Jueves, tenía muchas ganas de que sea Viernes, ya estaba cansada fue una semana bastante movidita.
Estábamos con Cande en mi casa tomando mate y viendo una película en Netflix, cuando veo que me llama un nuevo desconocido, dudo en responder pero lo hago.
- Hola? - digo medio con miedo y Candela me mira - Si, soy yo - cuando escucho de dónde me llaman, me tapo la boca con la mano y Candela me mira con cara de que no entiende nada y menos con las caras que hago. - Okey, muchas gracias - corto la llamada y me levanto del sillón.
- Que onda? Quien era? - dice Candela parándose del sillón.
- Boluda - digo alargando la "a" - Me llamaron de Boca, me dijeron que vieron unas fotos que le saque a los de la reserva y quedaron enamorados - Candela no lo podía creer - Me ofrecieron ser una fotógrafa más en el club.
- Decime que vas a decir que si? Sino te mato Alaska - me dice sería
- Me dijeron que me esperan mañana en el Predio para firmar el contrato si es que aceptó.
- No lo puedo creer, amiga estoy muy feliz por vos - Candela me abraza - Vas a estar más cerca de Luis.
- Dale, ya te dije que no me va a dar bola ni aunque quisiera que lo haga - me vuelvo a sentar en el sillón.
- Que poca fé te tenés.
- No es poca fé, es que siempre salen con chicas que estén a su nivel - hago las comillas con mis dedos cuando digo nivel - Y yo no lo estoy, ni siquiera a los talones les llegó.
- Cállate que sos mejor que muchas esas que están a su nivel - mi amiga repite mi acción - Y aparte tenés algo que las demás no tienen.
- Que cosa? - la miro - Los cuernos, los tienen todo el mundo Cande - ríen.
- No tarada, que sos inteligente, y te buscas tus propias cosas, no esperas a que otros te dejen las cosas servidas en bandeja, cosa que muchas esperan eso.
- Si puede ser pero no sé amiga, no creo que tu historia de amor con Luis Vázquez sea posible - me levanto del sillón para ir al baño.
Cande agarran el celular y después me mira - Dijo Pedro que está viniendo y que viene con los chicos - sonríe - Viene Luisito también - me guiña un ojo, yo sonrió nomás y voy al baño.
Apenas salgo del baño escucho cómo suena el timbre, me acerco a la puerta y miro a mi amiga que me veía con una sonrisa de oreja a oreja.
- Ni una palabra de lo de Boca - la señaló con el dedo - Quiero que sea sorpresa. - Candela hace cómo que se cose la boca.
- Ni una palabra.
Abro la puesta y hay estaban, mirándome sonriendo y con bolsas en las manos.
- Ya se que me extrañaste, no hace falta que lo diga - dice Pedro entrando, cosa que también hacen los demás. Luis me mira y sonríe, me saluda y entra.
Dios que perfume y que sonrisa.
Miro a Candela y ella en su mente y nos había casado y hasta habíamos tenido hijos.
- Que hacían? - pregunta Vicente.
- Mirábamos Netflix, nada importante - responde Candela.
- Mañana hay joda, si quieren ir ya están invitadas - dice Pedro mientras sacaba las cosas de las bolsas.
- No juegan ustedes mañana? - está vez preguntó Luis.
- No, ya jugamos hoy a la mañana boludo. Así que las esperamos.