XXXIV

554 73 28
                                    

- ¿Estas libre esta noche? - preguntó Fargan mientras le daba un sorbo a la malteada de fresa que había suplicado a Alex que le comprara hasta que éste accedió. 

- Me llevaré algunos de los informes de Samuel a casa  para aligerarle la carga - respondió apenas. 

- ¿Y no prefieres hacer otra cosa? - sugirió. 

- Dios, no me pidas ese tipo de cosas luego de hacerme un berrinche digno de un niño de 5 años - se burló produciendo una risilla de ambos. 

- Se veía deliciosa en el anuncio de la tienda - defendió su bebida. - Realmente esta muy buena, ¿Quieres un poco? - acercó la pajilla hasta los labios de Alex y este le dio un sorbo mientras rodaba los ojos, divertido. 

- Pues mira, te lo perdono porque no está mal - le sonrió. 

- Ya enserio, ¿Esta noche puedes? - Alex sabía lo que eso significaba, y entendía que Fargan se lo pidiera, hace semanas que no tenían ningún encuentro. Lo estaba evitando a decir verdad, temía tener pesadillas y que Fargan estuviese cerca. 

- No estoy seguro - trató de disimular una mueca. - Rub tiene la casa hecha un asco de cajas por la mudanza - justificó. 

- Pues quedamos en mi casa entonces - sus pretextos no eran válidos para el mayor. 

- No lo se... Es que... - no se le ocurrió nada más. 

- Está bien si me dices que no quieres, no tienes que inventar excusas - simplemente fue sincero, el comentario no llevaba malas intenciones de por medio.

- No, no es que no quiera - se apresuró a responder Alex, temiendo haberle hecho sentir mal. 

- ¿Entonces? - el moreno alzó una ceja. 

- Estoy muy estresado estos días y... - 

- Pues justo, necesitas relajarte un poco - recuperó una sonrisa pilla - y yo se como ayudarte - le giñó un ojo y eso hizo que la tensión del menor disminuyera. 

- No lo dudo - le devolvió una sonrisa más discreta - pero no se si estoy en condiciones para eso ahora - rezó para que colara. 

- Vale, tampoco quiero que te sientas presionado - le respondió el mayor sin disminuir su entusiasmo. - Pero que sepas que me estoy conteniendo por ti, ¿Eh? - Alex negó con la cabeza. 

- En realidad no tendrías por que - él y su afán por huir de la situación.

- ¿A qué te refieres? - el mayor ladeó la cabeza, confundido.

- Digo que podrías ir y... - por alguna razón aborrecía la idea - No se, buscar con quien liarte aparte de mi - esperó una respuesta por parte del otro, pero al no tenerla en los primeros segundos continúo - No estas obligado a solo estar conmigo, quiero decir - Fargan frunció el ceño, pero volvió a sonreír. 

- ¿Te molestas conmigo por besar a una chica y ahora me vienes con eso? - ¿acaso no se le podía olvidar lo de la chica nunca?. - No me acostaría con nadie más, no podría - se sinceró nuevamente sorprendiendo al menor. - luego de estar contigo difícilmente disfrutaría de estar con alguien más - Alex trataba de enfocar su mirada al frente en la carretera, pero sentía la pesada y dulce mirada de Fargan sobre él. Hizo su mayor esfuerzo por no sonrojarse. - Aunque parece que no tenemos eso en común - el mayor dejó de mirarlo y agachó la mirada ciertamente entristecido. 

- Ya hemos hablado de eso - le recordó y en el interior de Fargan comenzó una batalla interna. 

Ahora mismo tenía dos opciones: seguir negando lo que sentía por el comisario con el único fin de continuar con sus encuentros casuales o confesarse ahí mismo con el riesgo de ser rechazado y probablemente no poder acercarse a él nunca más. 

Protector of Your Love //Fargexby//Donde viven las historias. Descúbrelo ahora