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Narra debora.

Karim se quedó viendo show y yo seguí a nene. Entre al camerino de Anthony y me senté a esperarlo mientras terminaba de cantar. Me quede observando todo el lugar y me puse a pensar que le iba a decir pero realmente no me dio mucho tiempo por que entro al camerino junto a todo su séquito.

Se quito la chamara roja que llevaba puesta y saco a todos del camerino pidiendo que nos dejaran solos.

Se me quedo viendo, se giro, tomo una botella con agua y se la tomo toda.

¿Para eso me quiere? ¿Para que lo esté contemplando?

–¿Vamos a hablar o para que me mandaste traer?– escupí con rabia.

Se Sentó frente a mi en el brazo del sillón y se me quedó viendo.

–Primero que nada, quiero disculparme por lo de hace rato. Me pase – seguía teniendo la botella vacía entre sus manos. Se giró y agarró el gafete que me quito, me lo quiso poner pero se lo arrebate.

–Está bien que estes furioso conmigo pero no tenias por que comportarte así.

–Dime la verdad... ¿Por que estás aquí? No quiero mentiras– me advirtió.

–Por que quería verte– respondí con seguridad.

–¿Querías verme a mi o querías averiguar si estaba poniéndote los cuernos?

–Ambas cosas– cruce los brazos.

–¿Por que tienes que hacer las cosas así? En vez de ser directa y hablar conmigo.

–Claro como atiendes mis llamadas y...–me interrumpió.

–¿Cuales llamadas? Desde que me fui no tengo una sola llamada tuya.

Me quede callada por que era cierto, solo le había enviado los correos y esperaba una respuesta sobre eso pero nunca la recibí.

–Te quejas de mi, vienes a supervisarme que esté haciendo lo correcto mientras tú como siempre te haces la víctima. La que falló fuiste tú debora, no yo. La que debe buscarme eres tú, la que debe redimirse eres TÚ– estaba molesto.

–Te envíe los correos, como mínimo esperaba una respuesta tuya...

–Ok hermosa, Preciosa, linda, corazón, princesa... ¿Que mierda quieres que te diga respecto a eso? Ok, tu relación con David es "Trabajo" pero por que no le pones un alto? Él que yo leyera todo eso solo me hizo enojar mas. Ese animal solo está esperando nuestra ruptura para estar contigo.

–¿Y le vas a dar el gusto?– respondí con la esperanza de que todo esto se solucionara.

–A como vamos, yo creo que si.

–Yo jamás te reclame nada cuando francelys te llamaba para pedirte ayuda o dinero. ¿O crees que no me daba cuenta?– Se puso pálido. –Y no fue una vez Anthony, fueron varias.

No me lo podía negar, por que era verdad.

–Es diferente. Ella necesitaba mi ayuda, David solo quiere meterse entre tus piernas.

–¿Y crees que ella no quiere lo mismo?– me enfurecí.

Se dio media vuelta y se tocó el puente de la nariz tratando de tranquilizarse.

–Yo si tengo que comprender que estas mujeres te busquen y tú no puedas mandarlas al diablo por que tienes un corazón de pollo que con cualquier estupidez te doblan y siempre vienen corriendo a ti como si fuera tu maldita responsabilidad pero yo Anthony...

–Tu nunca necesitas de mi, nunca. ¿Para eso está david no?

–Ay Anthony– me estaba haciendo perder la paciencia, no íbamos a llegar a ningún lado con esta discusión.

–¿Que?– se paró frente a mi con las manos en la cintura.

–¿Por que tienes que complicarlo todo? Si estas celoso y es todo pero...

–No estoy celoso por que se que me me amas a mi pero...

–¿Pero que entonces? O estás buscando agarrarte de esto por que estás cansado y aburrido de lo que construimos. Estas cansado de tener una familia, de estar conmigo, con tus hijos. Prefieres tener la libertad de hacer lo que se te de la gana sin dar explicaciones...– el maldito se quedo callado dándome la razón.

De la nada se empezó a reír, estuve a punto de quitarme un zapato y darle con el.

–¿De que te ríes?

–De que como siempre te deslindas de tus errores y buscas la forma de incriminarme para que el que termine siendo el malo sea yo.

–Ya admiti mis errores, ya te dije que si, que hice mal. ¿Que más quieres? ¿Que te ruegue que me perdones y vuelvas a mi lado? Somos adultos Anthony. ¿Que fue esa boberia de quitarme el gafete?

–Ya te dije que lo siento. Estaba molesto...

–Y lo sigues estando... Entiendo que te molesta que no te pida ayuda cuando tengo problemas pero es que no quiero ser un problema para ti.

–Ya basta Deb, estoy cansado– se tiro en el sillón y se tapo la cara con una toalla.

–Ok, escúchame...– le quite la toalla y lo obligue a que mi viera.– Yo también estoy cansada, pero te lo repito somos adultos. Te voy a proponer dos cosas. Olvidemos todo y volvamos a la normalidad o aquí termina todo, nos olvidamos el uno del otro y que cada quien haga su vida sin afectar a nuestros hijos.

Se quedó callado. Su respuesta no tendría ni siquiera que pensarla.

–El silencio también habla– me levante para irme y pensé que me iba a tomar de la mano e iba a reaccionar pero no hizo nada. Dejo que me fuera.

Al salir vi a karim y me abracé a él sin dejar de llorar. El maldito me mando al diablo. Nos fuimos al hotel y me sirvió un vaso con la intension de embriagarme.

Me sentía como una estupida. Quizá hice algunas cosas mal pero lo amaba y el lo sabía. Sabía que no hay otro hombre en este mundo que lo ame y lo adore como a él pero no le importo. No hizo el mínimo intento por detenerme.

"Primero que nada, quiero agradecerte los últimos años a tu lado, fueron hermosos. Hoy fue un mal día, no fue como yo lo esperaba y Aunque lo nuestro haya terminado espero podamos llevar una relación sana por nuestros hijos. No es necesario que vuelvas a NY, enviare tus cosas a casa de tu hermana o si quieres quedarte con la casa no tengo inconveniente, házmelo saber y la desocuparé enseguida. Gracias por regalarme lo más valioso que tengo, por ese motivo siempre serás importante en mi vida. Te deseo lo mejor en todos los aspectos. Se feliz y ten una buena vida."

Clandestino t3-t4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora