Capítulo 27

29.5K 1.3K 68
                                    

P.O.V. Ryder.

Despierto con un pequeño peso sobre mi pecho. Dirijo mi vista hacia abajo y aquí está ella, mi hermosa Luna, dormida. Sigue siendo muy hermosa aún dormida. Después de un rato contemplándola me muevo lentamente y salgo de ella con mucho cuidado de no lastimarla, dormimos así toda la noche. Le doy un beso en sus carnosos labios y me levanto de la cama, me dirijo al baño, quiero que me vea perfecto la primera mañana de casados... Termino todo, cepillo mis dientes cuando escucho un golpe seguido de un quejido de dolor. ¡Es mi Luna! Dejo todo y rápido me enjuago la boca para salir corriendo fuera del baño. La veo fuera del nido sentada en el suelo y con las manos presionando sobre su vientre. Mi corazón palpita velozmente debido al susto, corro hacia ella, la tomo suave y la cargo delicadamente para dejarla sobre el nido. Donde puedo notar y oler que sobre las sábanas están los restos de su pureza perdida por mí.

- ¿Mi Luna qué te pasó? - Pregunto preocupado e ignorando el último hecho para no alarmarla.

- Me desperté y no estabas, cómo pude me levanté y caminé, pero no pude porque me dolió muy feo, fue cuando me caí y me empezó a doler mucho más el vientre, pero está bien no es tan grave como parece. Estoy segura que pronto pasará. - Responde tierna como siempre, restándole importancia.

- Nena... Perdón, fue lo de ayer, fue tu primera vez y fui demasiado brusco. - Ahora me siento como un verdadero imbécil.

- No, está bien, todo de ayer fue increíble, ya pasará no te preocupes. - Responde rápidamente tomando mi rostro entre sus manos y dándome un beso.

No le tomo importancia a sus palabras y comienzo a oler su cuerpo; su cuello, pecho, senos hasta que llego a su vientre. Algo extraño pasa, pero no se siente mal si no bien, una sensación se instaló en mi pecho que hace que se infle de emoción y desesperación. Siento un olor único que es el mío, solo lo poseería alguien de la familia real. Cuando eso pasó Dark se volvió loco al igual que yo, sentir eso y reclamarlo como mío, sentirlo mío, solo significa una cosa.

Sigo oliendo, aspiro sobre su piel, me lleno de ese hermoso aroma, es igual al mío, pero dulce. Mi lobo se mueve en mi interior rasguñando las paredes de mi cuerpo, quiere salir y tomar el control, se está volviendo loco.

- MÍO. - No aguanto más. Mi garganta ardia y habla antes de pensar.

- ¿Qué-qué cosa amor? - Pregunta mi luna sin entender.

- MÍO, SOLO MÍO. - Digo posesivo y con mi voz de Alfa.

- A-amor. ¿Qué es tuyo?

- Estás embarazada, tienes a mi cachorro aquí adentro. - Respondo acariciando su vientre.

- ¡¿QUÉ?! Pero aún es demasiado pronto apenas lo hicimos ayer, creo que es imposible Ryder. - habla asustada y se mueve de manera nerviosa.

- No amor es muy posible y está sucediendo, él está creciendo dentro de ti, es cómo yo... Es igual a mí, crece muy rápido y es muy fuerte, está aquí, es el futuro Alfa de mi manada. - No aguanto más y la abrazo y beso con emoción.

- ¡Esto es increíble! - Dice, pero esta vez muy emocionada y acariciando su aún pequeño vientre.

- Te amo mi bebito. ¿Cómo estás allí adentro? - Pregunta cariñosa.

- Está muy bien, pero aún no te he marcado y necesitarás estar fuerte para los dos, la marca te ayudará mucho y ayudará a soportar el embarazo y el parto. - Respondo, ya es momento de hacerlo, debe ser lo antes posible.

- No es peligroso para nuestro bebito. ¿Verdad? - Pregunta tornando su rostro triste.

- No, al contrario, lo fortalecerá aún más, lo hará más fuerte de lo que ya es. - Es necesario para ambos, con ella ambos estarán fuertes, solo deseo protegerlos.

Mía Para Siempre, Mi Luna. (En Edición)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora