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Narra Anthony.

No entendía que mierda acababa de pasar. Cuando mi cerebro apenas estaba procesando el ultimatum de debora, "el silencio también habla" se levantó y se fue.  No me dejo ni siquiera pensar que era lo que quería, lo que sentía... esta loca en verdad esta loca y creo que ya llego a mi límite de tolerancia.

En vez de solucionar las cosas las enreda más.

Al llegar a mi hotel me llego un correo de Debora, donde me agradecía y me volvía a mandar a la mierda.

¿Que hice para estar pagando este karma con esta mujer?

Ya me acorde.

Sinceramente ya no tenía ganas de pelear, tenía muchos proyectos en puerta y quizá esto era lo mejor para ambos. Tomarnos un tiempo. Me canse de ser yo el que siempre tiene que luchar esta relación, de hacerme sentir el culpable de algo que yo no ocasione, aunque me mente me repetía constantemente que la buscara.

Estaba a punto de dormirme, cuando mi celular emitió un sonido. Son casi las 4 Am.

"Tengo a debora llorando al punto de un colapso emocional en mi sillón con hilos de oro, abrazada de una botella del vodka más corriente que encontró. Ven a buscarla, que si algo le pasa a mi sillón te lo voy a cobrar al doble"

Fruncí la frente al leer el mensaje. Apreté la foto para ver quien era por que no tenía el número registrado y era él amigo de debora.

Le pedí que me diera su dirección para mandar a nene por ella. Como le gusta exhibirse con ese amigo suyo que tiene.

–Serás muy mi jefe pero yo no voy. Es capas de tirarme por el edificio, es problema tuyo– me respondió cuando le pedí el favor que fuera a buscarla y tenía razón. Si sobria es complicada... Me levante de la cama y me puse un conjunto deportivo para ir a buscarla.

Subí a mi auto y puse la dirección de karim en el gps, no quedaba muy lejos.

Cuando llegue, no se si tenía miedo o que era, que no quería subir. No quería seguir peleando y sabía perfecto que su primera reacción al verme será corréeme, armar un escándalo y hacerse la difícil.

Subí y toque el timbre, enseguida me abrió karim. ¿Por que debora se rodea de hombres atractivos? Creo el menos agraciado soy yo.

Karim se hizo a un lado y me dejó pasar. Efectivamente Debora estaba sentada en el suelo, con los brazos en el sillón mientras lloraba y en ocasiones le tomaba a la botella. Odiaba verla así.

–Los dejó solos– karim me dio una palmada en la espalda y salió del departamento, cerrando la puerta detrás de él.

–Deb– me hinqué a su lado y la toque con precaución. Es capas de estamparme la botella en la cabeza.

–Ay no, ya estoy alucinando– se tapo la cara con las dos manos y no pude evitar reírme.–No está aquí Debora, no está aquí.

–Si estás alucinando– Me reí y le quite las manos de la cara.

–¿Eres real o eres producto de mi imaginación?– tenía sus ojos hinchados y el maquillaje corrido.

Le metí un pellizquito y pegó un grito.– ¿Te pareció real?– me reí.

–Anthony– frunció la frente molesta y se sobo el brazo. Mi hija era igualita a su mamá.

–Perdóname, no debí dejarte ir así– me senté en el suelo, la jale y la envolví en mis brazos.

Ella se aferró a mi chamarra y comenzó a llorar de nuevo. Me partía el corazón verla así.

–Yo te amo, y... la cague pero te amo. Eres mi vida Anthony. Eres todo para mi...

–Lo sé– le di un beso en la frente y seguí abrazándola.

A los pocos minutos se quedó profundamente dormida en mis brazos. ¿Se estará quedando aquí? No puedo llevarla a casa así y que la vean los niños en este estado. ¿Que hago con ella?

La cargue y la acosté en el sillón.

–Ah no no, llévate a tu alcohólica– Escuche a Karim detrás de mi justamente con una cerveza en la mano.

–No es alcoholica. Y de hecho... solo se pone así cuando sale contigo– le di mi peor mirada.

–Corrección. Se pone así cuando le rompes el corazón y yo estoy ahí para consolarla.

Quise hablar en mi defensa pero me mando a callar.– Ya se todaaaaa la historia, a mi no me vas a convencer con tu carita bonita, infeliz.

–Solo sabes una cara de la historia– Rodé los ojos y me acerqué a debora para cargarla. – ¿Por lo menos ábreme la puerta no? – este amiguito de Debora me caía mal, seguramente era él quien la aconsejaba para sus locuras.

Me abrió la puerta y salí frustrado con la Bella durmiente entre mis brazos.

–Adiós "Romeo"– escuche su sarcasmo hasta NY. Me dio una palmada en el hombro y cerró la puerta.

No sabía que hacer con Debora, así que reserve una habitación de hotel y lleve ahí.  La acosté en la cama y noté que no traía zapatos. No se si no traía o si los tiro en el camino. Soy tan bobo que deje su cosas en donde el amigo, solo me la traje a ella.

La ropa que traía se veía demasiado ajustada, incluso la notaba incómoda. No es como que lo haya visto antes desnuda pero se supone que terminamos... no sería correcto.

"Es tu mujer Anthony" me retumbaba una y otra vez en la cabeza. "Es tuya".

Sacudí mis ideas, la tape con la cobija y me di media vuelta, dejándola sola para que descanse. "Problema suyo si duerme incomoda"

Estaba apunto de quedarme dormido en el sillón cuando escuché algunos balbuceos. Fruncí la frente y me enderecé para detectar de dónde venía ese ruido.

"Si mi amor...– gemido– Oh thony, si bebé así.– gemido– Si muérdeme así papi"

La muy infeliz estaba teniendo sueños húmedos conmigo como protagonista. Mi mente dejó de funcionar y me empezó a funcionar otra cosa. 

Clandestino t3-t4Donde viven las historias. Descúbrelo ahora