CAPITULO 13

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Por Angela

Un año y medio atrás

Estoy en la habitación que me asignaron hace tres días, pensé que no me quedaban más lágrimas, pero igualmente caen por mis mejillas sin mi permiso.

La puerta se abre y puedo ver a Cristian entrar en la habitación con una sonrisa en el rostro, ¿Dónde quedo el chico tierno y amable que conocí en la universidad? Mi cuerpo comienza a temblar, últimamente cada vez que venía estaba drogado o borracho y me golpeaba.

-Hola cariño- Si, definitivamente esta drogado- ¿Me extrañaste? - Se acerca a mi peligrosamente y yo solo puedo hacerme un ovillo tratando de que no me lastime otra vez - ¿Por qué no contestas? - Me sujeta del pelo tan bruscamente que doy un grito -

-Por favor no me lastimes - Me lanza a la cama y se coloca arriba mío sin cuidado de no aplastarme-

-Amor yo no quiero lastimarte, pero tú no cooperas-Pasa sus manos por mis muslos tratando de llegar a mi intimidad y la desesperación se apodera de mí, comienzo a golpearlo. El sujeta mis manos y las sube sobre mi cabeza, mientras se refriega contra mí, el asco me invade y las lágrimas no dejan de salir, pero el gime al frotar su pene con mi intimidad. Comienza a lamber y morder mi cuello y en un acto de desesperación yo muerdo su hombro con todas mis fuerzas, el me suelta y me propina un puñetazo en la cara, los insultos no tarden en llegar.

-Eres una puta como todas las demás- Me grita y me sujeta del cabello arrastrándome hasta el piso, me propina una patada y sale de la habitación cerrando con llave – Eres igual a ella-

Me incorporo después de varios minutos y me dirijo al baño, mi cuerpo tiembla. Abro la regadera y me meto bajo la lluvia artificial, refregó con furia donde me beso tratando de borrar su toque de mi cuerpo. Escucho la puerta nuevamente y el terror se apodera de mí. Pero aún más cuando Gabriel entra al baño con una sonrisa sínica en el rostro y sus ojos están rojos.

-Oh, cariño te has portado muy mal - Bastardo hijo de puta, me acóralo contra la pared, estoy desnuda e indefensa ante el - Sales o te saco tú decides- Con las manos tapándome los senos salgo e intento tomar una toalla, pero Gabriel me la arranca de las manos lanzándola al piso mojado - Te vez mejor así camina-

En la habitación estaba Cristian formando unas líneas de cocaína en una de las mesas de luz, me detuve de inmediato y Gabriel me dio una palmada en el trasero para que avanzara, decir que estoy aterrada era minimizar lo que sentía.

-Mira lo que te traje hermano - Cristian levanta la vista y se relame los labios - Sácate la remera tu chica te va a curar la mordida- Me da vuelta sujetándome del cuello - ¿Verdad querida? – Asiento, mientras las lágrimas caen por mi rostro -

- ¿Puedo vestirme por favor? - Solo sacude la cabeza en negativa y yo cierro los ojos con impotencia-

Me extiende el botiquín y le señala a Cristian la cama para que se siente, mientras él va a aspirar de la coca que quedo en la mesa de luz. Comienzo para desinfectarla y me tenso cuando siento las manos de Cristian apretando uno de mis senos, las lágrimas no se hacen esperar, pero termino de curarlo y coloco una gaza sobre la mordida. Cuando termino veo a Gabriel sentado en el sillón observándome, trato de alejarme de Cristian que está lambiendo mi abdomen, pero no me lo permite y lo empujo.

- Chica mala - Gabriel me dice mientras me sujeta de la cintura, grito y pataleo, pero no logro que me libere- Cristian dame las sogas- Me olvido de respirar. El me lanza a la cama y me sujeta las manos con la cuerda, mientras Cristian toma el otro extremo de esta y lo ata en el respaldo de la cama. Grito y me sacudo como un animal herido hasta que me amordazan, los temblores en mis cuerpos son notorios.

Cristian se saca la ropa y se acuesta en la cama arrastrándome arriba de él dejándome sentada en su erección. Me penetra con brusquedad y coloca sus manos en mi trasero para que me mueva, pero yo no lo hago.

-Ayúdame hermano - Gabriel que estaba sentado en el sillón se levanta y comienza a desvestirse, el pánico se apodera de mí y lucho con más fuerzas, siento que me sujetan de cabello desde atrás y niego con la cabeza pidiendo piedad –

-Por favor no- Mi voz tiembla-

-Obedece Angela- Me susurra Gabriel, pero yo no puedo y menos cuando siento el pene de este entre mis nalgas - Te va a gustar - Dice cuando me penetra por el trasero, él se mueve con salvajismo lo que hace que yo me mueva sobre Cristian que gime de placer, Gabriel disfruta tanto como su hermano y yo siento un líquido amargo que sube por mi garganta - ¿Qué se siente tener dos hermanos Ortega dentro de ti? - ASCO diría si pudiera -

Después de dos largas horas terminaron conmigo dejándome atada, desnuda y amordazada. No tenía fuerzas para moverme y el dolor en mis partes íntimas dolían tanto que como medica sabía que tenía desgarros anal y vaginal. Deseaba con todo mi corazón que alguien me quitara la vida.

La puerta se volvió abrir, pero ni siquiera abrí los ojos solo quería morirme de una maldita vez.

-Hijos de putas- Escuché susurrar, no eran ellos y abrí los ojos muy lentamente. Ricardo estaba mirándome con tanta lastima y odio a la vez que no sabía que pensar. Se acerco a mi rápidamente y yo cerré los ojos esperando otra violación o tal vez la muerte. Quito la mordaza de mi boca y lo único que pude hacer fue rogar-

-No me hagas daño por favor- Me miro con tanta tristeza que me dio ganas de llorar otra vez-

-Yo no te hare daño Angela, te voy a sacar de aquí lo juro a ti y a las otras chicas-me soltó las manos y me llevo hasta el baño. Sin ninguna mala intención me baño y curo las heridas de mi cuerpo. Cuando termino me llevo a la cama y me envolvió entre sabanas y cobijas.

Y luego las imágenes de Ricardo con un tiro en la frente y grito con tanta angustia que mi garganta duele-

PRESENTE

Por Alex

Me despierto por los fuertes espasmos de mi ángel, su rostro esta mojado por las lágrimas. Es otra pesadilla de las que suele tener y muchas veces fui testigo por las cámaras de su apartamento, pero ahora yo estoy para consolarla.

-¡¡RICARDO!!- Grita en desesperación y se levanta de golpe - 

CRUEL INOCENCIA (Libro 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora