- Debes tener un montón de preguntas sobre que pasó. - dice Sebastián.
- La verdad que sí. - lo miro.
- A tu mamá la conocí por un amigo, él me la había presentado, después de un tiempo nos pusimos de novios y al año de estar así, quedó embarazada de vos. - lo escucho atenta. - El embarazó era riesgoso, había posibilidad de que muera la madre, la bebé o que las dos sobrevivan. - Candela nos trae un vaso con agua a cada uno y después se va. - Cuando naciste nos habían dicho que la bebé nació sin vida, se me cayó el mundo, tu mamá se quiso separar, y cada uno agarró camino distintos. Pasaron años después y me entero que tú mamá me había mentido en que esa bebé falleció, solamente me lo dijo para yo no me acerque a vos.
- Que clase de mujer tengo de madre. - cada vez me decepcionaba más de mi mamá. - Y después que pasó?
- Cuando me enteré de eso, fue cómo que volví a vivir, mi primer hija, la primer personita que hizo latir fuerte mi corazón estaba viva. - sonrió.
- Y tu familia sabe?.
- Mi esposa, si.
- Y ella que dice?. - hace una mueca. - Si, lo supuse.
- No es una mala mujer, es la madre de mis tres hijos pero para ella solamente familia somos nosotros.
- Y la entiendo, yo no busco nada. Solamente quería saber si soy o no tu hija. - me agarra la mano.
- Fuiste mi primer amor, hija. - lo miro con lágrimas en los ojos. - Espere tanto este momento. - me abraza fuerte.
Nos quedamos hablando un rato más y después se tuvo que ir, más tarde había entrenamiento otra vez, así que voy a buscar a Ova y después nos íbamos directo al Predio.
Llegamos y nos vamos juntas a la oficina, no había nadie en la cancha todavía.
- Hola, Ovi. - levanto la cabeza y era él. - Hola. - me sonríe.
- Todo bien?. - se sienta enfrente y asiste. Ova se va para afuera, y veo a Javi García que la estaba esperando.
- Y vos qué onda? Estás muy distante.
Me estás jodiendo, Luis.
- Mucho trabajo, muchas fotis. - sonrió.
- Siento que me estás esquivando. - lo miro.
- No, para nada. - dejo lo que estaba haciendo. - Porque pensás eso?
- Por tu actitud.
- Por mi actitud?. - me tiro para atrás y me cruzo de brazos, él asiste.
- Tu actitud habla, Alaska. - intento no reírme.
- No te estoy esquivando, pasa que vos andas muy ocupado en tu carrera y tu familia.
- Me huele a excusa. - largo una carcajada.
- Nada que ver, Luis. - me pongo a jugar con la lapicera. - Somos dos personas ocupadas en su trabajo, nada más.
- Claro. - dice y ríe. - Y que pasó con Sebastián?.
- Si, soy hija de Sebastián. - me mira sorprendido.
- Así que sos una Battaglia. - dice y sonríe. - Tengo que tener más cuidado entonces, estoy adelante de la hija de mi DT.
- Te iba a responder cómo debe ser pero me lo guardo. - se ríe.
- Pero es verdad. - lo miro. - Bueno mejor me voy, porque ya estoy temiendo por mi vida. - me río.
- Banca que agarro la cámara y vamos. - se apoya en el marco de la puerta.