Capítulo 29.-«Meet Me in the Hallway» Harry Styles.

105 8 11
                                    

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Puse el seguro a la puerta, apagué las luces y me senté contra la pared de azulejos de la ducha

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Puse el seguro a la puerta, apagué las luces y me senté contra la pared de azulejos de la ducha. Todo olía demasiado a limpio, y a... hospital, a alcohol, desinfectante, y dolor. Intenté controlar mi respiración mientras estaba a oscuras en aquel baño e intenté escuchar lo máximo posible de lo que fuese que fueran a hablar.

Ni siquiera podía explicarme a mí misma por qué me escondía de Owen, creía que era valiente, y que lo odiaba y querría gritarle cuánto lo hacía, pero mi parte cobarde ganaba, y no quería confrontarlo, deseaba poder borrar cada rastro de memoria o pasado que nos involucrara juntos, para no enfrentarlo.

—Te he dicho miles de veces que no quiero verte— soltó Demian con un tono serio y duro.

—Y yo te he dicho miles de veces que no intentes matarte— atacó Owen. Temblé un poco con la idea de que supiera que estaba aquí, me daba miedo, porque Demian no estaba en la mejor condición en este momento como para defenderme,  y yo nunca habría podido ganar en una pelea física contra Owen—¿Quién estaba aquí? ¿Quién llamó y quién te trajo?

—Brianna—respondió Demian.

—Curioso, Brianna está allá afuera queriendo verte.

—Claro, tiene que fingir ante ti— dijo Demian, Owen no respondió.

—Ya controlé la situación, de todas maneras—dijo después de un rato—Creo que el mundo ya tiene suficiente de tus pequeñas sobredosis mensuales, además, no aguanto los llantos de Giselle cuando le digo que, de nuevo, estás aquí.

¿Qué carajo? ¿Por qué finge que sigo con él? ¿Por qué le habla de mí a Demian? ¿Por qué le dice eso?

—Mándale mis saludos— dijo Demian con sarcasmo.

—Sabes perfectamente que no está conmigo— soltó Owen, enfadado de que Demian no cayese en su pequeña trampa—No te hagas el desentendido, ¿Tú sabes en dónde está?

—¿Por qué iba a saberlo yo?—cuestionó Demian—Me odia, y lo que siento por ella quizá no llega al odio pero un poco al rencor sí.

—Nunca lo superarás, ¿Verdad?

ESTÁBAMOS CONDENADOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora