo completo no es nada fácil, y menos si uno de tus jefes quiere joderte y el otro cogerte" - Blitzø. Luego de múltiples traumas, traiciones, maltratos y...¡Quemaduras! Ese chico siempre seguía peleando por los demás y...