Viví muy bien por meses (Y años, años, años), "Infinitely Cursed" salió al mundo. Los vídeos musicales también, todos dirigidos por mujeres, varios por Brianna Hammer. Vídeos icónicos de mí sobre un trono con las joyas que Owen me dio, o aquel en donde me quemaban en la hoguera. Amé grabarlos, amé trabajar con Brianna, amé todo. Jamás amé tanto vivir como aquella época. Jamás amé tanto mi carrera como aquellos años.
Era increíble. Fue increíble. No hubo día en el que no viese a Demian. No hubo día en el que no le dijese "Te amo infinitamente". No hubo día en el que no sintiera amor en mi corazón.
Dem cumplió 30 años, le regalé muchísimas cosas además de varias canciones que le había escrito antes, sustraídas de mi cuaderno recuperado del robo de Owen. Planeé una fiesta enorme en mi casa en donde todo era rojo y rosa, pues también era San Valentín, les pedí a todos que se vistieran con esos dos colores, y nos la pasamos de maravilla, todo el mundo estuvo en la fiesta, y hablaron de ella por semanas. Despertamos bañados en champagne, y sin casi recuerdos de la noche anterior de tanto alcohol.
No fuimos a ninguna premiación o alfombra roja juntos ni por separado, pues no estábamos nominados porque no habíamos sacado álbumes y "Infinitely Cursed" era demasiado reciente como para recibir nominaciones aún.
El mundo adoró mi álbum, era como si nunca les hubiese mentido ni fallado. El público era voluble, un día me odiaron, al otro me llamaban artista y creadora de una obra maestra. Era, en definitiva, mi mejor álbum hasta el momento. La gente no podía creer lo profundo y real que era, todos lloraron, todos amaron junto a mí. Nunca me sentí tan unida con mis fans. Ni tan querida y real. De carne y hueso.
En la gira todo mejoró aún más. Demian me iba a ver siempre al inicio, después de vez en cuando, porque él estaba grabando otro álbum, lo que significaba que pasaríamos un rato separados por nuestras agendas. Pero no me asustaba. Terminaba de cantar y bailar y en el backstage corría de nuevo a él, con los brazos abiertos, llena de sudor y con el cabello húmedo, pegándose a mi cara, totalmente roja, y le preguntaba:
—¿Qué te pareció? ¿Te gustó?—él me abrazaba con fuerza y decía:
—Nadie nunca había hecho una una presentación mejor que la tuya. Ni un álbum mejor. Eres la mejor cantante que ha nacido y existido, eres brillante y una absoluta genio, lo digo en serio, no puedo creer que hayas convertido todo ese dolor en esta obra maestra, Gigi, sólo los genios como tú podrían. Dame tu autógrafo, soy tu fan número uno.
ESTÁS LEYENDO
ESTÁBAMOS CONDENADOS
RomanceDespués de años de silencio y de esconderse del ojo público, la estrella pop Gigi Wilde decide salir a la luz a contar su verdad respecto a su fama y las relaciones que marcaron su vida, principalmente su relación con el hombre más famoso del mundo;...