Never say Goodbye - EunHae (+18)

PERDIDO

DongHae despertó totalmente adolorido, no recordaba en qué momento se quedó dormido pero cuando abrió los ojos solo había oscuridad a su alrededor.
Seguía sentado en la misma esquina de aquella habitación, en aquella horrible casa, lejos de su familia y amigos. Habían pasado varias horas desde que fue secuestrado y llevado a ese frío lugar.

Y ahora estaba ahí solo, esperando a que alguien aparezca, no tenía su celular, no tenía como avisar donde estaba, simplemente estaba perdido y por muy positivo que quisiera ser, todo estaba en contra suya.

Tenía frío, estar sentado en el piso durante la noche no era para nada bonito, cuando lo subieron a ese carro iba solo en camiseta, por lo que ahora estaba sintiendo las consecuencias de no haber llevado una chaqueta.

Después de un tiempo logró escuchar voces a lo lejos, sin embargo no podía entender lo que decían, solo sabía que eran varias personas, tres o quizás más.
De pronto la puerta se abrió y una parpadeante luz se termino de encender, dejando ver a la principal culpable de todo su calvario.

Jessica lo miraba de autosuficiencia y orgullosa de lo que había conseguido, como si quisiera demostrar con eso que ella era la mejor de todas. Dió un par de vueltas antes de detenerse y hablar.

—Vaya vaya... pero mira a quien tenemos aquí... nuestro queridisimo DongHae...— Lo miro fijamente tratando de intimidando y se fue acercando lentamente.

Pero DongHae no bajo la mirada, se la sostuvo de principio a fin, cosa que a ella no le gustó para nada.

—¿Es que acaso no te sorprende verme? —le preguntó

—La verdad es que no —respondió DongHae seguro de si mismo — Verte aquí me resulta normal, sabía que estupideces como está solo se te podrían ocurrir a ti.

—¡Como te atreves a hablarme así! — estiro una de sus manos para jalarle el cabello y uso la otra para abofetearlo muy fuerte, provocando un ardor fuerte en el rostro de DongHae. — Recuerda con quien estás hablando niñita... además, digamos que no estás aquí por simple visita y esto te va costar muy caro.

—Eres una maldita loca enferma —gritó DongHae

Pero ella solo empezó a reír como si estuviera desquiciada, mirándolo con desprecio.

—Ahora me dices loca y enferma, pero antes te morías por mi y estabas en la palma de mi mano, que es donde debiste quedarte por cierto. Pero no fue así, pusiste los ojos donde no debías y a mi nadie me rechaza y menos si es por ti, maldito DongHae.

—Espero que lo que hagas, lo vayas a hacer bien... porque te prometo Jessica que luego de esto, te vas a arrepentir de lo que estás haciendo.

—No te preocupes, no pienso dejar cabos sueños y cuando me canse de ti, me aseguraré de que no digas nada. De eso me encargo yo....

Dicho esto salió de la habitación, dejando a un DongHae temblando de pies a cabeza. Porque aunque demuestre valentía, por dentro moría de miedo.
No saber lo que viene, resultar ser muy desesperante.
Era como ir en un barco a la deriva sin conocer cual sería su destino final.

Se preguntaba que estarían haciendo su mamá y sus amigos, si ya sé habrán dado cuenta de su desaparición
Pensaba también en HyukJae, en realidad el siempre estaba en su mente y lo extraña demasiado, joder claro que si lo hacía. Era algo que ni podía evitar.
Pero su dignidad no le permitía dar el brazo a torcer
Le había dolido demasiado conocer a Hyoyeon y enterarse de ese estúpido compromiso.

Pero eso no evitaba que pensará en el.

Recordaba los momentos juntos, cuando estaban en su cuarto acostado en la cama, abrazados sin decir nada
Solo disfrutando el uno del otro. Cuando jugaban a perseguirse por toda la casa y siempre ganaba el mayor y DongHae terminaba haciendo pucheros.