☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆
Una semana después.
☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆☆P.O.V. Rocío.
Han pasado nueve días desde el nacimiento de mi William, él es muy feliz y ha crecido muy sano y fuerte. También he estado ignorando a Ryder toda esta semana, me duele hacerlo, pero quiero volver a estar con la Nana y en nuestro cuarto donde todo comenzó. Me suplica, se enoja también me ignora, pero nada de lo que hago o él hace, me lleva a nuestra casita.
- Por favor Rocío, deja de ignorarme, me he enojado mucho y aun así no dejas de ignorarme y ya no aguanto tu rechazo. – Habla suplicante.
- No, Te pido una sola cosa y no quieres dármela. – Digo enojada.
- ¡Ya te dije que no! – Dice alzando la voz un poco.
- Bien, no me des nada, pero tampoco esperes que te preste atención y después no preguntes porque me fui. – Amenazo, claramente jamás lo haré.
- ¡¿Qué dijiste?! – Creo que ahora si está enojado de verdad. – Escúchame bien porque no lo diré dos veces, tú no te vas de aquí, no me dejarás a mí y a mi hijo solos porque... – Se acercó y me tomó de la cintura. – Tú eres mía, solo mía, mía para siempre, mi Luna.
He admitir que sus palabras me encantan. – Si mi amor, solo tuya, pero nos llevarás a la casita. ¿Verdad?
Suspira pesadamente viéndome ceñudo. – No cambiarás de idea. ¿Verdad? – Niego varias veces con mi cabeza moviéndola de lado a lado con los ojos cerrados. – Mi amor nos quedamos porque ambos necesitan estar aquí. Mi cachorro necesita todo el calor posible y este lugar y yo es lo que él necesita.
- Pero tú le puedes dar eso y más, Por favor mi amor llévanos a la casita. ¿Sí? Y te doy todos los besitos que quieras. – Le pongo carita tierna haciéndolo sonreír un poco.
- Está bien, pero todos los besitos que yo quiera y toda la atención que quiera. – Dice travieso.
- Pero no mucha porque también debo cuidar a William. – Le recuerdo.
- Trato o no nos vamos. – Pienso un poco... Realmente William necesita demasiada atención, pero si no lo hago me tendrá aquí por meses.
- Es-está bien, creo. – Contesto, una parte me convence, pero la otra no.
- Te amo amor. – Su áspera voz me enloquece.
- También te amo mi gruñón. – contesto ignorando lo que él provoca en mí.
- Me vuelves a desobedecer, ignorar o amenazar con irte y no caminaras por un mes. – Abro los ojos realmente sorprendida.
- Está bien, perdóname amor, no lo vuelvo a hacer. – Necesito sacar mis buenas armas si no quiero terminar en una silla de ruedas. Él sonríe y asiente.
- Te perdono. – Sonrió, no necesito que me perdone, pero aun así nos besamos muy intenso... William comienza a llorar haciéndonos separar.
- Yo lo atiendo y tú preparas las cosas para irnos.
- Está bien amor. – Dice separándonos y dándome una nalgada.
Sonríe coqueto y yo le sonreí un poco adolorida por la nalgada, camino a la cama y aquí está William, lo tomo y le voy quitando la ropita para revisarlo, al hacerlo veo está sucio; pongo una cubierta de plástico debajo de él, le saco el pañal completamente y comienzo a limpiarlo, al terminar le pongo cremita para las rozaduras y un poco de talco, dejo un pañal debajo de su colita y termino cerrándolo, luego lo cambio con ropita limpia. Lo tomo y me siento en la cama dejándolo en mis piernas, noto que él comienza a buscar mi pecho así que bajo mi blusa y aparto mi brasier, saco suavemente mi pecho ya que últimamente duele, él rápido toma mi pezón y comienza a succionar fuerte... Después de unos diez minutos comienza a llorar desesperado, los separo y compruebo que ya no tengo leche así que lo cambio al otro pecho y cómo en el anterior succiona rápido.
ESTÁS LEYENDO
Mía Para Siempre, Mi Luna. (En Edición)
WerewolfRyder es el Rey Alfa de la manada Gray Moon, la cual es la más antigua de todas, conocida por su fuerza y valentía, además de la fama de ser sádica y despiadada. Él aun no encuentra a su mate. Rocío es una maestra de kinder tierna y maternal quien e...