DESPERTAR

339 36 1
                                    

Me siento totalmente liviano, somo si pudiera flotar
Y a mi alrededor solo hay luz... muchísima luz.
Un camino frente a mi, me invita seguir recto, no siento miedo, no tengo dolor, no siento nada.
Mientras avanzo puedo ver paisajes hermosos, llenos de flores, árboles y pasto. Es como un jardín gigante.
Un lugar precioso, del que no quisiera irme jamás.

No sé dónde estoy, pero no me importa.

Puedo ver siluetas a lo lejos, pero por más que trato no puedo llegar a ellas, me siento tan ligero como la brisa.
Quizá eso me impida seguir avanzando, pero quiero llegar, por algún motivo siento que debo hacerlo.

Trato de hacerlo una y otra vez, pero me resulta imposible moverme de aquel lugar, es como si tuviera los pies pegados, no tengo fuerzas para nada.

Las flores son preciosas, de todos los colores, también hay mariposas volando a mi alrededor y pajaritos que cantan una melodía preciosa. Me produce paz.

Mientras voy mirando todo a mi alrededor, estiro mi mano para tratar de agarrar una pequeña flor azul, un colo hermoso, azul safiro mi favorito. Sin embargo no logro hacerlo, es como si de pronto me hubiera pegado al suelo y no pudiera hacer nada más.

Busco a mi alrededor y veo de pronto a una persona que se acerca a mi, con paso lento pero firme.
Es una silueta más que conocida para mi, un rostro que al verme sonríe y corre para abrazarme.

Papá está frente a mi.

¿Donde estoy? ¿He muerto? ¿Pero...como? Recuerdo aquellos horribles momentos, pero no siento nada.
Llevo mi mano para sentir los latidos de mi corazón, pero ya no están más. No queda nada dentro de mi.
Sin embargo la sensación de vacío me carcome, siento que me falta algo ¿Pero qué? Estoy con papá y eso debería ser suficiente ¿verdad? Claro... pero y entonces porque sigo buscando a mi alrededor algo que no puedo encontrar. ¿Qué busco exactamente?

—Hijo Mío.—Papá me envuelve en un abrazo que me deja sin aliento, un gesto que de pronto me llena de paz.—Te he extrañado tanto mi pequeño Hae.

—Papá... —respondo— Papá te extrañe demasiado, yo... y Mamá te hemos necesitado tanto...

Lágrimas empiezan a bajar por mis ojos, vuelvo a poner la mano sobre el lado izquierdo de mi pecho tratando de encontrar aunque sea un pequeño latido, pero no hay nada... y sin embargo el vacío está ahí.

—Lo sé hijo, ha pasado un tiempo desde que me fui, sin embargo siempre estoy ahí con ustedes, aunque no puedan verme, siempre los he cuidado.

—Es increíble estar aquí contigo papá... Mamá se va poner contenta cuando... le cuen... espera. ¿Ya no podré ver a mamá cierto?

—No hijo. Si tu deseo es quedarte aquí, entonces debes dejar todo lo que amas.

—Pero... pero no sé si quiero dejar todo lo que amo Papá... Mamá, ella me necesita y HyukJae...

HyukJae.. ese nombre, ¿Porqué cuando lo mencionó siento el vacío aún más grande? Acaso.. ¿Es el quién me hace falta? Tal parece que así es.

Que aún sin latidos, mi alma lo necesita

—¿HyukJae?—pregunta Papá.—Entonces por fin se dieron cuenta ¿eh? Tu mamá y yo siempre lo supimos.
Pero no importa lo que yo diga o lo que el mundo crea.
Solo importa lo que tú creas, lo que quieras. Tú y solo tú sabes lo hay en tu corazón.

—Pe-pero ya no late, y tengo un vacío dentro...—Digo señalando mi pecho.

Papá me mira dulcemente y sonríe

—Hijo. Debes volver, este lugar no te pertenece aún.
Quisiera poder pedirte que te quedes aquí conmigo, pero sé que aún tienes una larga vida ahí abajo y que hay muchos sueños tuyos que esperan ser cumplidos.
Tu madre te espera, HyukJae también lo hace, y tus amigos de igual manera. Hijo, tienes una hermosa familia contigo, ve y disfruta de tu vida.

Never say Goodbye - EunHae (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora