Eduardo:
-Padre, no creéis que es un poco apresurado el matrimonio de Sebastián, apenas tiene 18 años, ¿no sabe lo que quiere? Es un crío.
-Tengo miedo que tu hermano opte por el celibato o se dedique demasido a sus libros, por eso mismo tomo esta decisión por el. Y si consigo la bendición del virrey, entonces la unión sera perfecta.
Ensoño el hombre de ojos vermellon esbozando algo similar a una sonrisa, Eduardo no debería estar interesado en ese asunto, pero dentro de el sentía que debía hacer algo o por lo menos intentarlo.
-¿Y si el virrey aún requiere de Sebastián por años aún?
-Una buena mujer sabra esperar a su marido y al final de cuentas mi palabra es la que manda en esta familia, algún día lo entenderas Eduardo.
-¡Y como habéis conocido a quien sera la nueva mujer de mi hermano?
-Son una familia española que llego el mes pasado y se asentaron al este de la ciudad, su majestad les dio las tierras de las montañas, para mi eso es suficiente. Los fui a ver la semana pasada y me agradaron.
El rubio quiso soltar un improperio o reírse, no sabía como reaccionar ante tales revelaciones. Aunque por otro lado su padre era un hombre imprevedible y de carácter volátil.
-Me gustaría conocer a esta familia.
Dijo Eduardo con un dejo de desconfianza e ironía.
-Por supuesto que los conocerás, he ordenado que matarán el más gordo de los lechones e informe a tu esposa que prepara sus mejores vestes para dar una buena impresión.
Mas te vale comportarte y mostrar tu virtud para cuando lleguen nuestros invitados.
Le dijo su padre encaminandose hacía la salida. Eduardo suspiro amargado, ya tenía recelo y algo de odio a su progenitor por atarlo a una mujer que veía como menos que una amiga.
Mas ahora Rubén mostraba su irracionalidad y prepotencia al tomar de la nada la idea de casar a su hermano con la primera joven que encontraba.
Porque ahora se daba cuenta de lo mal que estaba su padre, el no tenia prolema con sus ideales. Eduardo se seguía sintiendo orgulloso de su linaje y de su puesto en la pirámide castal, pero ahora albergaba disyuntivas con la manera tan posesiva con la que su padre los mandaba.
Ellos eran su familia, no sus pertenencias.
...
-¡No puedo creer que nuestro evento se vea opacado tan pronto!
Lamento Isabel colocándose unos costosos pendientes y revisando que las claras de huevo que coloco en su cabello le hayan dado el efecto que buscaba.
-Yo tampoco me lo esperaba.
Afirmo su esposo colocando la casaca de soldado y suspirando cansado, le extraño que su mujer guardara silencio. Noto que Isabel lo estaba observando de arriba a abajo.
-Si te mostraras asi de elegante conmigo, podríamos llevarnos mejor-le sonrió la castaña esperando que el le ofreciera su brazo.
El rubio extendió su codo y ella se aferro a el bajando ambos a la sala, la familia García no tardaría en llegar y su padre enloqueceria si demoraban.
Un enorme lechon adornaba el centro de la mesa, una copa de frutas y los vinos más preciados y caros de su padre yacían listos para ser vertidos en las copas de plata que habían pertenecido a los abuelos.
Una esclava entro informando que los invitados habían arrivado, Rubén dio unos pasos e hizo señas a Helena que lo siguiera.
Pasaron unos segundos y entraron una família de cinco miembros conformados por los padres y tres hijos.
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CASTAS (NOVELA HISTÓRICA)
Historical Fiction¿Como sobrevivir en una sociedad colonial mezquina y egoísta? ¿Que hacer cuándo eres parte del último peldaño en la jerarquía colonial? ¿Dónde esconderte cuando te juzgan por algo que los nobles tachan de errado? Achik deberá aprender a vivir en una...