Angela
Ha pasado una semana desde que estamos en esta cabaña y no mentiré la verdad que me siento genial, genial con el lugar y Alex, son maravillosos. Él se comporta como si yo fuera lo más importante que tiene, es cariñoso, atento, detallista y ni hablar del sexo.
Parece ser el hombre perfecto si no fuera tan posesivo, solo le faltaría orinarme arriba para marcar territorio y listo. Estos días hemos pasado haciendo cosas de parejas y mentiría al decir que no me asusta un poco lo dependiente que me he vuelto de él. Me gusta y al mismo tiempo me aterra, nunca me había pasado que un hombre me pudiera controlar con solo tocarme y eso era lo que el hacia con frecuencia, un ejemplo fue cuando le dije hace tres días que quería ir hablar con mi hermano, me tuvo toda la tarde en la habitación haciéndome el amor hasta que me olvide de la idea, estoy jodida. Y lo peor es que sé que manipula y no me molesta que lo haga al contrario lo disfruto.
- ¿Que te gustaría hacer hoy? - Mi chico tatuado aparece a mis espaldas con el teléfono en mano- ¿Quieres salir a explorar el lago o prefieres que nos quedemos aquí? - Comienza a besarme el cuello y aquí está el manipulador. Se perfectamente que quiere quedarse si no fuera así, solo me diría que vamos algún lugar y ya-
-Una oferta tentadora la de quedarnos aquí, la tomo- Además quiero información-
-Genial, por donde comenzamos- Sus besos se profundizan y su agarre en las caderas me presionan más a el -
-Por conocernos mejor - Él se tensa- Quiero saber de ti y algunas cosas más- El detiene su intento de llevarme a la cama-
-Bueno vamos a la sala- Se separa de mí y estira su mano para que la tome-
Dentro de sala me siento en un sillón, mientras Alex se dirigí al minibar y saca dos copas de cristal una botella de vino, parece que la conversación va a ser interesante.
- ¿No crees que es muy temprano para tomar? - Él me sonríe sentándose a mi lado-
-La verdad me asusta un poco lo que quieres saber de mí y el vino es bueno para relajarse-Será bueno para el por qué yo no tengo buena tolerancia al alcohol, solo asentí- Bueno ataca- Me dice mientras nos sirve vino-
-Cuéntame de tus padres- Agregue, fue notable su mueca de desagrado-
-Mi madre era una mujer de la vida, se fue con hombre cuando tenía ocho años y a mi padre nunca lo conocí- Un gusto amargo se instaló en mi garganta no por la información sino por la forma tan casual que lo dijo. Cambie de tema y me tome todo el contenido de la copa de un tirón -
- ¿Que paso contigo después de eso? - Me sirvió otra copa de vino antes de contestar-
-Estuve en manos del estado hasta mis dieciséis, luego me escapé - Parecía orgulloso de eso-
- ¿Como llegaste a tener todo esto? - Digo señalando la cabaña y parecía pensar lo que iba a decir-
-Conocí a un hombre con mucho dinero que me dio trabajo y me enseño todo lo que se- Por alguna razón sabía que no me contaría nada más sobre el tema-
- ¿En qué trabajas? - Ahora si tomo todo el contenido de su copa y me miro de reojo. Se sirvió y de paso volvió a llenar mi copa que ya estaba vacía-
-Tengo negocios variados pero los más rentables son de bienes raíces- Me tomé toda la copa y me volví a servir dejando la botella vacía, necesitaba acallar la voz en mi cabeza que me gritaba ¡¡¡ mentira!!! Él se levanta y va por otra botella-
- ¿Como conociste a Marcus? - Pálido era poco como quedo-
-Bueno- Se paso la mano por el cabello - Mientras yo terminaba mi tercer o tal vez cuarta copa, ya no lo sabía, pero me encantaba este vino -
-Cuando me escape del orfanato el me ayudo a que no me mataran en la calle- Me relato como el no sabía nada de lo duro que podía ser vivir en la calle, mientras yo sola me terminaba este esquicito vino y escuchaba atentamente buscando algo que me digiera que mentía. Cuando termino el relato la borracha que tenía dentro de mi grataba que le preguntara lo que tenía en la punta de la lengua -
- ¿Algo más que quieras saber? - Si grito mi cerebro hebreo-
- ¿Quién asesino a Marcus? -Lo dije su cara quedo completamente seria-
-Ricardo, ¿Para qué quieres saber eso? - Ahora era yo quien estaba molesta o tal vez era el alcohol en mi sistema -
- ¡Mentira! - Sus ojos se abrieron- Dime la verdad yo sé que Ricardo no fue -
- ¿Como estas tan segura de eso? - Me levanté un poco tambaleando y yo misma fui por una botella al minibar bajo su atenta mirada-
- ¿Me creen estúpida? - Me senté nuevamente y me serví de esa botella que no era vino, pero al probarlo me gusto era dulce y un poco seco -
-Eso es Martini - Señalo la botella - La mezcla no te hará nada bien-
-Cuando Tamara despertó en el hospital me dijo lo mismo- Sonreí amargamente- Pero lo que ustedes no sabían es que en el auto en el que escapamos, Ricardo venia en el maletero con un tiro en la cabeza -Su rostro se oscureció - Solo Mica y yo lo sabíamos-
- ¿Por qué no lo dijeron? - Interroga
- ¿Por qué mintieron ustedes? - contrataco- ¿Por qué culparon a Ricardo cuando el solo quería ayudarnos? -
- ¿Y tú porque mierda defiendes a ese bastardo? - El me grito -
-Yo pregunte primero ¿Por qué mintieron? - El aprieta los dientes y yo me tomo otro trago -
-No sabemos quién le disparo, por eso culpamos a su mano derecha era lo más apropiado. Al final él era uno de ellos también, uno de los que te secuestraron ¿Recuerdas? - Yo suelto una carcajada amarga mientras paso mi mano por mi rostro con frustración-
-No te atrevas a comparar a Ricardo con esos bastardos, no hables de lo que no sabes- Le digo apuntándolo con mi dedo- Mi furia era notable, por dentro mi parte cuerda pedía que me callara, que no revelara nada de más-
- ¿Te lo tiraste? ¿Te gusto que lo defiendes? - No se en qué momento mi mano impacto en su cara-
-Escúchame imbécil, antes de hablarme así piénsatelo dos veces - Me aleje de el - ¿Dime donde estabas tu cuando los hermanos Ortegas me violaban salvajemente? ¿Dime? - Su respiración se agitaba con cada una de mis palabras- El único que me ayudo y me protegió en ese infierno fue el - Mi rostro estaba lleno de lágrimas -Así que antes de hablar mal de él, te lavas bien la boca- Concluí y me dirigí a la habitación encerrándome en ella-
Hola chicas le dejo mi Instagram:nani_escritora03
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CRUEL INOCENCIA (Libro 2)
RomanceAlex Silva a tomado el control de la mafia de chicago después de la muerte fingida de su amigo casi hermano Marcus, siempre se destacó por ser frio y controlador hasta el día que sus ojos se encontraron con la belleza de un ángel...