El chico de mis sueños 🌕 (Stiles Stilinski y tú)

Capítulo 55: Los jinetes de la tormenta. Parte 3

Parte 3/4

Narrador omnisciente

Todo el mundo se le desmoronó a Stiles en tan pocos segundos. Skyler no despertaba, estaba completamente inmóvil en el piso. Ninguno sabía que le había pasado, solo se cayó, sin previo aviso.

Por suerte para todos, Abigail estaba en el pueblo aún después de que la llamaran.

Scott cargó a Skyler hasta el Jeep en sus brazos y la manada fue hasta la veterinaria.

Cuando llegaron, Abigail ya estaba ahí y el chico, dejó a Skyler con cuidado sobre una de las camillas de metal.

Hubo un silencio de parte de todos. Lydia lo rompió intentando hacer la pregunta que todos tenían miedo de preguntar.

-¿Está...

-No está muerta- la interrupió Abigail y todos dieron un suspiro- Aunque lo que le pasa no es mejor- aclaró- Está en un sueño eterno. Su corazón late y respira, pero... no regresará.

-¿A qué te refieres con "no regresará"?- Stiles sabía la respuesta a su pregunta, pero no, no podía ser así, no lo creía- ¿Por qué le pasó esto?

-Lo que hizo en el búnker, fue demasiado poder, su cuerpo no lo resistió- contestó.

-¿Qué hizo?

-Intentó recordarte con una cosa extraña que hacen los soñadores- le respondió Malia.

-Osea... ¿qué esto... es mi culpa?- el chico cada vez se sentía peor. Le costaba respirar, estaba más insistente que de costumbre, se movía nervioso por la habitación y no podía sacar la idea de que su novia no volvería.

-No- aseguró Abigail- Es culpa de los jinetes y... ella quiso hacerlo- agarró el reloj que tenía colgado en el cuello aún y lo abrió- Que raro. Las manecillas quieren girar, pero no lo hacen.

-¿Por qué eso es raro?- preguntó Scott.

-Porque ni siquiera debería estar funcionando- respondió. La soñadora estaba desconcertada, jamás había visto algo asi- Está luchando... Está luchando por despertar- razonó.

-Eso es bueno, ¿no?- pensó Stiles y ella negó con la cabeza.

-Mientras más luche, más poder consumirá. Aunque, no es como que haya algo que se pueda hacer.

Stiles sintió que el mundo paró alrededor de él, al igual que su corazón.

-¿No hay nada que puedas hacer para despertarla?- el silencio fue su repuesta- No. Tiene que haber algo, siempre hay algo- insistió.

Estaba desesperado. No podía haberla perdido, no de esa manera tan horrible, no por parte culpa de él, según creía. Parecía que en el momento que mejor estaban en su relación, las cosas se ponían feas, algo pasaba y todo se rompía.

Pensó en el Nogitsune, en cuando metió la pata al no decirle que estaba en una Deadpool, cuando tuvo que irse a Inglaterra y cuando él fue borrado del mundo. Y sin agregar, que se iría a la universidad en Inglaterra también, claro, si resolvían esto.

Aunque el chico estaba al borde del llanto, notó, que Abigail miraba atentamente la muñeca de la chica.

-Splendora...- musitó ella.

-¿Qué?- preguntó Stiles.

Abigail apartó la vista y pensó. Cuando se dió cuenta, su cara mostró demasiada sorpresa.

-¡Splendora Norman!- exclamó- Skyler es descendiente de la soñadora más poderosa que haya existido. Splendora está en la historia de los soñadores, es, literalmente, una leyenda.

-¿Cómo sabes?- preguntó Malia.

-La pulcera- respondió levantando levemente el brazo de la chica y mostrando una pulcera con un dije de luna llena- Es de ella. Nadie la tiene- aclaró- Esto explica tanto- siguió entendiendo- Con razón Sky no solo predice el futuro, sino que también ve más cosas. Por eso soñó contigo cuando no estabas, Stiles. Es más poderosa de lo que imagina y teniendo la reliquia de Splendora, es imparable.

-¿Esto significa que si hay una manera de salvarla?- cuestionó Scott esperanzado.

Todos miraron a Abigail mientras pensaba.

-Tal vez...- contestó algo insegura- Hay que contactar a Splendora. Si alguien sabe, es ella.

-¿No está muerta ya?- razonó Lydia- Pasaron cientos de años.

-Suerte que tenemos a alguien que justamente lo que hace es comunicarse con los muertos- le respondió ella y todos comprendieron que se refería a la pelirroja- Te voy a necesitar a ti y a Scott.

🌕🌕🌕

Abigail tenía un cuaderno con algunos "conjuros", no es el nombre exactamente correcto, los soñadores no son hechiceros. Pero creo que es la forma políticamente correcta para explicarlo con claridad. Son frases en latín que ayudan al hipnotismo, y con ayuda de otras criaturas, quizás se pueda hacer más.

Stiles hizo un círculo de polvo de cerbal en el piso y Abigail repasaba el "conjuro".

Todo estaba casi listo, pero Lydia empezó a escuchar algo.

-La escucho- dijo y todos pararon lo que hacían- Escucho a Skyler llorar.

Skyler no estaba exactamente muerta como explicó Abigail, pero, quizás, lo suficiente para comunicarse con una banshee.

-¿Por qué llora?- preguntó Stiles.

-No lo sé.

Skyler entró a la habitación, claramente, la única que la veía era Lydia. La pelirroja abrió la boca completamente asustada y al borde del llanto.

-Está cubierta de sangre- le dijo a los demás.

-Lydia...- susurró sollozando- Me asesiné...

-¿Qué? Sky, no estás muerta. Estás...

-¡No!- gritó Abigail- No puedes decirle, podrías generar algo espantoso en su mente.

-No te asesinaste- siguió Lydia.

-Me ví empujándome a un acantilado- aseguró la chica aún llorando.

-¿Dónde estás ahora?- insistió.

-Donde todos quedan cuando mueren y no saben a donde ir.

Un parpadeo después, la chica desapareció.

-Limbo.

🌕🌕🌕

-*Splendora, nobis opus est tibi, posteri tui ceciderunt, opera tua nobis opus est. Egredere de monumento quod te claudit, obliviscere lapidem, quem portat nomen tuum. Vocamus te Splendora Warren Norman.

Abigail, Lydia y Scott estaban fuera del círculo de cerbal en el piso diciendo esas palabras por tercera vez.

Algo hizo caer a todos los presentes al piso. En cuanto se incorporaron, notaron a alguien más en la habitación y el círculo ya deshecho.

-Espero que sea importante, estaba teniendo un lindo sueño- dijo una chica de pelo castaño, ojos celestes con un vestido rojo y un acento inglés mucho más cerrado que el de Sky.

-¿Splendora?- preguntó Abigail y ella asintió con obviedad.

Le prestó atención a la camilla.

-Skyler...- la reconoció de haberla soñado en su momento para hacerle la carta- ¿Qué le paso?

-Está en un sueño eterno, pero sé que tú puedes ayudarla.

-Eso fue lo que estaba investigando cuando morí- siguió Splendora.

-¿Puedes intentarlo?- insistió Stiles y ella asintió.

-Necesito una conexión emocional...

-Yo lo haré- la interrupió el chico.

-... de un lobo.

*Splendora, te necesitamos, tu descendente a caido y necesitamos de tus servicios. Sal de la tumba que tanto te encierra, olvida la lápida que tu nombre lleva. Te llamamos Splendora Warren Norman.