–No metas a mis hijos en esto... Debora Entiéndeme por favor. Se que me mintió pero no por eso merece el Infierno de estar en la cárcel.
–Esto no es por ti Anthony. La mujer me insultó, me golpeó, rayó mi carro, ¿que querías que me matará para que reacciones?
–Estas diciendo cosas absurdas–Se dió media vuelta.
–Ella te mintió, te vio la cara de estupido, me agredió y aún así estás de su parte?
–Ya hable con ella. Lo que pase entre ella y yo no te concierne. Tú eres punto y aparte. Sabes lo que significas para mi.
–Por lo que veo nada... ahora Dime si de todo lo que te he dicho estoy equivocada. Porque créeme tengo muchas cosas más que reclamarte.
–Si Deborah sí estás equivocada. Yo te amo y nunca has sido un capricho para mi. Si dejaste a Alaric fue tu decisión yo no te obligue a nada. Y a mi hijo no tienes porque meterlo en esto porque yo lo amo más que a nada en este mundo. Si estuvieras tú o no conmigo yo quería ser parte de su vida.
–¿A caso fui yo la que te busqué y provoque que hubiera algo entre nosotros? No, Fuiste tú, desde un principio fuiste tú, mi error fue que me enamoré de ti y te seguí el juego.
–Error o no acá estamos. Yo te superé y fuiste tu quien siguió obsesionada conmigo queriéndote meter en mi relación con Ania.
Me estaba clavando una daga en el corazón.
–¿Me superaste?– yo tenía claro que no era así.
Se tocó la cabeza con desesperación.
– Ya no quiero discutir. Quita la denuncia y deja a Ania en paz.
–¿Si no que?– lo enfrente.
–Voy a quitarte a los niños.
Me reí con lo absurdo de su comentario.
–Haz lo que se te venga en gana. Quítame la casa, quítame los niños...haz lo que se te dé la puta gana.– yo sabía que no lo haría, solo quiere presionarme.
Lo hice aun lado y salí de la casa. Subí a mi auto rayado para ir a la oficina. Estaba harta de todo. Quizá Venda la empresa y me mude a otra ciudad donde esté lejos pero que su padre pueda seguir viendo crecer a sus hijos por que podré hacer mil estupideces pero jamás haría nada por lastimar a los hijos.
Anthony se siente con la libertad de juzgarme cuando yo lo único que hecho ha sido amarlo. Ahora resulta que la toxica, la que está mal soy yo y él es una víctima de está desquiciada.
–Puta madre– le pegue al volante con rabia. Sentía un nudo en la garganta. Ya no sabía que sentía por Anthony... amor, odio, resentimiento...
Seguí manejando y llegue al edificio. Busqué mi bolso, tome mi teléfono y me baje del auto. Vi a David y a mi papá esperándome en la entrada.
Escuche el ruido de una motocicleta, me giré y vi como se acercaba a pocos metros de mi. Vi su cara y como sacaba un arma de su bolsillo. Me apunto y jalo el gatillo soltado 3 detonaciones.
–Debora– gritó David y lo vi correr hacia mi en cámara lenta y a mi papá detrás de él.
Me toque con la mano temblorosa y al despegarla la vi llena de sangre. Me empecé a sentir muy cansada, con mucha pesadez y caí de rodillas sobre el piso. David me sostuvo entre sus brazos, tenía sus manos llenas de sangre.
–una ambulancia–Grito. –Por favor no te duermas, Deb por favor– intentaba hacerle caso pero mis ojos querían cerrarse.
–A...– no podía articular una sola palabra.
–No hables, no hables, tranquila. Vas a estar bien Preciosa.
–Dile...
–Shtt Preciosa, no te esfuerces– notaba a David desesperado.
Busqué fuerzas de donde no tenía. Sentía que ahora si me iba a ir. Que ya no tendría otra oportunidad.
–Dile... que... cuide... a nuestros... hijos...– me costaba muchísimo trabajo hablar.
–Ay debora por favor– David estaba llorando mientras me sostenía entre sus brazos.
–Y dile... que... lo... amo– escuche las sirenas a lo lejos. David seguía llorando mientras acariciaba mi cara.
–Por favor Preciosa, aguanta– fue lo ultimo que escuche. La pesadez me gano y cerré los ojos.
Narra David.
Estaba esperando a debora junto a su papá en la entrada del edificio donde teníamos las oficinas. Ella me había comentado que había tenido una fuerte discusión con Anthony y quería hablar conmigo.
Cuando ella llegó vi que una motocicleta venía a toda velocidad se acercó a ella y le disparo.
Mis piernas se movieron solas y corrí hacia debora. Su blusa blanca estaba teñida de rojo, la vi caer de rodillas y la abracé para sostenerla. No entendía que estaba pasando. Le grite a su papá que llamara a una ambulancia.
¿Quien querría hacerle daño a Deb? Por que no fue un asalto, fue una agresión directa.
Ella intentaba hablar pero le pedí que no se esforzara. Aun estando así no deja de preocuparse y dejar de pensar por el pendejo de Anthony.
No puedo ni siquiera pensar que el tenga algo que ver con esto.
La ambulancia llegó cuando Deb se me quedó dormida en los brazos. No podía detener las lágrimas. Ella era mi amiga, mi mejor amiga y la amaba también.
Me hicieron a un lado, la subieron a la camilla y le pusieron oxígeno, gracias a Dios aun tenía pulso. Solo dejarían a una persona subir con ella a la ambulancia y esa persona fui yo. Su padre aunque había "cambiado" no tenía derecho de nada.
Me sentía tan angustiado de ver que Debora no reaccionaba. ¿Que iba a decirle a sus hijos?
¿Quien fue el hijo de puta que le hizo esto?