- Buenas. - dice el médico entrando. - Tuviste una amena de aborto, Alaska. - me dice de una, sin vueltas.
- Y porque se provocó eso?. - pregunta Luis.
- Por estrés, estás muy estresada. - me dice. - Ahora te van a venir a buscar para hacerte un ultrasonido, y después si ya te podés ir a tu casa con reposo por 8 días. - yo asiento.
Me llevaron a otra habitación, y la obstetra me hizo el ultrasonido. Por suerte estaba todo bien, y tengo que hacer reposo.
Ya estábamos en mi casa, Luis me ayudó a subir a la habitación así me acuesto, antes de acostarme me cambió de ropa.
- Estás sola?. - me pregunta y asiento. - Me quedó con vos, si no te molesta, obvio.
- Cómo vos quieras. - le digo.
- Me quedó entonces. - sonríe. - Necesitas algo?. - dice antes de salir de la habitación.
- ¿Podés ir a buscar a Ova? - él asiente.
Veo que sale de la habitación y agarró mi celular, le cuento a los chicos lo que me pasó y me dijeron que iban a venir a verme un ratito.
Justo llegaron ellos y Luis con Ova, todos me miraron confundidos porque no se esperaban que esté él acá.
- ¿Quieren tomar mate?. - pregunta y todos asienten. - Okey, voy a poner el agua a calentar. - se va.
- ¿Lo perdonaste?. - pregunta Exequiel.
- ¿Que? No, exe. - le digo. - Me está ayudando nada más.
- Claro, pero no podés estar sola los 8 días. - me dice Rossi. - Necesitas a alguien que te ayude.
- ¿No quieren venir a quedarse conmigo?. - todos niegan. - Que buenos amigos. - se ríen.
- Yo no tengo problema pero no creo que a Luis le guste la idea de que esté yo acá. - dice Leandro Brey sentandose en mi cama.
- Sabes a dónde se puede ir Luis. - él se ríe.
- Pero es un amigo, Alaska. Me siento re zarpado. - se rasca la nuca.
- Y bueno Lean, para que decís eso entonces.
- Pero es posta, no podés estar sola. - habla Marcos.
- Gracias por su preocupación, pero voy a estar bien. - digo. - Cualquier cosa que me pase los llamo o llamo a Luis.
- Creo que está cercanía los va a terminar de reconciliar. - dice Pol.
- ¿Vos estás loco, Guillermo? Pero ni empedo, una infidelidad no se perdona de un día para el otro. - digo.
- No me digas Guillermo, siento que me estás retando. - me dice y nos reímos.
- Les puedo pedir algo?. - todos me miran. - Me pasan el control de la tele.
- Pero está ahí nomás, Alaska. - me dice Leandro.
- Pero no llego. - si llegaba pero ellos estaban más cerca.
- Estírate y vas a ver qué si llegas. - me dice.
- !Dale, Leandro!. - él se ríe. Y me alcanza el control. - Gracias amiguito de mi corazón. - se ríe.
- Ya tiene el nombre del bebé?. - pregunta Marcos. Y aparece Luis, con mate y termo en mano.
- No, todavía no. - lo miro. - No pensamos el nombre del bebé. - le digo a Luis.
- Después podemos hablar de eso. - me dice y asiento. - Ahora viene Ova, se estaba cambiando. - y fue cómo si la hubiera llamado, ella entra a la habitación y se le tira encima a Leandro, se lleva mejor con los arqueros que con los demás, creo.
...
Viernes - 05/08
Nuevo día, y ya estoy aburrida de estar acostada sin hacer nada. Igual me dijeron que puedo levantarme y andar por ahí peeeero...
Luis llevo a Ova al colegio antes de irse, y me trajo el desayuno a la cama, por más que haga lo que haga no va a arreglar nada y no va a hacer que lo perdone, y menos después de lo que me dijo, sigo enojada con él.
Me levanto despacio, así llevo a la cocina la taza y las demás cosas, lavo todo y antes de subir a mi habitación suena el timbre.
- Hola, Ali. - me dice Keila.
- Nos contó todo Luis, y yo re puteamos. - dice Flor.
- Hola, chicas. Pasen. - ellas entran.
- Para tener una amiga así, es mejor no tener nada. - dice Keila.
- Y la verdad que sí, no me esperaba eso de ella. - les digo.
Preparan mate, y después subimos a la habitación. Estábamos las tres acostadas mirando una serie y tomando mate.
- Che si querés nos podemos quedar con vos hasta que te recuperes. - dice Flor.
- ¿Están segura?.
- Si,obvio. Así no estás sola. - dice Flor.
- Chicas cómo ustedes quieran, acá en mi casa son bienvenidas. - digo.
- Mañana nos tenés acá entonces. - sonríen las dos.
Pasamos la tarde las tres, al raro aparece Luis con Ova. Él se quería quedar pero sus hermanas no lo dejaron.
Hablamos más seguido con Julián, él sabe lo que me pasó. Y se preocupo muchísimo. Es rara la situación con él porque hablamos, y arreglamos hasta para que yo vaya y a él lo siguen vinculando con Luciana Salazar.
Ya extraño ir al Predio, estar con los muchachos y compartir la mañana o tarde con ellos. Y me va a costar un montón todo esto.
Estaba acostada con el celular, y escucho voces en la parte de abajo, las hermanas de Luis no eran porque ellas se fueron, Ova tampoco porque está en su habitación haciendo su tarea.
Me levanto, me asomo y era Luis con una chica. Osea, trajo a una mujer a mi casa.
- ¿Que haces acá?. - le pregunto y los dos me miran.
- ¿Y ella quien es, Lu?. - le pregunta. Me miraba a mi, y la miraba a ella.
- La madre de su hijo o hija. - digo sonríendo.
- ¿Que?. - lo mira a Luis. - ¿Me trajiste a la casa de tu novia?.
- Ex novia. - la corrijo.
- Peor todavía. - dice enojada. Se levanta y se va dando un puertazo.
- ¿Que mierda tenés en la cabeza, Luis? Porque un cerebro se ve que no.
- Alaska..
- Deja de decirme Alaska, decime algo, no me digas mi nombre. - él solo me miraba.
- Perdón. - me dice.
- Basta, basta de pedirme perdón, me tenés harta, Luis. - pongo una mano en mi panza.
- Tengo otra oferta de Bélgica y creo que está vez si me voy. - me dice.
- Ya sabes lo que pienso sobre eso, Luis. - digo. - Te podés ir de mi casa, por favor.
- Ali...
- Luis, dale. - me acomodo el pelo.
- Enserio?. - asiento. - Está bien.
Se levanta, agarra sus cosas y se va. Acomodo todo y vuelvo a la cama, que mal me siento.
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Tampoco me convence pero bueno, ya ta.