Never say Goodbye - EunHae (+18)

Lee HyukJae

HyukJae era un joven realmente apuesto y el lo sabía perfectamente...
Alto con cuerpo delgado pero muy bien marcado, cintura envidiable, ojos negros y profundos como la noche sin estrellas, labios gruesos y rojos que podían hacer caer en tentación a cualquier persona.
Actualmente tiene 25 años y su cumpleaños es el 4 de abril... su forma de ser es realmente particular, adora la ropa negra y las motos.
Jeans rasgados, casacas de cuero y tres Piercings adornando sus orejas, el es el típico chico rebelde de emociones al parecer frías, o al menos es que lo que el demuestra con casi todo el mundo.
A los 17 años descubrió su bisexualidad, sabía que le atraían las mujeres (aunque no de manera exagerada)
Sin embargo una noche en una reunión de un amigo suyo, después de varios tragos terminó teniendo sexo con un chico al que nunca volvió a ver... sin embargo esto le sirvió de experiencia y exploro su vida sexual sin arrepentimientos de por medio.
Actualmente se considera un experto en lo que el sexo se refiere, no busca relaciones serias y no está dispuesto a perder el tiempo con eso llamado AMOR.
Tiene buena posición económica lo que le permite darle lujos y gastar cuando se le antoja, gracias al buffet de abogados que su padre fundó después de mucho esfuerzo, tanto el como su familia pueden tener una vida envidiable.

Hijo mayor de Kim Heokyn y Lee Kyunsoon
A la persona a la que más ama y respeta en este mundo es a su hermana Lee Sora. Ella es su confidente y mejor amiga, aunque ella decidió quedarse en Estados Unidos pues ama su libertad, el siempre está en contacto con ella repitiéndole cuanto la ama.

-Ve y busca a Hae le dijo Sora antes de despedirse
Seguro que se alegra de verte, recuerda que ustedes eran los mejores amigos.

- Por favor Noona sabes perfectamente que eso pasó hace muchos años y quizá ni se acuerde de mí y mejor así... sabes que ya no soy aquel niño de entonces.
No tengo tiempo para cursilerias.

-Ya Lee HyukJae!!! No puedes ser tan frío con las personas que quieres, si yo hasta los imaginaba juntos dijo ella

-Deja de inventar historias en esa cabeza tuya, jamás estaría con DongHae y no importa si no lo he visto en años, las cosas no son como antes, ahora tengo otra perspectiva y sabes que si no fuera por la salud de mamá ni siquiera volveríamos a Corea.

-Yo solo digo que aunque tú no recuerdes aquella despedida, yo si lo hago y te aseguro hermanito que esas lágrimas que derramaste durante casi un mes entero, no fueron solo por un simple "amigo"
Pero bueno! El tiempo dirá si tengo la razón o no...

HyukJae suspiró y pensó en DongHae...
¿Se acordaría de el? ¿Como seria ahora? Quizá lo mejor sería no buscarlo y solo seguir con su vida como si nada, total su manera de vivir la vida le gustaba y no estaba dispuesto a cambiar nada de ella.

-Bueno si me permites Noona, tengo que despedirme como se debe de este país...

-Usa condon... le grito ella mientras reía

-Siempre precavido dijo el saliendo de la habitación.

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Llegaron a su antigua casa, estaba tal y como la recordaba, su habitación estaba intacta con todo lo que había dejado, se sentó en la capa y abrió las maletas con sumo cuidado, adoraba tener todo perfectamente ordenando, se levantó y empezó a guardar todo en el ropero, una vez terminó reviso cada cosa de su cuarto, abrió un cajón del escritorio y dentro de un cuadernos encontró unas fotos...
El y Hae salían riendo mientras comían helado, en la siguiente salía Hae encima de su espalda abrazándolo
En la tercera Hae hacia un precioso puchero...
Recordó aquello y sonrió sin poder evitarlo, cuando estaba a punto de guardar las fotos se fijo que había algo escrito a la espalda de una de ellas.

Gracias Hyukkie por estar conmigo y no dejarme, te quiero como las estrellas quieren al cielo.

HyukJae guardo con cariño aquella fotos y decidió ducharse antes de dormir, estaba realmente cansado, el viaje fue realmente largo..
Era viernes por la noche, se sentía como un extranjero en un país nuevo, Heechul su mejor amigo prometió venir a pasar una temporada a Corea y realmente esperaba que eso fuera pronto.

Se acostó y antes de cerrar los ojos recordó a aquel pequeño DongHae sonriendo mientras repetía que lo quería, inconscientemente lo extraño.
Quizá si se pensaba eso de buscarlo, por ahora solo quería dormir y quizá mañana sábado ir a un bar y buscar un poco de diversión.