29- Eres mío, acostúmbrate a la idea

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Danisa se paró frente a la puerta de la habitación de Bruno y Mario y respiró profundo. Llevaba allí 5 minutos, sin animarse a golpear.

Necesitaba hablar con Bruno, entender lo que su corazón estaba sintiendo y sólo él la ayudaría, sólo él porque el sentimiento se estaba volviendo recíproco.

3 golpes secos en el roble, y Mario salió a recibirla.

― Jefa, ¿qué haces aquí?

― Necesito hablar con Bruno.

― Se está duchando...

Danisa tragó saliva, nerviosa y avergonzada, con el temor de que sus pensamientos estuvieran en todo su rostro y, al parecer lo estaban. Lo supo cuando Mario hizo una mueca divertida.

― ¿Te quieres duchar con él?

"Sí, sí quiero".

Ese fue el pensamiento que gobernó su mente, aunque, obviamente no le diría a este idiota.

― No, sólo necesito hablar con él a solas...

Era quizás la última oportunidad en la que estaría sola con ese hombre.

― Bien, si quieres puedes esperarlo...

― Perfecto, necesito que te vayas.

Mario frunció el ceño.

― ¿A dónde?

― Quédate en mi suite hasta que yo lo diga...

― Pero...

― Mario — interrumpió —. Si quieres que les pague más vale que me hagas caso.

Mario asintió y comenzó a reír divertido.

― Está bien, mujer explotadora.

Y sin más palabras, el muchacho salió del cuarto, rumbo a la suite de Danisa.

La puerta se cerró detrás de ella, y la mujer recorrió con su mirada el cuarto. Era la mitad del tamaño de su suite. Se sentó en un sofá al lado de la cama, escuchando el agua que caía.

Se frotó las manos entre sí, y luego, se limpió las gotitas de sudor de la frente.

"¿Qué carajo estás haciendo?"

No tenía la respuesta, pero, en ningún momento pensó que su acción era incorrecta. Se puso de pie y caminó hacia el baño, el sonido del lugar agitó su corazón.

Dio pasos al interior del lugar, el vapor de agua cubría cada espacio, y, frente a ella, se encontró a Bruno, quien se duchaba con la puerta de la mampara abierta.

El agua se deslizaba en cada porción de piel blanquecina, en sus músculos bien formados, en ese culo perfecto, uno que Danisa jamás había mirado.

TEMPESTAD - S.B.O Libro 10 (Romance gay +18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora